Síndrome de Resección Transuretral de Próstata, Exámenes Paraclínicos
Electrocardiograma
Presentaron cambios electrocardiográficos importantes 10 (7.8%) pacientes, signos de sobrecarga de volumen 1 (0.8%) paciente, signos de isquemia 9 (7%), no se observaron los cambios asociados a trastornos hidroelectrolíticos en este grupo de pacientes. Estos signos electrocardiográficos no significan la presencia de sintomatología en todos los casos. La frecuencia de los cambios electrocardiográficos encontrados está de acuerdo con los reportes hechos en la literatura previa a este estudio lo que sugiere que la presencia de los mismos sea quizá más frecuente de lo que se observa en la práctica clínica y que en muchos de los casos no se encuentran ya que no son buscados permanentemente.
Variaciones de sodio
La variación en las cifras de sodio en estos paciente es el parámetro más ampliamente estudiado. La frecuencia encontrada en este estudio está de acuerdo también con las encontradas en estudios preliminares y sus reportes: 46.1% de los pacientes presentaron variaciones de sodio mayores de 5 meq/L cuando la medición se hizo en postoperatorio inmediato y 47.7% cuando se hizo la medición en el primer día de postoperatorio hacia las 24 horas de la cirugía. Cambios mayores de sodio se encontraron frecuentemente, cambios mayores de 10 meq/L se encontraron en 28.7% y 31.1% de los pacientes en las mediciones del postoperatorio inmediato y a las 24 horas respectivamente, variaciones mayores de 15 meq/L se encontraron en 1.6% y 3.9% de los pacientes en las mismas medicio-nes; en estos pacientes la variación de sodio tiene una correlación estadísticamente significativa cuando esta se compara con la aparición de sintomatología presente en el síndrome de resección transuretral de próstata en los diferentes momentos en los que las muestras fueron tomadas: en el postoperatorio inmediato (p<0.0055), en el primer día de postoperatorio (p<0.00059) y las 48 horas en el segundo día postoperatorio (p<0.0073). De la misma forma también se encuentra relación estadísticamente significativa entre la magnitud de la variación del sodio sérico y la aparición de los signos encontrados que hacen parte del síndrome de resección transuretral de próstata, en el postoperatorio inmediato (p<0.0088), a las 24 horas (p<0.000001) y a las 48 horas (p<0.0078). Con razón es que este es el parámetro de laboratorio que primero fue descrito y el más ampliamente estudiado; por lo anteriormente mencionado se encuentra una estrecha relación entre la magnitud del decremento del sodio y la aparición del síndrome de resección transuretral de próstata y su diagnóstico.
Gráfica 1
Variación del Sodio
SODIO
Variación de potasio
Se encuentran variaciones de potasio mayores de 1 meq/L en 43 (33.6%) de los pacientes en el postoperatorio inmediato y 47 (36.7%) de los pacientes en el primer día de postoperatorio; el decremento del potasio en relación con la aparición de síntomas de síndrome de resección transuretral de próstata es estadísticamente significativa en el postoperatorio inmediato (p<0.0024). Tam-bién se encuentra relación significativa entre el decremento del potasio y la aparición de signos del síndrome de resección transuretral de próstata (p<0.03).
Gráfica 2
Variación del Potasio
POTASIO
Variación de calcio
Se encontraron decrementos en las cifras del calcio sérico mayores de 1 meq/L en 11.1% de los pacientes y su relación con la aparición de signos de síndrome de resección transuretral de próstata fue estadísticamente significativa (p<0.018).
Gráfica 3
Variación del Calcio
CALCIO
Factores de riesgo durante la cirugía
Existen varios factores de riesgo que se han descrito previamente y que dependen del procedimiento mismo entre los que se encuentran el tiempo de la resección, la clase de irrigante utilizado, la cantidad de irrigante, la altura a la cual es colocada la bolsa de irrigante, el tamaño de la bolsa empleada, la técnica quirúrgica y los hallazgos intraoperatorios tales como la evidencia de lesión de la cápsula o la apertura de senos venosos durante la cirugía. Debido a la gran cantidad de factores existente que pueden influir sobre la frecuencia de aparición del síndrome de resección transuretral de próstata y sobre su severidad se estableció para el presente estudio que en todos los casos la altura de la bolsa de irrigante fuera puesta a 40 cm sobre la mesa para contar con una presión generada por la columna de líquido constan-te: todas las bolsas de irrigante fueron de 3000 ml de capacidad. Estos dos últimos factores no fueron tenidos en cuenta para el análisis debido a que siempre fueron constantes.
