Editorial; Reumatología como Especialidad Presente y Futuro

A fines del milenio, hay varios aspectos, que merecen mencionarse, la aparición de nuevos medicamentos más seguros y eficaces en el alivio de los síntomas y la inducción de remisión impactando la terapéutica y muy seguramente la calidad de vida de los pacientes con osteoartritis y artritis reumatoidea, todo ello fruto de largos años de investigación farmacológica.

Esto ha sido tan importante en sus repercusiones que incluso la docencia a nivel de post-grado se ha beneficiado, con un notable crecimiento en la solicitud de ingreso para los programas de reumatología en Estados Unidos; algo similar ocurrió en nuestro país a mediados de los ochenta y comienzos de los noventa.

Hasta cuando llega en 1993 la Ley 100, y su posterior implementación, con ella muchas especialidades médicas especialmente clínicas entran en crisis, estando hoy tal vez en su momento crítico. Sin embargo, el factor coyuntural arriba mencionado podría mejorar la situación, lo cual impulsaría aún más nuestra actividad investigativa y académica.

Por otra parte la reforma en salud por si misma podría darnos ventajas, hasta 1998 estaban 20 millones de colombianos en el sistema, lo cual constituye una inmejorable fuente de pacientes que debe traducirse en una mayor demanda de servicios, si llegamos a ellos y a las EPS difundiendo nuestra especialidad y el impacto negativo que tienen las enfermedades reumáticas si no son tratadas a tiempo y en forma adecuada. Pero no es solo darnos a conocer a los pacientes, comunidad, EPS e incluso el Ministerio de Salud, debemos nosotros organizarnos para tratar de monopolizar la prestación de servicios relacionados con nuestra especialidad.

El análisis de esta situación nos lleva como Junta Directiva de la Asociación Colombiana de Reumatología a congregar a todos sus miembros para trabajar en tres frentes, comunidad mediante una campaña de difusión de la especialidad que se va gestando en este momento, pacientes con talleres, seminarios y conferencias magistrales, realizándose hasta el momento encuentros de pacientes en las ciudades de Bogotá, Medellín, con rotundo éxito gracias a la colaboración de la industria farmacéutica y por último pero no menos importante el médico con la ejecución del programa de educación médica continuada que siempre hemos realizado.

El reto es grande, el trabajo es arduo, pero hay optimismo; deseos de trabajar en forma unida y mancomunada para el beneficio de todos y de nuestros pacientes.

MARIO DIAZ CORTES
Presidente Asociación Colombiana de Reumatología

CLIC AQUÍ Y DÉJANOS TU COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *