Caspa seca y caspa grasa: diferencias y tratamientos

La caspa es un problema común del cuero cabelludo que afecta a muchas personas en todo el mundo. Puede resultar algo penoso y sin duda molesto, pero afortunadamente existen tratamientos eficaces para combatirla.

Lo primero es identificar qué tipo de caspa tiene, puede ser caspa seca o caspa grasa. Si no tienes claro cuáles son sus diferencias y cómo tratarlas, incluso con remedios caseros, ya te lo vamos a contar.

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¿Qué es la caspa seca y la caspa grasa?

La caspa seca y la caspa grasa son dos tipos diferentes de afecciones del cuero cabelludo que se caracterizan por la presencia de pequeñas escamas blancas o amarillas en el cabello que caen a los hombros. Sin embargo, las causas que provocan la caspa seca o grasa y sus síntomas son diferentes.

La caspa seca, también conocida como dermatitis seborreica, es más común en personas con cuero cabelludo sensible y tiende a empeorar en climas fríos y secos. Se caracteriza por la descamación del cuero cabelludo, que puede parecer similar a la piel seca y escamosa. Además, puede provocar picazón e irritación en el cuero cabelludo.

Por otro lado, la caspa grasa se produce debido a un exceso de producción de sebo en el cuero cabelludo. Esto puede deberse a desequilibrios hormonales, estrés, mala higiene o uso excesivo de productos para el cabello.

La caspa grasa tiende a formar escamas más grandes y grasosas, y el cuero cabelludo puede verse y sentirse grasoso o aceitoso. Este tipo de caspa también puede causar picazón intensa y enrojecimiento.

¿Cómo identificar si tienes caspa?

Si tienes caspa es probable que notes pequeñas escamas blancas o amarillas en tu cabello y hombros, incluso sin rascarte la cabeza.

Además de las escamas, es posible que experimentes picazón, enrojecimiento y sensibilidad en el cuero cabelludo. Al rascarse el cuero cabelludo, es posible que las escamas se desprendan y caigan sobre tus hombros.

Si tienes caspa grasa, también puedes notar que tu cabello se ve y se siente grasoso, incluso poco tiempo después de lavarlo. El cuero cabelludo puede parecer aceitoso y brillante, lo que puede contribuir a la sensación de malestar y una picazón intensa que puede afectar tu tranquilidad.

¿Cómo tratar la caspa seca y la caspa grasa?

Afortunadamente existen varias opciones de tratamiento efectivos para la caspa seca y la caspa grasa. Aquí te contamos algunas recomendaciones:

Para la caspa seca:

1. Utiliza un champú suave y específico para la caspa seca. Busca un champú con ingredientes como el ketoconazol o piritionato de zinc. Estos componentes ayudan a reducir la descamación del cuero cabelludo.

2. Evita lavarte el cabello con agua caliente, ya que puede empeorar la sequedad del cuero cabelludo. Opta por agua tibia o fría.

3. Aplica aceites naturales como el aceite de coco o el aceite de oliva en el cuero cabelludo antes de lavarlo para hidratarlo y aliviar la picazón.

Para la caspa grasa:

1. Utiliza un champú anticaspa diseñado específicamente para combatir la caspa grasa, ten mucha precaución de no usar tratamientos para caspa seca. Busca ingredientes como el ácido salicílico o el sulfuro de selenio, que ayudan a controlar el exceso de sebo y las escamas grasosas.

2. Lava tu cabello con regularidad para eliminar el exceso de grasa. Sin embargo, evita lavarlo en exceso y masajear agresivamente el cuero cabelludo, ya que esto puede provocar una mayor producción de sebo y una irritación en el cuero cabelludo.

3. Evita el uso de acondicionadores o productos para el cabello en el cuero cabelludo, ya que pueden obstruir los folículos capilares y empeorar la caspa grasa. Normalmente los acondicionadores, aceites para el cabello o productos termoprotectores se deben aplicar de medios a puntas.

Tratamientos en casa para controlar la caspa seca y la caspa grasa

Si te gustan más los tratamientos con ingredientes naturales y tu cabello responde bien a estos componentes, puedes ensayar con los siguientes remedios caseros:

Vinagre de manzana: mezcla partes iguales de agua y vinagre de manzana y aplícalo en el cuero cabelludo antes de lavarlo. Deja que actúe durante unos minutos y luego enjuaga. El vinagre de manzana ayuda a restaurar el equilibrio del pH del cuero cabelludo y reduce la descamación.

Te recomendamos hacer esta aplicación un día que no vayas a salir de casa o el fin de semana, pues el olor del vinagre es muy fuerte y tu cabello, aún después del lavado, puede quedar oliendo a vinagre.

Aceite del árbol del té: agrega unas gotas de aceite del árbol del té a tu champú regular y úsalo para lavar tu cabello. El aceite del árbol del té tiene propiedades antifúngicas y antibacterianas que pueden ayudar a reducir la caspa.

Aloe vera: aplica gel de aloe vera en el cuero cabelludo y déjalo actuar durante 15 a 20 minutos antes de lavarlo. El aloe vera tiene propiedades calmantes y ayuda a aliviar la picazón y la irritación, además es súper hidratante.

Consejos para prevenir la aparición de caspa

1. Mantén una buena higiene del cuero cabelludo. Lava tu cabello regularmente con un champú suave y adecuado para tu tipo de cuero cabelludo. Lávalo solo cuando sea necesario, el lavado excesivo puede resecar el cuero cabelludo. Y dejarlo mucho tiempo con la grasa natural puede provocar la aparición de la caspa grasa.

2. Evita el uso excesivo de productos para el cabello, especialmente aquellos que contienen ingredientes agresivos o aceites pesados en caso de que tu cabello sea de raíces grasas.

3. Mantén una dieta equilibrada y saludable. Consumir alimentos ricos en vitaminas y minerales puede ayudar a mantener un cuero cabelludo saludable.

4. Evita el estrés y practica técnicas de relajación como el yoga o la meditación. El estrés puede empeorar los problemas del cuero cabelludo como la caspa.