Reducir nuestro consumo de azúcar diario debería ser nuestra premisa, la Organización Mundial de la Salud, OMS recomienda consumir tan solo 50 gramos de azúcar al día, es decir más o menos 12 cucharaditas para un adulto. Sin embargo, sabemos que para muchos es indispensable endulzar las bebidas o ciertos alimentos, por eso, aquí te vamos a contar cuáles son los mejores sustitutos del azúcar que puedas incorporar en tu alimentación.
Los Mejores Sustitutos del Azúcar
Estevia
La estevia se obtiene de la planta Stevia originaria en Suramérica en las zonas subtropicales y tropicales, es un edulcorante artificial de origen vegetal, debes saber que normalmente al producto final se le agrega un extracto químico. La buena noticia es que la estevia no tiene calorías, y a pesar de ser mucho más dulce que el azúcar, es apta para los diabéticos.
La Food and Drugs, FDA expresó que este sustituto del azúcar es seguro para su uso en bebidas y alimentos, por lo que generalmente verás que los postres, tortas o recetas saludables las preparan con estevia.
Aspartamo
Es muy parecido a la estevia, pero son sustitutos del azúcar diferentes, es también bajo en calorías y más dulce que el azúcar, así que para endulzar una taza de café o jugo necesitarás una cantidad muchísimo menor que la de azúcar.
Según la FDA el aspartamo es seguro, de hecho, desde el año 1.981 es un aditivo alimentario aprobado por la FDA. De hecho, estudios del Instituto Nacional del Cáncer han demostrado que no existe relación entre el uso de este sustituto y problemas de salud graves como el cáncer.
Miel
La miel es uno de los edulcorantes más antiguos pues es un producto natural, si bien es un endulzante muy rico, su aporte calórico es alto; debes saber que 100 gramos de miel le aportan al cuerpo 310 calorías. Pero a diferencia del azúcar refinado que solemos consumir, a la miel se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y antibacterianas.
La miel es un endulzante natural rico en antioxidantes, contiene minerales como hierro, calcio, cobre, zinc, magnesio, potasio y fósforo; y vitaminas como la B, E, D y C. Sin embargo, es importante que sepas que, a pesar de sus beneficios, la miel no es apta para los diabéticos ni para aquellas personas que deben controlar sus niveles de azúcar en la sangre.
Sirope de Agave
Es muy parecido a la miel, pero su consistencia es más ligera, lo que permite que se disuelva mejor en las bebidas. Este sustituto del azúcar se produce del jugo de la penca de agave, al ser un edulcorante natural le aporta a nuestro cuerpo minerales y vitaminas.
Sin embargo, al ser natural no significa que sea bueno para la salud si se usa a largo plazo, resulta que este sirope al igual que la miel y el azúcar tiene un aporte calórico muy alto. A largo plazo puede llegar a aumentar el índice glucémico, contribuir a la resistencia a la insulina, aumentar el riesgo de diabetes tipo 2 o provocar hígado graso.
¿Por Qué el Azúcar no es Tan Bueno?
Lo primero que debes saber es que el azúcar es adictivo, probablemente por eso es tan difícil dejar su consumo, incluso hasta reducirlo. Pero una buena forma de comenzar es dejar la comida envasada, pues al menos el 80% de este tipo de comida tiene azúcar añadido.
Y es que las consecuencias del exceso de azúcar en nuestro cuerpo son claras: aumenta el riesgo de sufrir enfermedades como hipertensión arterial, insuficiencia renal crónica, diabetes, hígado graso y cáncer de páncreas.
También, el exceso de azúcar provoca aumento de peso y obesidad y deterioro de las cavidades dentales, pues sirven como alimento para unas bacterias que producen un ácido y dañan el esmalte de los dientes. Según estudios, por ejemplo, consumir gaseosas o bebidas energizantes diariamente, aumenta el riesgo de sufrir diabetes tipo 2.
Ten presente que el azúcar que le proporcionamos a nuestro cuerpo no solo viene del endulzante, de las comidas dulces como postres, de las salsas o las gaseosas; resulta que la fruta también tiene azúcar, es un tipo que se le conoce como fructosa.
La diferencia, es que, al consumir una fruta, además de recibir la fructosa, también nuestro organismo recibe vitaminas, minerales y antioxidantes; a diferencia de una gaseosa, que solo proporciona calorías y azúcares, lo que se conoce como calorías vacías.
En este orden de ideas es muchísimo mejor que nuestro cuerpo reciba el azúcar de la fruta, por eso, si acostumbras a comer frutas todos los días, ten presente que tu consumo de otros azúcares debe ser menor; te recomendamos reducir el consumo de alimentos procesados, utilizar endulzantes naturales, evitar las salsas y gaseosas, y comer postres preparados con los sustitutos del azúcar que te contamos antes.
