In Memoriam, Académico Luis Guillermo Forero Nougués

Académico Zoilo Cuéllar-Montoya
Secretario General
Academia Nacional de Medicina

Abrió el profesor Forero Nougués los ojos a la vida en la hermosa ciudad de Bucaramanga, enclavada en las montañas de Santander, el 23 de enero de 1910 y, después de terminar su educación secundaria, viajó a Santiago donde, en 1938, recibió su título de Médico de la Universidad de Chile.

En los años siguientes realizó sus estudios de especialización en medicina interna en esa misma Universidad y luego regresó a Colombia, a Bogotá, donde complementó su formación de postgrado en el Hospital San Juan de Dios.

El 25 de septiembre de 1942 recibió, de la Academia Nacional de Medicina de Colombia, el Premio “Carlos Esguerra” para el mejor residente de medicina interna de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional.

Posteriormente viajó a Londres y en la University College de la Universidad de la capital británica y en el National Heart Hospital de la misma ciudad, se especializó en cardiología.

Desde 1948, poco después de su regreso a Bogotá, donde se estableció, fue profesor de patología, de clínica terapéutica y de electrocardiografía en el Alma Mater. (Lea: In Memoriam Académico Juan Jacobo Muñoz Delgado)

En 1976 publicó el libro “Electrocardiografia. Estudio de casos” y, dos años después, editó su traducción al Castellano del texto “Hipertensión arterial”, original de James C. Hutchison.

Sus méritos y sus selectas cualidades personales lo hicieron merecedor, en 1991, durante la presidencia del Académico Efraim Otero Ruiz, distinción como Miembro Honorario de la Academia Nacional de Medicina de Colombia, nombramiento que supo apreciar en todo su valor, convirtiéndose en uno de los más asiduos asistentes, tanto a las sesiones solemnes como a las especiales y a las ordinarias de la Corporación.

Son numerosas las instituciones científicas y profesionales, nacionales y extranjeras, a las cuales perteneció el profesor Forero Nougués y fueron muchas sus publicaciones científicas en el campo de su especialidad.

En 1 1968 fue nombrado Profesor Visitante de la Universidad de París y recibió condecoraciones de los gobiernos de Inglaterra, España y Colombia, así como de instituciones científicas y docentes.

Resuenan aún en los oídos de quienes frecuentamos con él las actividades académicas, sus sabias y oportunas palabras, en una dicción cargada de un inocultable acento de Oxford, acompañada siempre de expresivos movimientos de sus manos.

En la soledad de su apartamento, el pasado 5 de mayo de 1997, posiblemente en horas del amanecer, le sobrevino la muerte, que enluta a una familia y llena de pesar a la comunidad científica, a sus muchos alumnos, a sus pares.

La Academia Nacional de Medicina deplora su desaparición y hace llegar este mensaje de condolencia a sus familiares y amigos.

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