El atentado en el Club El Nogal fue un ataque perpetrado por el grupo terrorista de las FARC el 7 de febrero del año 2003. Un carro bomba cargado con más de 200 kg de explosivo C-4 y amonio que explotó dentro del parqueadero del club a las 8:05 pm; cobrando la vida de 36 personas y dejando heridas a más de 200. En el momento de la explosión, al menos 600 personas se encontraban dentro del club. Después de las investigaciones del antiguo Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, se logró determinar que el atentado fue una represalia de las FARC en contra de altos funcionarios del gobierno colombiano y paramilitares que se reunían en ese club; con el objetivo de planear acciones contra los grupos al margen de la ley de izquierda. (Ver también: Atentados en Colombia por el Cartel de Medellín)
¿Quiénes perpetraron el atentado en el Club El Nogal?
Tan pronto se produjo el atentado en febrero de 2.003, el entonces presidente Álvaro Uribe acusó públicamente a las FARC de ser los autores; este ex grupo guerrillero negó su responsabilidad, pero hizo una declaración como tipo justificación, de que en este club funcionarios del gobierno, políticos, empresarios y paramilitares se reunían frecuentemente.
Aunque las FARC inicialmente negaron su autoría en el atentado en el Club El Nogal, en julio del año 2.004 la Fiscalía General de la Nación acusó a las FARC-EP como autores de este atentado; acusándolos de delitos como: terrorismo, tentativa de homicidio con fines terroristas, homicidio con fines terroristas y daño en bien ajeno.
La Fiscalía dijo que contaba con pruebas de que el Secretariado de las FARC le dio la orden al comandante de la Columna Móvil Teófilo Forero, Hernán Darío Velásquez, alias ‘El Paisa’, de realizar el atentado. De hecho, fue alias “El Paisa” quien ingresó el carro bomba al parqueadero del Club El Nogal; “El Paisa”, abandonó el proceso de paz y actualmente hace parte de la disidencia “Segunda Marquetalia”.
Las pruebas, la Fiscalía las recolectó a través de declaraciones de diferentes detenidos, con grabaciones e interceptaciones de llamadas. Por este atentado, la Fiscalía acusó a más de 20 personas, entre ellos miembros del Secretariado como Raúl Reyes, Manuel Marulanda, Iván Márquez, Alfonso Cano, Mono Jojoy y Timochenko. Luego de la firma del Acuerdo de Paz y como parte del proceso de verdad, justicia y reparación, las FARC reconocieron ser los autores del atentado en el Club El Nogal.
Momentos de pánico y caos después del atentado
A las 8:05 pm del viernes 7 de febrero de 2.003, una explosión se sintió en el Club El Nogal. Un carro megane rojo que estaba parqueado en el Club explotó con al menos 200 kilos de C-4 y amonio. Los explosivos estaban escondidos en las sillas traseras del carro.
Los parqueaderos ocupaban 4 pisos, luego de la explosión, la fachada de estos pisos quedó completamente destruida. Por dentro se desató un incendio de grandes magnitudes que entre 14 carros de bomberos controlaron.
Algunos de los heridos eran transeúntes que iban por la calle y recibieron los escombros de la fechada luego de la explosión. Desde las ventanas de los otros pisos, las personas se asomaban gritando por ayuda y agitando pañuelos en señal de auxilio.
Otros crímenes de las FARC
A las FARC se les atribuye al menos 240 masacres que dejaron 1.400 víctimas. Por ejemplo, la masacre de la Chinita en Apartadó, la masacre de Urrao, San Carlos y Puerto Valdivia en Antioquia, la masacre de indígenas Awá en Nariño, entre otras.
Otros crímenes cometidos por este grupo guerrillero fueron secuestros. Se calcula que secuestraron al menos 9.447 personas, de las cuales cerca de 522 murieron en cautiverio. En cuanto a los atentados se les atribuyen 3.274 actos terroristas como mínimo, afectando a la población civil, infraestructura de entidades del gobierno y petroleras.
Proceso judicial y las consecuencias legales del atentado en el Club El Nogal
El atentado en el Club El Nogal, perpetrado el 7 de febrero de 2003, generó un complejo proceso judicial en Colombia que buscó hacer justicia por las víctimas. Y, además, asegurar que los responsables enfrentaran las consecuencias de sus actos.
Investigación y acusaciones
Después del ataque, las autoridades colombianas comenzaron una investigación exhaustiva para identificar a los responsables del atentado. La Fiscalía General de la Nación, junto con otras agencias de seguridad, recolectó pruebas mediante interrogatorios, declaraciones de testigos, grabaciones e interceptaciones de llamadas.
En julio de 2004, la Fiscalía acusó formalmente a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) como responsables del atentado. La acusación se centró en los delitos de terrorismo, tentativa de homicidio con fines terroristas, homicidio con fines terroristas y daño en bien ajeno. Las pruebas presentadas incluían testimonios de miembros detenidos de las FARC y evidencias sobre el involucramiento de altos mandos del grupo guerrillero. Por ejemplo, el Secretariado de las FARC y el comandante de la Columna Móvil Teófilo Forero, Hernán Darío Velásquez, alias ‘El Paisa’.
Juicios y condenas
El proceso judicial llevó a la acusación de más de 20 personas, incluyendo a figuras prominentes del Secretariado de las FARC, como Raúl Reyes, Manuel Marulanda, Iván Márquez, Alfonso Cano, Mono Jojoy y Timochenko. Estos líderes fueron señalados como responsables directos de planear y ejecutar el atentado.
A pesar de la evidencia sólida presentada por la Fiscalía, el proceso judicial enfrentó desafíos significativos. Muchas de las figuras acusadas estaban en la clandestinidad o fuera del país, lo que complicó los esfuerzos para llevarlos a juicio. Sin embargo, algunos miembros de las FARC fueron arrestados y condenados en relación con el atentado, recibiendo penas de prisión por sus roles específicos en el ataque.
Impacto en las leyes colombianas
El atentado en el Club El Nogal tuvo un impacto profundo en la legislación y políticas de seguridad en Colombia. En respuesta a la creciente violencia y a los atentados terroristas, el gobierno colombiano implementó reformas legales para fortalecer la lucha contra el terrorismo y mejorar la seguridad nacional.
Reformas a las leyes antiterroristas: se promovieron reformas en las leyes antiterroristas para ampliar las definiciones y sanciones relacionadas con actos de terrorismo. Estas reformas incluían medidas más severas para la persecución de grupos guerrilleros y la protección de víctimas.
Fortalecimiento de la justicia penal: se hicieron esfuerzos para mejorar la capacidad del sistema judicial para enfrentar casos de terrorismo. Se incluye la creación de tribunales especializados y la adopción de nuevas técnicas de investigación y procesamiento.
Proceso de paz y acuerdo de justicia: el atentado también influyó en el proceso de paz entre el gobierno colombiano y las FARC. Durante las negociaciones para el acuerdo de paz, se discutieron temas relacionados con la justicia transicional, el reconocimiento de responsabilidades y la reparación a las víctimas. El acuerdo finalizó con el reconocimiento por parte de las FARC de su responsabilidad en el atentado. Estonbuscó ofrecer una forma de justicia restaurativa para las víctimas y sus familias.
