Infusión Intermitente o Catéter Heparinizable en Canalización de Venas Periféricas

Permite tener una vía venosa lista para administrar terapia farmacológica o reducir el riesgo de sobre-hidratación en el paciente; se realiza por medio de un adaptador para el catéter intravenoso al cual se le agrega 10 a 100 UI de heparina (depende de la altitud sobre el nivel del mar y las patologías asociadas del paciente) para evitar que se tape con coágulos en los momentos en los que no se este administrando ningún tipo de terapia. Es de anotar que este método no es muy común en la práctica prehospitalaria.

La preparación incluye la educación en términos comprensibles para el paciente de lo que se le va a realizar. La zona a puncionar debe ser sometida a estricta asepsia y posteriormente se ubica el torniquete a una distancia no menor de 5 cms del sitio elegido para la punción.

Se puede canalizar directamente atravesando la piel por encima del vaso o hacerlo junto al trayecto venoso y acceder a éste después. Realizar una u otra técnica dependerá de lo fija que esté la vena en las estructuras adyacentes y de la resistencia a la punción.

Recursos Necesarios

. Cubeta con tapa preferiblemente
. Solución desinfectante
· Algodón estéril
. Catéter intravenoso del calibre seleccionado
. Cinta para fijar
. Solución endovenosa seleccionada
. Equipo de goteo (macro o microgotero
. Tijeras
. Inmovilizadores (para niños o pacientes con excitación motora)
. Torniquete
. Bolsa roja
. Guardián

Descripción Detallada

  1. Lavarse las manos.
  2. Preparar el equipo.
  3. Verificar y rotular la solución, medicamento o sustancia a administrar.
  4. Preparar la sustancia endovenosa a administrar y purgar el equipo de venoclisis sin descubrir la parte distal que se conecta al catéter para no contaminarlo.
  5. No dejar aire en el equipo o las jeringas para evitar un embolismo aéreo.
  6. Explicar el procedimiento al paciente.
  7. Colocar al paciente en una posición cómoda, preferiblemente con la extremidad a un nivel más bajo del cuerpo.
  8. Colocarse los guantes.
  9. Palpar la vena seleccionada.
  10. Una vez seleccionada la vena, hacer la desinfección del sitio, limpiar del centro a la periferia, teniendo presente que en el momento de la venopunción se encuentre seco.
  11. Aplicar el torniquete a 4 dedos aproximadamente del sitio de punción.
  12. Coger el catéter con la mano dominante, retirar el protector del catéter.
  13. Con el bisel de la aguja hacia arriba pasar la piel.
  14. Introducir la cánula o catéter hasta que, el bisel haya penetrado totalmente, en un ángulo aproximado de 15 grados.
  15. Verificar el retorno venoso, es decir, la devolución de la sangre por el sistema de punción.
  16. Retirar el alma del catéter y adaptar el sistema de terapia elegido (venoclisis, tapón de catéter).
  17. Comprobar si el paciente presenta alguna reacción local de extravasación o general de hipersensibilidad a la sustancia administrada.
  18. Fijar el catéter con 3 cintas adhesivas, escribiendo en la última de ellas: hora, fecha, calibre del catéter y nombre de quien realiza la venopunción. La primera cinta se ubica por encima del catéter, abarcando el empate del catéter con el equipo de goteo; la segunda en la piel por debajo del catéter y enlazándose con la primera y la tercera, de mayor diámetro, sostendrá nuevamente piel y catéter.
  19. Cambiar el catéter después de dos intentos por canalizar la vena.
  20. Vigilar frecuentemente el sitio de inserción en busca de complicaciones.
  21. Ubicar el paciente en una posición cómoda de manera que no exista interferencia para el paso del fluido.
  22. Descartar los desechos originados en el procedimiento.
  23. Instalar una nueva solución antes que la anterior se termine, evitando así que el sistema se llene de aire.
  24. Cambiar cada 48 a 72 horas el sitio de venoclisis y cada 24 horas el equipo de venoclisis.
  25. Al retirar el catéter, hacer hemostasia en el sitio de punción con torundas de algodón secas.

Complicaciones

Extravasación: el término de extravasación se refiere al paso o escape hacia los tejidos de un líquido, generalmente sangre, suero o medicamentos, producido por la ruptura ocasional de las paredes del vaso sanguíneo con la aguja o punta del catéter intravenoso. Cuando esto sucede, se debe retirar el catéter y buscar un nuevo sitio de punción. Los signos locales de extravasación son:

. Dolor tipo ardor, que se incrementa con el paso de la solución intravenosa.
. Edema
. Eritema

Si la administración del líquido se hace muy rápida, puede causar en algunos pacientes sobrecarga circulatoria y edema pulmonar.

