La medicina tradicional china considera al Ginseng útil para la astenia, tranquilizante y nutritivo cerebral, estimulante de las defensas, del poder mental, alerta y para el bienestar general. Contiene trece alcaloides que se conocen como gingsenoides.
También contiene panaxanos, que se consideran hipoglicemiantes, y polisacáridos que ayudarían con el sistema inmune. El panax Ginseng –de la China- podría clasificarse como un nutracéutico, pero es más bien una hierba asiática milenaria que está en la lista de la Farmacopea Americana (USP) pero fue retirado de la Farmacopea Británica.
Se administra por vía oral, en forma de cápsulas o con jalea real. No es un producto entonces con indicaciones médicas, y muchas personas lo toman por seguir las creencias populares o buscando un efecto que podría ser placebo; parece ser inocuo, aunque algunas organizaciones médicas importantes de los Estados Unidos han advertido sobre riesgos potenciales de medicamentos de libre venta o herbológicos, que pueden interactuar con otras drogas.
Que sepamos, no se han hecho estudios con gingsenoides, que prueben de manera fehaciente que son eficaces para alguna patología específica.