El irrigante
No se encontró diferencia significativa entre el tipo de irrigante usado, agua destilada o solución de glicina al 1.5%, y su relación con la aparición de signos, síntomas o el diagnóstico de síndrome de resección transuretral de próstata. La cantidad de irrigante usada podría tener una relación importante con la aparición del síndrome, sus síntomas o sig-nos; sin embargo, por el tamaño de la muestra no es posible en este caso aplicar pruebas estadísticas. Se observa de todas formas que cuando mayor fue la cantidad de irrigante utilizado mayor es la aparición del síndrome porcentualmente, tal como se observa en las siguientes tablas.
La técnica
La utilización de cistostomía no tuvo valor estadísticamente significativo ya que no se encontraron diferencias entre los pacientes en los que se utilizó cistostomía y los demás en cuanto a la aparición de síntomas, signos o el diagnóstico del síndrome de resección transuretral de próstata; además, se debe tener en cuenta que el procedimiento de la cistostomía que se realiza en forma complementaria (punción) puede acarrear riesgos adicionales. En los pacientes del presente estudio 1 (0.8%) paciente presentó infiltración de la pared abdominal debida al uso de la cistostomía; por esta razón fue necesario hacer posteriormente en el primer día de postoperatorio revisión quirúrgica abierta sin encontrar órganos intraabdo-minales lesionados.
La velocidad de la resección entendida como el tiempo de resección por cada gramo de tejido tuvo una relación estadísticamente significativa con la aparición de complicaciones (p<0.03); de la misma forma la diferencia del peso esperado de la resección y el peso del tejido resecado, que podría interpretarse como tejido residual, también tiene relación con la aparición de las complicaciones. Sin embargo no es posible establecer una relación causal directa entre estas variables debido a que es probable que esta relación se deba más a que estos factores sean más bien indicadores de la dificultad del procedimiento. En este caso serían consecuencia y no causa de la aparición de complicaciones, es decir, que si la velocidad de resección es mayor y la cantidad de tejido residual es menor muy probablemente el procedimiento haya sido desarrollado con mayor facilidad que en el caso contrario.
Discusión
El síndrome de resección transuretral de próstata es más frecuente de lo que se espera en la práctica clínica; los registros en la mayoría de los centros hospitalarios son muy inferiores a los datos obtenidos en los estudios clínicos, esto es debido a que en muchos de los casos el diagnóstico queda sin definir: son precisamente los casos en donde la sintomatología es leve con rápida mejoría. Cada vez que se realiza un estudio sobre esta patología su frecuencia se aumenta de forma considerable ya que hace que el diagnóstico sea tenido en cuenta; este estudio por supuesto no es ajeno a este fenómeno: en el año anterior a la realización del estudio (1995) se reportó un solo caso de síndrome de resección transuretral de próstata, cifra bien diferente a la de los dos últimos años que fue el perío-do de realización del estudio. Entre los pacientes incluídos en este estudio, tenemos que 6 de los 128 (4.7%) tuvieron diagnóstico confirmado de síndrome de resección transuretral de próstata, 13 (10.2%) pacientes más tuvieron la sospecha diagnóstica, lo que quiere decir que el diagnóstico fue tenido en cuenta en 18 (14..9%) pacientes.
Se pudo observar además como los cambios electrolíticos, decrementos en el sodio, potasio y calcio lo mismo que los cambios electrocardiográficos son frecuentes en los pacientes sometidos a este tipo de cirugía a pesar de lo cual son poco observados en la practica clínica diaria de la urología.
Se pudieron establecer relaciones estadísticamente significativas entre la presencia de complicaciones y síndrome de resección transuretral de próstata frente a las variaciones de sodio y potasio, así como su relación frente a los hallazgos intraoperatorios hechos por el cirujano. Además, se encontró relación entre la velocidad de resección, la cantidad de tejido residual y la aparición de las complicaciones, sin embar-go, es de aclarar que este es un estudio des-criptivo, razón por la cual no se puede ni pretende concluir que exista una relación causal directa más aún con la discusión planteada anteriormente; por esta razón es necesaria la realización de estudios complementarios ulteriores. Este estudio por supuesto tiene gran valor para la identificación del problema que puede permitir el desarrollo y diseño de estudios con fines y objetivos más especí-ficos; este es tan solo el primer paso para conocer a fondo el problema en nuestro medio hospitalario. De forma adicional, se debe tener en cuenta que el Hospital San Juan de Dios es un hospital universitario con carácter docente, factor que influye en las cifras de complicaciones de los procedimientos. Sin embargo, de la misma forma el residente compensa de sobra a las instituciones con dedicación, estudio y excelencia en la actividad médica diaria. El estudio de las patologías, la facilidad en el aprendizaje, y el entrenamiento quirúrgico pueden influir sobre los resultados de los estudios realizados en estas instituciones universitarias.
Gráfica 4 Variación de los valores de hemoglobina durante el seguimiento HEMOGLOBINA |
Gráfica 5 Variación de los valores de hematocrito durante el seguimient HEMATOCRITO |
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Gráfica 6
Sintomatología
SINTOMAS
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