Imagenología del Nervio Facial

Perfil cara

Marco Luciano Charry, MD*.;
Mónica Esguerra Espinosa, MD**.

Resumen

La mayoría de los casos de parálisis facial son idiopáticas o de Bell y los pacientes con presentaciones clásicas pueden ser diagnosticados y tratados usualmente. Las imágenes son empleadas en aquellos con una presentación atípica con el fin de excluir otras posibles causas.

Palabras clave: Imágenes – Parálisis Facial

Para una apropiada evaluación preoperatoria de los pacientes con parálisis facial, se requieren un conocimiento de la anatomía así como del entendimiento clínico de la localización topográfica de la lesión y aunque en muchos casos esta puede no ser fácil, los estudios de imagen jugarán un mayor valor ( 1,2) ( Figura 1 ).

Parálisis facial supranuclear

Figura l. Parálisis facial supranuclear, respeta los músculos superiores típicamente.
La periférica compromete ipsilateralmente todos los músculos faciales

El núcleo motor del facial se localiza ventral al cuarto ventrículo, ventrolateralmente al núcleo del VI, sus fibras se curvan lateralmente alrededor de la superficie dorsal del núcleo del VI, la cual se le conoce como la rodilla interna y sigue anterolateral para salir en el puente inferior (1).

En su curso a través del puente se asocian fibras sensoriales viscerales que se originan en el núcleo solitario para el sentido del gusto y fibras motoras parasimpáticas para el control de las glándulas salivares (2) (Figuras 2 y 3).

Anatomía esquemática del tronco cerebral

Figura 2. Anatomía esquemática del tronco cerebral en proyección axial
mostrando las relaciones de la rodilla interna del fascículo con el núcleo del VI par.

Anatomía esquemática en proyección sagital

Figura 3. Anatomía esquemática en proyección sagital, demostrando
las relaciones del facial con los núcleos del V y VI pares

Las fibras motoras y sensoriales cursan ventrolateralmente a través de la cisterna pontocerebelosa en una distancia aproximada de 24mm antes de entrar al conducto auditivo interno (CAI).
Los nervios no tienen epineuro, solo los recubre la piamadre lo que lo hace vulnerable durante la manipulación quirúrgica.

El facial continua su curso hacia el hueso temporal a través del CAI junto con las ramas vestibular y coclear del VII (Figura 4 ) y en el CAI que esta dividido en cuadrantes por la cresta falciforme transversal y la barra de Bill ventralmente, se coloca anterosuperiormente y entra a su propio canal a través de pared anterosuperior del CAI siendo el nervio con el curso más largo a través de un canal óseo.

Recorrido cisternal e intracanalicular del nervio facial

Figura 4. Recorrido cisternal e intracanalicular del nervio facial junto al octavo par

Este canal de falopio tiene 3 segmentos: el corto o laberíntico 3-5mm, el timpánico 11mm y el mastoideo 11-14mm (1,3 ) (Figura 5).

Canal del facial y sus diferentes segmentos

Figura 5.Canal del facial y sus diferentes segmentos.

El segmento laberíntico se extiende anterolateralmente desde el fondo del CAI a la porción distal del ganglio geniculado y la cóclea va anterior e inferiormente.
Es la parte más estrecha y vulnerable a la isquemia por la falta de arterias anastomosantes.

Incluido dentro de este segmento, el ganglio geniculado da origen al nervio petroso superficial mayor que lleva las fibras motoras secretoras de la glándula lagrimal.
El petroso superficial menor también con fibras del ganglio geniculado lleva las fibras motoras secretoras de la parótida.

En el 15% de casos el ganglio no presenta recubrimiento óseo lo que lo hace sensible a traumas en cirugía de fosa media. En el ganglio geniculado los segmentos laberíntico y timpánico forman un ángulo de 75% aproximado con un cambio abrupto que se conoce como la rodilla ( Figura 6a y b; TC axial y coronal).

 TC mostrando segmento laberíntico en proyecciones

Figura 6 a y b.TC mostrando segmento laberíntico en proyecciones

El segmento timpánico pasa por debajo del canal semicircular, lateral a la cóclea y su porción distal va justo igualmente lateral y posterior a la eminencia piramidal donde cambia su orientación horizontal a vertical que se conoce como la segunda rodilla ( Figura 7 a y b; TC axial y coronal).

Segmento timpánico en TC, proyecciones axial y coronal.

Figura 7a y b . Segmento timpánico en TC, proyecciones axial y coronal.

Segmento Mastoideo

otorrino27299rev_998a Segmento mastoideo en TC, proyecciones axial y coronal. (b)
FIGURA 8 a y bSegmento mastoideo en TC, proyecciones axial y coronal.

Luego de la segunda rodilla cursa verticalmente debajo de la pared anterior de las mastoides.

Es el segmento más largo de la porción timpánica y en él da origen al nervio del músculo del estribo.

Termina con el nervio cuerda del tímpano que es la rama terminal del intermediario

CLIC AQUÍ Y DÉJANOS TU COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *