Remedios caseros para el lupus

Antibióticos naturales y plantas medicinales para el lupus eritematoso sistémico o enfermedad autoinmune crónica

Vamos hablarte de una de las enfermedades autoinmunitarias que impacta sobre cualquier órgano del cuerpo, siendo muy heterogénea, prevalente y crónica, como lo es el lupus:

Qué es, características, síntomas, tipos, causas, consecuencias, principales remedios caseros para el Lupus, medidas preventivas o tratamientos para la enfermedad autoinmune crónica o lupus eritematoso sistémico.

¿Qué es el lupus?

El lupus es una enfermedad autoinmune crónica en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error sus propios tejidos y órganos, causando inflamación y daño en varias partes del cuerpo. Puede afectar a diferentes sistemas y órganos, incluyendo la piel, las articulaciones, los riñones, el corazón, los pulmones y el cerebro.

Los síntomas del lupus pueden variar ampliamente y pueden incluir fatiga, dolor o inflamación en las articulaciones, erupciones cutáneas, fiebre, pérdida de cabello, sensibilidad a la luz solar, problemas respiratorios, problemas renales, trastornos neurológicos, entre otros.

El lupus es una enfermedad crónica y no tiene cura, pero el tratamiento puede ayudar a controlar los síntomas y prevenir brotes. El tratamiento generalmente incluye medicamentos para controlar la inflamación y suprimir el sistema inmunológico, así como medidas para controlar los síntomas específicos y mantener un estilo de vida saludable.

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Características del lupus

Los principales rasgos descriptivos del lupus eritematoso sistémico son:

Afección autoinmune crónica, no es contagiosa, no es cáncer, no tiene curación, con diversos brotes, con un curso cíclico, sistémica, es muy heterogénea, especialidad de la inmunología, reumatología y dermatología. También ataca a las células sana del cuerpo, su etiología se desconoce, es mucho más frecuente en mujeres, impacta sobre cualquier órgano y sistema, no hay dos casos iguales, con un cuadro clínico leve, moderado y grave.

Asimismo, afecta principalmente el sistema nervioso, respiratorio, cardiovascular, músculo esquelético, riñones, la piel y las mucosas.

No existe una prueba para su diagnóstico, el objetivo de su tratamiento es preservar la supervivencia y el 10 de mayo se celebra el Día Mundial de la lucha contra el Lupus.

Síntomas del lupus

El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune crónica que puede afectar a múltiples sistemas y órganos del cuerpo humano. Los síntomas del lupus pueden variar considerablemente entre las personas afectadas, tanto en tipo como en gravedad, lo que a menudo dificulta su diagnóstico y tratamiento.

Fatiga

La fatiga extrema es uno de los síntomas más comunes y debilitantes del lupus. Los pacientes pueden experimentar una sensación de cansancio constante que no mejora con el descanso adecuado.

Dolor e inflamación en las articulaciones

El dolor en las articulaciones, conocido como artritis lupus, es otro síntoma característico. Este dolor puede ser migratorio y afectar diferentes articulaciones en diferentes momentos. La inflamación de las articulaciones puede causar hinchazón, rigidez y limitación en el movimiento.

Erupciones cutáneas

Las erupciones cutáneas son comunes en el lupus y pueden variar desde erupciones en forma de mariposa que se extienden sobre las mejillas y el puente de la nariz hasta erupciones cutáneas escamosas y elevadas en otras partes del cuerpo. Estas erupciones suelen empeorar con la exposición al sol.

Sensibilidad a la luz solar

Muchas personas con lupus experimentan sensibilidad a la luz solar, conocida como fotosensibilidad. La exposición al sol puede desencadenar o empeorar los síntomas del lupus, incluidas las erupciones cutáneas y la fatiga.

Fiebre

La fiebre puede ser un síntoma del lupus, especialmente durante los brotes de la enfermedad. Esta fiebre puede ser baja o alta y puede estar asociada con otros síntomas, como fatiga y malestar general.

Pérdida de cabello

La pérdida de cabello, también conocida como alopecia, puede ocurrir en personas con lupus. Esta pérdida de cabello puede ser temporal o permanente y puede afectar el cuero cabelludo o otras áreas del cuerpo.

Problemas renales

El lupus puede afectar los riñones, causando inflamación y daño renal. Los síntomas de los problemas renales pueden incluir hinchazón en las piernas, pies o alrededor de los ojos, orina espumosa o sangre en la orina, presión arterial alta y cambios en la función renal.

Problemas respiratorios

Algunas personas con lupus pueden experimentar problemas respiratorios, como dificultad para respirar, dolor en el pecho, tos persistente o inflamación en los pulmones.

Problemas neurológicos

El lupus puede afectar el sistema nervioso central, causando una variedad de problemas neurológicos, como dolores de cabeza, mareos, problemas de memoria y concentración, convulsiones o cambios en el estado de ánimo.

Otros síntomas

Además de los síntomas mencionados anteriormente, el lupus puede causar una variedad de otros problemas, como trastornos gastrointestinales, trastornos hematológicos, problemas cardíacos, problemas oculares y trastornos del sistema inmunológico.

