Innovación Exportadora en Chile: Recomendaciones

Monitoreo y Evaluación para Empresas

E. Conclusiones y recomendaciones

Cualquier modelo de crecimiento sostenible requiere de una mayor productividad de las pymes y del aumento sustentable de sus exportaciones. Sin embargo, el racionamiento del crédito obstaculiza dichos procesos.

Es por ello que frente a las restricciones financieras, los gobiernos han puesto en marcha. Junto con sus programas de fomento a las exportaciones, una serie de iniciativas que buscan resolver esta restricción. De tal modo de apoyar la generación de innovación tecnológica y no tecnológica de manera general y, específicamente, para promover la exportación.

En este marco, el rol de la política pública es desarrollar instrumentos de financiamiento público reembolsable y no reembolsable para las pymes.

A pesar del fuerte proceso de internacionalización de su economía, como consecuencia de su política de apertura de nuevos mercados externos, Chile presenta. Al igual que otros países de la región, un número pequeño de empresas exportadoras en relación al número total de empresas (alcanzando un 1%). Con exportaciones altamente concentradas en pocas firmas y una elevada rotación de las empresas exportadoras.

En Chile, el grueso de las exportaciones las realiza empresas grandes, aunque dichas cifras esconden a una gran cantidad de empresas de distintos tamaños, que pueden ser considerados exportadores indirectos, y que forman parte de una cadena de valor exportadora, ya sea porque aportan insumos que posteriormente son transformados en bienes exportados o porque son proveedoras de empresas que acumulan volúmenes y exportan con cierta escala.

También hay muchas empresas que son prestadoras de servicios en cadenas exportadoras. Muchas veces, estas empresas exportadoras indirectas mantienen estándares muy exigentes. De acuerdo a lo que se requiere en los mercados más sofisticados de destino.

Lógica de una institución financiera regulada

Resulta clave entender cuál es la lógica de una institución financiera regulada. Al momento de analizar la solicitud de un crédito de una pyme exportadora. Siendo la capacidad de pago y las garantías las variables que determinan la decisión de otorgar o no un crédito. Lo cual está supeditado también a la solvencia de la empresa, su historial de pago y a su nivel de endeudamiento. Este comportamiento de la banca es independiente del tipo de empresa, en términos de tamaño y orientación comercial.

Un elemento a considerar es que aun cuando se implemente alguna de las tres innovaciones de demanda consideradas en este documento. Dicha situación no generará resultados de forma inmediata.

De esta forma, lo más probable es que las instituciones financieras formales (bancos) no consideren en su evaluación el esfuerzo de innovación de la empresa, como criterio relevante para otorgar el crédito. Sino más bien los resultados positivos de las innovaciones, una vez que estas hayan sido implementadas.

Es importante distinguir si la innovación permite que sea justificada como un proyecto de inversión o como capital de trabajo. Siendo clave la forma cómo se presenta el plan de innovación a la institución financiera.

La presencia de racionamiento de crédito, explicada por fallas de mercado, llevará a una pyme exportadora a financiar la innovación utilizando una combinación de financiamiento subóptimo. Pudiendo dañar el impacto esperado de la innovación. Por ello, es fundamental chequear la presencia de fallas de mercado que llevan a racionamiento de crédito e impulsar políticas públicas acertadas, que disminuyan dicho racionamiento hacia las pymes exportadoras.

De obtener resultados positivos como consecuencia de la implementación de la innovación:

En términos de mercados y diversificación de productos, surgirá naturalmente la necesidad de articular instrumentos de financiamiento reembolsable y no reembolsable, que permitan una expansión de la pyme exportadora.

De esta forma, si por el hecho de participar en programas de financiamiento no reembolsable una pyme exportadora mejora su capacidad de gestión, realiza mejores proyectos de innovación y, en general, se torna más competitiva. Ello debiera traducirse en una mayor posibilidad de acceder a financiamiento reembolsable para sus proyectos. Esta hipótesis ha sido poco testeada y la mayoría de los estudios existentes se refieren al ámbito del apoyo a la microempresa.

En ellos, la evidencia tiende a apoyar una conclusión positiva respecto al refuerzo que tienen el financiamiento no reembolsable en el desempeño de las empresas que reciben financiamiento reembolsable. Lo cual no es lo mismo que plantear que aquellas empresas que han recibido financiamiento no reembolsable tienen una mayor propensión a recibir también financiamiento reembolsable.

Lo que es un hecho es que las entidades financieras no están dispuestas a renunciar a su propio análisis de riesgo. Pero sí parecen estar dispuestas, en algunos casos. A complementar sus capacidades analíticas con las de agencias especializadas cuando hay un potencial de clientes atractivos, cuyos proyectos tienen alguna dificultad para ser evaluados.

Los casos en que los vínculos entre instrumento de financiamiento reembolsable y no reembolsable agregan mayor valor parecen producirse cuando el espacio de acción está definido por actores que enfrentan situaciones o problemas similares. Como es el caso de los proyectos de innovación, el emprendimiento dinámico o la participación en cadenas productivas. La clave parece estar en la posibilidad de agregar valor. A través de poner a disposición conocimiento específico sobre la situación que enfrentan los potenciales demandantes de crédito.

Este capítulo presenta un análisis de instrumentos públicos reembolsables y no reembolsables para la innovación exportadora en Chile.

