El vanadio es un oligoelemento que se encuentra en varios alimentos que son de consumo frecuente, y que gracias a sus requerimientos tan bajos en nuestro cuerpo es muy fácil cumplirlos por lo que no son necesarios los suplementos de este mineral. La cantidad diaria recomendada es de 1 miligramo en las mujeres y hombres, y 0.5 miligramos en niños hasta los 18 años.
Es un excelente catalizador y antioxidante, interviniendo en el potencial redox del metabolismo y aportando una reducción general de los tejidos. El vanadio desempeña un papel esencial y general en la regulación de la fosforilización enzimática. Algunas formas de vida están capacitadas para concentrar el vanadio y en otros organismos, el vanadio es parte de la actividad específica de algunas enzimas.
Alimentos que Contienen Vanadio
Las principales fuentes de vanadio son los mariscos y el pescado, entre los mariscos o frutos del mar se encuentran los camarones, calamares, cangrejo, langosta, langostinos, pulpo, ostras y almejas.
Otros alimentos que poseen vanadio son aceitunas, aceites vegetales, zanahoria, arroz blanco, yema de huevo, avena, aceite de maní, ajo, mantequilla, pimienta negra, col, arvejas, semillas de eneldo, semillas de girasol, hongos, pechugas de pollo, soya, cártamo, perejil, trigo sarraceno y bebidas como el vino y la cerveza.
Beneficios del Vanadio
El vanadio es un mineral muy importante para nuestro cuerpo, ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre, un gran aliado para los diabéticos; este oligoelemento junto con otro mineral como el selenio favorecen la salud cardiovascular, reduciendo el riesgo de sufrir enfermedades del corazón y también previene los niveles altos de colesterol en el cuerpo.
También es bueno para los huesos, de hecho, se dice que el vanadio puede ayudar a prevenir al cáncer en los huesos y otros como el cáncer de colon. Asimismo, influye en la reproducción y el crecimiento del organismo.
Consecuencias del Exceso de Vanadio
Ten presente que es muy poco común que se presente una deficiencia de este mineral, pero es importante controlarlo para no presentar problemas como aterosclerosis o diabetes, esta es una de las razones por las que el suplemento no es viable.
Sin embargo, no se puede exagerar ya que la sobredosis de este mineral puede ocasionar enfermedades más graves como: inflamación gastrointestinal, resequedad en el sistema respiratorio, garganta y ojos, problemas en el sistema nervioso, parálisis en los músculos y articulaciones, mareas, riñones e hígados sangrientos.
Otros Minerales Importantes para el Cuerpo
Hierro
El hierro es un mineral que nuestro cuerpo necesita para cumplir funciones muy importantes. Las recomendaciones diarias son de 8 a 10 mg para los adultos y de 30 a 60 mg para las mujeres embarazadas y lactantes. Este mineral es necesario para metabolizar mejor las vitaminas del grupo B; también es esencial y necesario para la producción de hemoglobina, la mioglobina y ciertas enzimas.
Una buena dosis de hierro en nuestro organismo previene la fatiga, ayuda al crecimiento y corrige la anemia. El hierro también es indispensable para la formación de tejidos conectivos y la creación de hormonas.
Manganeso
El manganeso es un micromineral esencial en el cuerpo, necesario para que el organismo se mantenga sano. Las funciones de este mineral están encaminadas a la regulación de reacciones celulares, también es indispensable para producir la energía que nuestro cuerpo necesita.
El manganeso puede llegar a ser de utilidad en la prevención de osteoporosis, pues fortalece los huesos; ya que favorece la formación de la estructura normal de los huesos. Actúa junto con otros minerales como el calcio, cobre y zinc.
Magnesio
El magnesio es un macroelemento que interviene en importantes procesos fisiológicos. El magnesio es necesario para el metabolismo del calcio, la vitamina C, el fósforo, el sodio y el potasio. Es esencial para el efectivo funcionamiento del sistema nervioso y muscular, mantiene sana la dentadura; y desarrolla un sistema cardiovascular más sano y ayuda a prevenir los ataques cardíacos.
