Estado Cartaginés: características del Estado púnico

Estado Cartaginés

El estado Cartaginés o estado púnico como también se le conoció, fue una civilización en la ciudad de Cartago y territorios dependientes, en la antigüedad clásica.

Al comienzo del imperio, su territorio era solamente la ciudad de Cartago y pequeñas áreas alrededor; sin embargo, desarrolló una alianza, basada en la hegemonía de Cartago, con otras ciudades púnicas ubicabas en el Mediterráneo occidental.

Esto permitió adquirir más ciudades para su dominio, por ejemplo, lo que actualmente se conoce como Túnez; que de hecho sería el corazón del estado Cartaginés. Pero al inicio, como el imperio era tan pequeño, debieron especializarse en comercio marítimo para asegurar su existencia.

Cuando se dio paso a su conquista, entre los siglos V y III a. C, absorbieron los establecimientos dedicados al comercio de los fenicios y crearon unos nuevos en el norte de África, en Ibiza, Cerdeña, Hispania y Sicilia.

Rivales del Estado Cartaginés

A finales del siglo III a. C. y como parte de su proceso de expansión, el estado Cartaginés se convirtió en una gran potencia militar y económica del mediterráneo occidental.

En su camino, se encontró con Roma, que también luchaba por agrandar su territorio, los deseos de ambos de crecer y dominar, los llevaron a tener una rivalidad enorme, dando lugar a grandes guerras como la Guerra Púnica, una de las más trascendentes de la antigüedad.

A pesar de ser una potencia militar, al estado Cartaginés lo derrotó Roma en las 3 grandes batallas que presentaron, hasta llevarlo a su completa desaparición en el año 146 a. C.

Características del Estado Cartaginés

El Estado Cartaginés, también conocido como la República Cartaginesa, fue una antigua potencia política y comercial que se estableció en la región del Mediterráneo occidental, con su centro de poder en la ciudad de Cartago, ubicada en la actual Túnez. Sus características principales son: 

Orígenes fenicios:

Cartago fue fundada por colonos fenicios provenientes de Tiro, una ciudad-estado ubicada en la actual Líbano, alrededor del siglo IX a.C. Como tal, heredó muchas de las tradiciones culturales y comerciales de la antigua civilización fenicia.

Poder marítimo y comercial:

Cartago se convirtió en una potencia marítima y comercial en el Mediterráneo, estableciendo una extensa red de colonias y rutas comerciales que se extendían por el norte de África, la península ibérica, Sicilia, Cerdeña y otras regiones del Mediterráneo occidental.

Sistema político republicano:

A diferencia de muchos otros estados de la antigüedad, Cartago estaba gobernada por un sistema político republicano, donde el poder estaba compartido entre varias instituciones, incluyendo un senado, magistrados electos y una asamblea popular.

Economía basada en el comercio:

La economía de Cartago estaba fuertemente orientada al comercio marítimo y terrestre. La ciudad controlaba importantes rutas comerciales y participaba en el intercambio de productos como metales preciosos, tejidos, cerámica, alimentos y esclavos.

Conflictos con Roma:

A lo largo de su historia, Cartago tuvo una relación tensa con la República Romana, su rival principal en el Mediterráneo occidental. Estas tensiones eventualmente desembocaron en una serie de conflictos conocidos como las Guerras Púnicas, que se libraron entre Cartago y Roma en el siglo III y II a.C.

Innovaciones militares y navales:

Cartago fue conocida por su poderío militar y naval, y desarrolló varias innovaciones en tecnología militar y tácticas de guerra. Su flota naval era una de las más grandes y avanzadas de la antigüedad, y jugó un papel crucial en su expansión y defensa.

Caída ante Roma:

Después de una serie de conflictos prolongados, Cartago fue finalmente derrotada por Roma en la Tercera Guerra Púnica (149-146 a.C.). La ciudad fue completamente destruida por los romanos y su territorio fue anexado como provincia romana.

Religión en Cartago

Adoptaron las tradiciones de los fenicios, que creían en la existencia del espíritu y el alma; el espíritu era el portador de vida con una procedencia divina.

La religión era parte de su cultura y de su vida, conservadores tanto en sus creencias como en la práctica, se mostraban piadosos, pero conservaron la práctica de los sacrificios humanos. Este sacrificio humano, consistía en ofrecer al dios Baal Hammón por medio de rito Molk, la vida del primogénito.