Efectos adversos por las medicaciones diluidas en el suero, tales como hipertermia, escalofrío, cefalea, náuseas, vómito, inestabilidad hemodinámica. Si esto se presenta, se debe cerrar el goteo monitorizar el paciente y avisar inmediatamente.

Vía Intraósea

Durante la reanimación o tratamiento del shocken pediatría se ha utilizado la vía intraósea cuando no se ha podido establecer una vía venosa, nuevos estudios han demostrado la viabilidad del procedimiento en población adulta. La vía intraósea permite el acceso al plexo venoso medular, el cual tiene como ventaja no colapsarse, ser rápido, seguro y fiable para la administración de cristaloides, coloides, sangre y medicamentos.

La tasa de complicaciones de este procedimiento es menor al 1% dado por fracturas, síndrome compartimental, extravasación de fármacos y osteomielitis.

Sitios de inserción:

. Segmento proximal de la tibia.
. Segmento distal de la tibia.
. Segmento distal del fémur.
. Espina ilíaca antero superior.
. Segmento distal del radio.
. Segmento distal del cubito.
. Esternón.

Dispositivos de canulación intraósea:

. Agujas intraóseas para lactantes, niños y adultos.
. Aguja para aspiración de medula ósea tipo Jamshidi.
. Agujas espinales cortas de grueso calibre.
. Agujas hipodérmicas de grueso calibre.

Técnica para canulación intraósea de la tibia:

  1. Localizar el punto de inserción 3 cm caudal a la tuberosidad tibial en medio de la superficie antero-interna de la tibia.
  2. Aplicar las medidas para técnica estéril.
  3. Apoyar la pierna del paciente en una superficie firme.
  4. Sujetar el borde interno y externo de la tibia con el pulgar de un lado y los dedos índice y medio del otro lado, preferiblemente usando la mano no dominante.
  5. Verificar el punto de inserción.
  6. Introducir la aguja a 90º de la piel y empujarla con una rotación suave y firme a través de la cortical ósea.
  7. Dejar de introducir la aguja cuando se sienta una disminución súbita de la resistencia lo cual indica estar en la cavidad medular.
  8. Desprender la tapa de la aguja intraósea y verificar la adecuada ubicación de esta mediante la aspiración de médula ósea o al inyectar 10 ml de solución salina sin notar resistencia.
  9. Si la inyección de prueba no es satisfactoria retirar la aguja y repetir el procedimiento en la otra extremidad.

Este procedimiento esta contraindicado en caso de fractura del hueso elegido o infección en el sito de punción.

VISITE: GUÍA DE ATENCIÓN MÉDICA PREHOSPITALARIA POR TEMAS

Lecturas Recomendadas

1. Grupo Océano, Manual de La Enfermera. EditorialOcéano. Barcelona, 2.003. 1168 Páginas.
2. Bárbara Kozier/Glenora Erb, Fundamentos de Enfermería Conceptos Procesos y Práctica 5ed, Mc Graw Hill Interamericana Editores S.A, 2002 / 1569 páginas.
3. Servicio seccional de aprendizaje, SENA, Bases teórico prácticas para el ejercicio de la
4. enfermería. Editorial SENA. Antioquia, 1996. 841 páginas.
5. Smith, Sandra F. ; Duell, Donna J. Enfermería básica y clínica, 2da edición, Manual Moderno, México, D.F,1996, 1009 páginas.
6. Beverly Witter DuGas, 4ta edición, Mc Graw Hill Interamericana Editores S.A, / 2000 / 725 páginas.
7. Instituto Politécnico De La Salud. Manual de técnicas y procedimientos de enfermería, 2da edición, editorial OPS, Managua,1992, 263 páginas.
8. Guía de Actuación de Enfermería. Manual De Procedimientos. 1ra edición, Generalitat Valenciana Conselleria De Sanitat. 2003. 332 páginas.
9. Chin Glemaud J. Catéter central de inserción periférica (picc). Educación del paciente. Jackson health system; 2002.
10. Pamela Stinson Kidd, Urgencias en Enfermería, 2da edición, Mc Graw Hill Interamericana Editores S.A, 1998. 604 páginas.
11. 10.David Fernández, Javier Santos, Manual de Enfermería en Emergencia Prehospitalaria y Rescate, Aran Editores. España. 2002. 687 Páginas.
12.www.fisterra.com/material/tecnicas/parenteral

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