Es importante tener en cuenta que no todas las personas con lupus experimentan todos estos síntomas, y la gravedad de los síntomas puede variar de una persona a otra.

Tipos de lupus

El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune compleja y heterogénea que puede presentarse en varias formas.

Lupus eritematoso sistémico (LES)

Este es el tipo más común y grave de lupus. Afecta múltiples órganos y sistemas del cuerpo, como la piel, las articulaciones, los riñones, el corazón, los pulmones y el sistema nervioso central. Los síntomas pueden variar ampliamente y pueden incluir fatiga, dolor articular, erupciones cutáneas, fiebre, problemas renales y neurológicos, entre otros.

Lupus cutáneo

Este tipo de lupus se limita principalmente a la piel y puede presentarse en dos formas principales: lupus discoide y lupus cutáneo subagudo.

• Lupus discoide: se caracteriza por lesiones cutáneas en forma de disco rojo y elevado, que pueden causar cicatrices permanentes si no se tratan adecuadamente.
• Lupus cutáneo subagudo: se manifiesta como erupciones cutáneas escamosas, generalmente en áreas expuestas al sol, como el cuello, los hombros, el pecho y los brazos.

Lupus inducido por fármacos

Algunos medicamentos pueden desencadenar síntomas similares al lupus en ciertas personas. Estos síntomas suelen mejorar cuando se suspende el medicamento causante. Los medicamentos más comúnmente asociados con el lupus inducido por fármacos incluyen hidralazina, procainamida y algunos anticonceptivos orales.

Lupus neonatal

Este tipo de lupus afecta a los recién nacidos de madres con lupus. Es causado por la transferencia de anticuerpos anti-SSA/Ro y anti-SSB/La de la madre al feto a través de la placenta. Los síntomas pueden incluir erupciones cutáneas, problemas cardíacos y hematológicos, aunque generalmente desaparecen a medida que los anticuerpos maternos son eliminados del cuerpo del bebé.

Lupus asociado a enfermedades específicas

A veces, el lupus puede estar asociado con otras enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide, la esclerodermia o al síndrome de Sjögren. En estos casos, se puede presentar una combinación de síntomas y manifestaciones de ambas enfermedades.

Factores de riesgo del lupus

Esta es una enfermedad autoinmune compleja y multifactorial, lo que significa que su desarrollo está influenciado por una combinación de factores genéticos, ambientales y hormonales.

Factores genéticos

Se ha demostrado que existe una predisposición genética para el lupus. Las personas con antecedentes familiares de lupus tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Sin embargo, el lupus no se hereda de forma directa y muchos pacientes con lupus no tienen antecedentes familiares de la enfermedad.

Sexo

El lupus afecta principalmente a mujeres en edad fértil, con una proporción de alrededor de 9 a 1 en comparación con los hombres. Esto sugiere un papel importante de las hormonas sexuales en el desarrollo y la progresión del lupus, aunque la razón exacta de esta disparidad de género aún no se comprende completamente.

Hormonas

Las hormonas sexuales, especialmente los estrógenos, parecen desempeñar un papel en el lupus. Los síntomas de la enfermedad pueden empeorar durante los períodos de cambios hormonales, como la pubertad, el embarazo y la menopausia. Se ha observado que las mujeres con lupus tienen niveles más altos de estrógeno y actividad de linfocitos T activados durante el ciclo menstrual.

Exposición a la luz ultravioleta (UV)

La exposición a la luz solar y a la radiación ultravioleta (UV) se ha asociado con la exacerbación de los síntomas del lupus, especialmente en la piel. La luz solar puede desencadenar erupciones cutáneas características del lupus, como la erupción en forma de mariposa en la cara.

Factores ambientales

Se ha sugerido que ciertos factores ambientales, como las infecciones virales, la exposición a ciertos productos químicos, los medicamentos y el estrés emocional, pueden desencadenar o exacerbar los síntomas del lupus en personas genéticamente susceptibles.

Historial médico

Algunas afecciones médicas, como la enfermedad autoinmune relacionada, como la artritis reumatoide o el síndrome de Sjögren, pueden aumentar el riesgo de desarrollar lupus. Del mismo modo, el lupus inducido por fármacos puede ocurrir en personas que toman ciertos medicamentos, como hidralazina o procainamida, entre otros.

Raza y etnia

Se ha observado que el lupus es más común y grave en ciertas poblaciones étnicas, especialmente entre las personas de ascendencia afroamericana, asiática y latina. Además, los pacientes de estas poblaciones tienden a experimentar una mayor prevalencia de complicaciones renales y una mayor mortalidad asociada con el lupus.

Es importante tener en cuenta que estos factores de riesgo no garantizan el desarrollo de lupus, sino que aumentan la probabilidad de que una persona pueda desarrollar la enfermedad.