Según excavaciones arqueológicas, se encontraron al menos 20mil urnas que datan de los años 400 a. C. y el 200 a. C, con huesos de bebés recién nacidos, de niños de 2 años y de fetos. Si el bebé nacía muerto, los padres debían sacrificar al hijo más joven.

Organización Política del Estado Púnico

Vivieron la monarquía, con un rey que se nombraba por herencia y que no tenía el poder absoluto; por el contrario, recibía la presión del consejo que eran los más ricos, de sus consejeros y de las asambleas que estaban conformadas por el pueblo.

Por su parte, la República fue un sistema de gobierno compuesto por consejos, asambleas y magistraturas manejadas y monopolizada por la aristocracia. En la República el Senado era la entidad política que constituía el gran poder, lo que lo convertía en la institución política más importante; lo conformaban los miembros de las familias más influyentes y adineradas del Estado Cartaginés.

Con el paso del tiempo esta civilización evolucionó hacia formas de gobierno más populistas y democráticas, derrotando la tiranía, aunque también sufriendo varios intentos por su retoma. Durante una época, el poder cayó en manos de las fuerzas militares con bases en la religión.

Economía de Cartago

El comercio y la navegación estuvieron siempre muy de la mano del desarrollo económico de esta civilización; de hecho, inicialmente el comercio marítimo fue la base de la economía, principalmente por su ubicación y falta de territorio y también por la herencia de los fenicios. De esta manera, Cartago se vio obligado a controlar las rutas comerciales y apoderarse del comercio marítimo.

En cuanto a la cerámica se destacaron piezas como copas y ollas de dos asas, urnas de pedúnculo, enócoes que era una jarra de vino usada para sacar el vino de una vasija más grande, cazuelas cubiertas, lucernas o antiguas lámparas romanas, entre otros.

El declive del Estado Cartaginés

El declive del Estado Cartaginés fue un proceso gradual que se desarrolló a lo largo de varios siglos y estuvo marcado por una serie de factores internos y externos. Aquí están algunos de los principales:

  1. Conflictos con Roma: Las Guerras Púnicas, una serie de conflictos que enfrentaron a Cartago y Roma en el siglo III y II a.C., fueron un factor determinante en el declive de Cartago. Estas guerras, que se libraron por el control del Mediterráneo occidental, debilitaron la economía, el ejército y la influencia política de Cartago.

  2. Derrota en las Guerras Púnicas: A pesar de algunos éxitos iniciales, Cartago sufrió derrotas significativas frente a Roma durante las Guerras Púnicas. La destrucción de su flota naval en la Batalla de las Islas Egadas (241 a.C.) y la devastación de su ciudad durante la Tercera Guerra Púnica (149-146 a.C.) fueron golpes devastadores para la ciudad.

  3. Agotamiento de recursos: Las prolongadas guerras con Roma agotaron los recursos económicos y humanos de Cartago. La ciudad tuvo que dedicar enormes cantidades de recursos a la guerra, lo que afectó su capacidad para mantener su economía y sociedad.

  4. Inestabilidad política interna: Cartago experimentó periodos de inestabilidad política y conflictos internos, especialmente durante las Guerras Civiles Cartaginesas (entre 240 y 237 a.C.). Estos conflictos debilitaron la cohesión interna de la ciudad y socavaron su capacidad para resistir las presiones externas.

  5. Presión externa de Roma: Después de la derrota de Cartago en la Tercera Guerra Púnica, Roma ejerció una presión cada vez mayor sobre la ciudad, imponiendo condiciones económicas y políticas draconianas. La destrucción final de Cartago por parte de Roma en el año 146 a.C. marcó el fin definitivo del Estado Cartaginés como una potencia independiente en el Mediterráneo.

¿Cómo se conoce a Cartago actualmente?

La ciudad de Cartago, que fue un importante centro político y comercial en la antigüedad, se encuentra en la actualidad en Túnez, en el norte de África. La ubicación exacta de la antigua Cartago está cerca de la actual ciudad de Túnez, la capital de Túnez. Por lo tanto, la ciudad moderna más cercana al sitio de la antigua Cartago es Túnez.

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