Para la mayoría de personas escuchar el llanto de un bebé resulta desgarrador y un poco estresante porque nos encontramos ante una situación de desconocimiento total. Y es que nunca sabemos a ciencia cierta por qué está llorando, pero para llevar con más calma esta situación, te vamos a contar las mejores técnicas para calmar el llanto del bebé.
Ten presente que el llanto es la forma de comunicación del recién nacido, es decir, que si llora es por alguna razón. Las más frecuentes son porque tienen hambre, porque tienen frío o calor, porque su pañal está sucio o porque está cansado y quiere dormir y no encuentra la forma de hacerlo. Una vez verificaste que ya comió, que tiene el pañal limpio, y que la temperatura es la correcta y aún no logra dormirse o dejar de llorar, ensaya alguna de técnicas que te vamos a contar.
4 Técnicas para Calmar el Llanto del Bebé
Envolverlo
Esta es una técnica que te recomendamos aprender en el hospital, pídele a las enfermeras que te enseñen a hacerlo. Necesitas una cobija, cobertor o manta lo suficientemente grande para envolver al bebé. A pesar de que puedas pensar que estará más incómodo, que no podrá mover sus brazos con libertad, la verdad es que está técnica los ayuda a que se sientan seguros.
Resulta que esta técnica además de calmar el llanto del bebé porque lo tranquiliza, también promueve el sueño, porque se asemeja al seno materno.
Sin embargo, es importante que tengas en cuenta lo siguiente; es probable que el bebé se acalore por el envolvimiento, para saberlo verifica si el bebé tiene su cabello húmedo por el sudor, mejillas rojas, sudor en la cara o respira rápido.
Usando esta técnica debes acomodar al bebé para que duerma sobre su espalda, es muy importante esto para evitar el riesgo del síndrome de muerte súbita del lactante por usar esta técnica. Si el bebé ya se mueve y se voltea solo es mejor no usar está técnica para calmar su llanto.
Sonidos
Los sonidos tranquilizantes son una gran alternativa para calmar el llanto de nuestros bebés, resulta que ciertos tipos de sonidos los ayudan a recordar los sonidos de cuando estaban en el vientre.
Por ejemplo, ensaya con sonidos de latidos del corazón; también con sonidos monótonos como el sonido que hace un ventilador, o el sonido de la lavadora mientras centrifuga.
Los sonidos monótonos son aquellos que se producen por el repiqueteo de algo golpeando reiteradamente. Otras opciones para emplear son poner una emisora, poner música clásica o repetir mantras, estos tipos de sonidos tranquilizan al bebé porque les recuerda los sonidos del cuerpo como la sangre fluyendo, los ruidos estomacales, entre otros.
Mecerlo y Arrullarlo
Es un consejo probablemente popular, pero que algunos padres no le tienen mucha fe. Resulta que estos movimientos suaves y rítmicos les recuerdan su vida dentro del útero de la mamá y eso los tranquiliza. Ten paciencia, no son técnicas mágicas y tendrás que comprobar una a una a ver cuál es la más efectiva para tu bebé.
En este caso puedes combinarlo con el envolvimiento, entonces envuelve a tu bebé en la cobija, y mécelo o arrúllalo suavemente, ya sea que lo tengas cargado o lo pongas en el coche o una mecedora. Acompáñalo además con el sonido que más le gusto y lo tranquilice.
Masaje
Una técnica infalible que desestresa a bebés, niños y adultos. Existen dos posiciones que puedes ensayar; la primera es cargando a tu bebé en tus brazos acomodándolo sobre su costado izquierdo para favorecer su digestión, con la otra mano comienza a darles suaves masajes en su espalda.
La segunda posición es acomodarlo sobre tu brazo boca arriba y con tu mano libre darle suaves masajes en su barriga; en general, los masajes ayudan a calmar el llanto del bebé y a relajarlo, procurando también que tenga un sueño más reparador. Esta técnica además de relajar el cuerpo del niño, también aumenta el contacto físico entre padres e hijos.