Consecuencias del lupus

El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune crónica y compleja que puede tener una amplia gama de consecuencias en la salud y el bienestar de quienes la padecen. Estas consecuencias pueden variar según la gravedad de la enfermedad, los órganos afectados y la efectividad del tratamiento. Entre las consecuencias más frecuentes del lupus están:

Daño en órganos y tejidos

El lupus puede afectar varios órganos y tejidos del cuerpo, incluyendo la piel, las articulaciones, los riñones, el corazón, los pulmones y el sistema nervioso central. Con el tiempo, la inflamación crónica causada por el lupus puede provocar daño irreversible en estos órganos, lo que puede resultar en complicaciones graves y discapacidad.

Problemas renales

La afectación renal, conocida como nefritis lúpica, es una de las complicaciones más graves del lupus. Puede provocar daño renal progresivo, insuficiencia renal y, en casos graves, la necesidad de diálisis o trasplante de riñón.

Problemas cardíacos

El lupus puede aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular, incluyendo enfermedad coronaria, enfermedad de las arterias periféricas, hipertensión arterial y enfermedad cardíaca valvular. Esto puede deberse a la inflamación crónica, la actividad autoinmune y los factores de riesgo tradicionales asociados con el lupus, como el uso prolongado de corticosteroides.

Problemas pulmonares

Algunas personas con lupus pueden desarrollar inflamación en los pulmones, lo que puede provocar dolor en el pecho, dificultad para respirar, tos persistente, inflamación de la membrana que rodea los pulmones (pleuritis) o acumulación de líquido en el espacio pleural (derrame pleural).

Trastornos neurológicos

El lupus puede afectar el sistema nervioso central, causando una variedad de problemas neurológicos, como dolores de cabeza, mareos, cambios en la personalidad, convulsiones, trastornos del sueño y problemas de memoria y concentración.

Problemas de fertilidad y embarazo

El lupus puede afectar la fertilidad y el embarazo en las mujeres. Las mujeres con lupus tienen un mayor riesgo de complicaciones durante el embarazo, como aborto espontáneo, parto prematuro, preeclampsia y problemas de crecimiento fetal. Además, algunos medicamentos utilizados para tratar el lupus pueden ser dañinos durante el embarazo.

Impacto en la calidad de vida

El lupus puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de quienes lo padecen. Los síntomas debilitantes, la fatiga crónica, el dolor, la discapacidad y la incertidumbre sobre el curso de la enfermedad pueden afectar las relaciones personales, el trabajo, la vida social y la salud mental.

Mayor riesgo de otras enfermedades

Las personas con lupus tienen un mayor riesgo de desarrollar otras enfermedades autoinmunes, como la tiroiditis autoinmune, la enfermedad celíaca y la artritis reumatoide. Además, tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades infecciosas debido a la supresión del sistema inmunológico causada por la enfermedad y el tratamiento.

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Remedios caseros naturales para el lupus

Las principales antibióticos naturales o plantas medicinales para el lupus eritematoso sistémico son:

Sol: la fotoprotección y de los rayos ultravioletas para reducir brotes de lupus.

Masajes: para relajar el cuerpo, liberar tensión física y emocional.

Baño de agua caliente: por 30 minutos para estimular el sueño y desinflamar las articulaciones o músculos.

Aceite de onagra: con propiedades antiinflamatorias y puedes consumir en capsulas.

Jengibre: con propiedades antiinflamatorias que puedes obtener hirviendo en una tasa de agua 1 cucharada de raíz de la primera, reposar, colar y tomar una vez al día.

Infusión de hierbas: combinar una mezcla de melisa, ulmaria y flor de trébol rojo y tomar una taza diaria.

Uña de gato: hervir 1 cucharada en polvo de la anterior en 1 lt de agua, reposar, colar y tomar a lo largo del día.

Té verde: con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes y tomar 3 tazas al día ayuda a reducir los síntomas del lupus.

Remedios homeopáticos; para aliviar los dolores en las articulaciones como acónico, apis, acido fluorico, sepia y azufre.

Aceite de oliva: consumir en la dieta o unas cucharaditas en ayunas para mitigar la inflamación.

Vinagre de manzana: estimula la producción de acido clorhídrico, se puede acompañar en la dieta o con un vaso de agua con unas cucharaditas de vinagre una vez al mes.

Aceite de coco: con propiedades antiinflamatorias y lo puedes aplicar en la piel para hidratarla.

Valeriana: excelente para el estrés o depresión, hirviendo una tasa de agua con una cucharada de valeriana, reposar, colar y tomar diariamente.

Suplementos: minerales como el magnesio, calcio, vitaminas como acido fólico, acido pantoténico, A, E, C, D, betacarotenos, espirulina, polen, y dehidroeipandrosterona.

Otras plantas: pasiflora, cúrcuma, romero, oregano y otras.

Medidas preventivas y tratamientos para el lupus

La educación, estilo de vida saludable, dieta equilibrada sin grasa, protección solar, suplementos con dehidroepiandrosterona, vitaminas y ácido fólico. Así como omega 3, no a los hábitos nocivos, descanso, evitar el estrés, hacer ejercicios, yoga y tai-chi.

Asimismo medicamentos antiinflamatorios, esteroides, inmunosupresores, masoterapia, acupuntura, fitoterapia y consultar al médico especialista.

Ningún remedio casero o planta medicinal debe ser sustituto del tratamiento médico