En el dinámico ecosistema del comercio y la logística en Colombia, la última milla representa el tramo más corto pero también el más desafiante de toda la cadena de suministro. Este eslabón final —que va desde el centro de distribución hasta la puerta del cliente— concentra gran parte de las expectativas del consumidor y los costos operativos de las empresas.
Con el auge del comercio electrónico, la digitalización del consumo y las nuevas exigencias de inmediatez, optimizar la logística de última milla se ha convertido en una prioridad estratégica para compañías de todos los tamaños. En este artículo exploramos los principales retos que enfrenta este proceso en Colombia, así como algunas soluciones tecnológicas y operativas que están marcando la diferencia.
¿Qué es la logística de última milla?
La logística de última milla es el tramo final en el proceso de distribución de un producto, que va desde el centro de distribución o punto de despacho hasta el destino final: el cliente. A pesar de ser la etapa más corta en distancia, suele ser la más compleja y costosa de toda la cadena logística, ya que implica múltiples variables operativas, geográficas y de servicio al cliente.
Esta etapa es crítica porque representa el punto de contacto directo entre la empresa y el consumidor final. Una entrega tardía, fallida o poco eficiente puede afectar negativamente la experiencia del cliente, mientras que una entrega rápida y confiable puede convertirse en un factor de diferenciación competitiva.
En contextos como el colombiano, donde coexisten grandes ciudades con alto nivel de congestión y regiones rurales de difícil acceso, la última milla plantea desafíos importantes que requieren soluciones innovadoras, escalables y adaptadas a cada entorno.
Los grandes desafíos de la última milla en Colombia
En un país con características geográficas y sociales diversas como Colombia, implementar una logística de última milla eficiente implica superar múltiples obstáculos. Las empresas que operan en este entorno deben entender las particularidades del territorio, las expectativas del consumidor y los costos asociados, si desean mejorar su desempeño logístico y su competitividad.
1. Cobertura geográfica desigual
Colombia es un país con una geografía compleja: zonas rurales de difícil acceso, ciudades densas con problemas de movilidad y regiones con baja infraestructura vial. Esto representa un reto logístico importante, especialmente para empresas que buscan una cobertura nacional eficiente y constante.
2. Congestión urbana y tiempos de entrega
El tráfico en ciudades como Bogotá, Medellín o Cali puede afectar gravemente los tiempos de entrega. La restricción de movilidad para vehículos de carga y la necesidad de entregar en franjas horarias estrechas elevan los costos e incrementan el riesgo de incumplimiento.
3. Altas expectativas del consumidor
El cliente actual espera entregas rápidas, seguimiento en tiempo real y opciones flexibles. En un entorno donde el “mismo día” o incluso las “2 horas” se están volviendo estándares, cumplir con estas expectativas sin sacrificar rentabilidad es un gran desafío.
4. Costos operativos elevados
La última milla puede representar hasta el 53% del costo logístico total en algunos casos, según estudios internacionales. Esto se debe a factores como el bajo volumen por ruta, múltiples intentos de entrega y logística inversa.
Soluciones para una última milla más eficiente
A pesar de estos desafíos, existen múltiples estrategias y herramientas que pueden ayudar a las empresas a mejorar la eficiencia, reducir costos y ofrecer una experiencia de entrega superior. Muchas de estas soluciones ya están en marcha en Colombia y muestran resultados prometedores.
1. Microcentros urbanos de distribución
Los microfulfillment centers permiten establecer pequeños puntos de distribución cercanos a los consumidores, especialmente en zonas densamente pobladas. Estos centros ayudan a acortar los tiempos de entrega y a gestionar mejor los picos de demanda, reduciendo el costo por kilómetro recorrido.
2. Rutas optimizadas con inteligencia artificial
El uso de algoritmos para planificar rutas permite minimizar el tiempo en tránsito, evitar zonas congestionadas y reducir el consumo de combustible. Las herramientas de IA también pueden adaptarse en tiempo real a eventos inesperados como accidentes o cierres viales.
3. Entregas colaborativas y puntos de recogida
Modelos de entregas compartidas, lockers inteligentes o alianzas con tiendas locales ayudan a ampliar la cobertura sin aumentar significativamente los costos. Estos formatos son especialmente útiles en zonas de difícil acceso o con baja densidad de entregas.
4. Vehículos alternativos y sostenibles
La implementación de bicicletas eléctricas, motos eléctricas o incluso drones (en pruebas controladas) está ganando relevancia en entornos urbanos. Estos vehículos no solo reducen emisiones, sino que permiten sortear la congestión de manera más ágil.
5. Tecnología de seguimiento en tiempo real
Sistemas de rastreo accesibles para el cliente final y el operador logístico permiten mejorar la coordinación de entregas, reducir intentos fallidos y generar confianza. El feedback del cliente en tiempo real también permite hacer ajustes rápidos y mejorar el servicio.
Casos de avance en Colombia
En el contexto colombiano, empresas como Servientrega han impulsado soluciones innovadoras como el servicio Ya Mismo, que permite entregas urbanas en menos de tres horas con seguimiento digital, ideal para resolver urgencias corporativas. Este modelo refleja cómo la combinación de tecnología, cobertura y experiencia puede hacer viable una última milla eficiente incluso en ciudades con alta congestión.
Por su parte, algunas plataformas de delivery y retailers están adoptando flotas sostenibles, hubs urbanos y modelos híbridos de entrega para responder mejor a las necesidades del cliente moderno.
Preguntas Frecuentes (FAQ)
¿Qué es la logística de última milla?
Es la etapa final de la entrega de un producto desde el centro de distribución hasta el cliente. Es clave para la satisfacción del usuario.
¿Por qué es tan costosa la última milla?
Por la fragmentación de rutas, intentos fallidos, baja densidad de entregas por zona y alta demanda de personal operativo.
¿Se puede mejorar la última milla sin grandes inversiones?
Sí. Existen soluciones tecnológicas escalables como software de ruteo, lockers o servicios tercerizados para empresas de todos los tamaños.
¿Qué tipo de empresas se benefician más de optimizar esta etapa?
E-commerce, salud, alimentos, retail y cualquier negocio que haga entregas frecuentes a clientes finales.
¿Qué pasa si una entrega de última milla falla?
Puede haber sobrecostos, pérdida de reputación y disminución de la fidelización del cliente.
Conclusión
La logística de última milla en Colombia es uno de los principales retos para las empresas que buscan ser competitivas, eficientes y centradas en el cliente. Sin embargo, también es una gran oportunidad para innovar, diferenciarse y construir una experiencia de entrega de alto valor.
Invertir en tecnología, alianzas estratégicas, sostenibilidad y modelos operativos ágiles permitirá a las empresas no solo reducir sus costos, sino también entregar promesas —y productos— con precisión.