Para lo cual fueron examinados los instrumentos administrados por la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), el Servicio de Cooperación Técnica (Sercotec), el BancoEstado y ProChile. Todas estas instituciones son agencias públicas que realizan acciones de fomento en mipymes. Promoviendo el desarrollo de negocios sobre la base de las capacidades de las empresas y las oportunidades de negocios.

Los criterios del levantamiento de instrumentos fue identificar fuentes de apoyo financiero, que le permitan a la empresa realizar innovaciones en el ámbito de las exportaciones. Particularmente. Se sondeó la posibilidad de apoyar/financiar actividades de cumplimiento con certificaciones y estándares de mercados de destino. La adaptación de productos a la demanda de los consumidores y la búsqueda de nuevos canales de distribución.

Un elemento importante a relevar para el caso chileno es que las agencias de fomento indicadas básicamente discriminan por el tamaño de las empresas más que por el tipo de innovación que estas quieran desarrollar.

Esto es en general y especialmente para las empresas de menor tamaño (micro y pequeñas). Pues las iniciativas no son priorizadas por el hecho de que tengan foco exportador. Sino que son igualmente valoradas las iniciativas innovadoras con foco en el mercado interno.

La excepción está en el caso de ProChile que es eminentemente una agencia que promueve las exportaciones del país, aun cuando tiene algunos esquemas de atención a empresas no exportadoras, pero que tienen en su proyección dicha opción.

Corfo y Sercotec representan el intento más claro de segmentar por tamaño de empresas: teóricamente la primera está enfocada a atender a las empresas pequeñas y medianas. Mientras que la segunda tiene su mayor foco en las microempresas.

En el caso de Innova Chile hay que considerar que en algunas oportunidades es mencionada como una institución diferente a Corfo. Pero formalmente es una de las gerencias de la Corporación. Y en el caso de ProChile y BancoEstado (incluida su filial de microempresas). Son agencias públicas que atienden diferentes segmentos de tamaño de empresas.

En síntesis, los instrumentos analizados permiten advertir lo siguiente:
  • La evolución general de los instrumentos de apoyo de las diferentes agencias ha sido en la dirección de ser menos específicos y más flexibles. Para responder a la diversidad de características que tienen las empresas que presentan iniciativas y a la diversidad de los proyectos. Lo anterior ha buscado como objetivo disminuir el número de instrumentos y la burocracia respectiva. Lo que muchas veces dificulta las opciones de postulación a las empresas de menos capacidades y a las ubicadas en los territorios menos avanzados.
  • La mayoría de los instrumentos analizados son del tipo financiamiento no reembolsable con alcance a la pyme, a excepción de Sercotec, cuyo foco directo es la micro y pequeña empresa.
  • El foco mayoritario no está en la empresa exportadora sino más bien en la empresa con capacidades de desarrollo y perspectivas del negocio, independiente del mercado de destino.
  • Hay varios instrumentos que tienen un sentido de innovación, pero no son la mayoría y solo cuatro instrumentos apuntan con bastante claridad a las innovaciones de demanda, consideradas como de interés en este estudio.
  • Buena parte de los instrumentos de ProChile tienen una orientación de desarrollo de habilidades y capacidades para exportar en empresas que aún no lo han hecho. Dichos instrumentos no tendrían alcances para el tema de innovación exportadora de demanda.
  • Ningún instrumento de los analizados apunta manifiestamente a la innovación exportadora. Pero todos, a excepción de algunos de ProChile, podrían ser utilizados indirectamente con ese propósito. Lo que queda supeditado a la forma cómo sea formulada la solicitud de los fondos a las agencias.
  • La gran mayoría de los instrumentos pueden apoyar etapas de diagnóstico y diseño de las innovaciones de las pymes exportadoras y los instrumentos Corfo adicionalmente pudiesen participar en etapas de implementación de la innovación.
    Se identificó dos instrumentos que pudieran abarcar todas las etapas de una innovación exportadora. Desde el diagnóstico hasta la etapa de escalamiento del negocio: Validación y empaquetamiento de innovaciones programa innovación tecnológica empresarial y el Capital semilla, ambos de Corfo.
  • Respecto de la articulación/interacción de las diferentes agencias y de los instrumentos entre sí. De una misma o de diferentes agencias, en general esto es casi nulo. Esta característica queda bien reflejada en el hecho de que solo muy excepcionalmente un instrumento de apoyo exige un relacionamiento explícito con otro instrumento.

    La excepción está puesta en el caso de instrumentos que tienen más de una etapa de desarrollo (una etapa es requisito de una segunda) y en el caso de instrumentos que apoyan el acceso al financiamiento reembolsable (créditos). Por ejemplo, en los programas de garantías complementarias que tienen Corfo y que son muy utilizadas por BancoEstado como garantía de los créditos que coloca en las empresas.
  • Una buena parte de los instrumentos mencionados en este trabajo han tenido algún tipo de evaluación de su desempeño, ya sea a través de la medición del grado de satisfacción de los usuarios, de la opinión de un panel de expertos o tratando de medir directamente el impacto que generan en el grupo objetivo al cual están dirigidos. Destaca por la profundidad de la medición la evaluación de impacto.

    Este es el caso de los instrumentos de Corfo: Focal, Profo y PDP, que fueron evaluados por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda (o de Finanzas), en el año 2010. En general los resultados de impacto son positivos. Lo que ha permitido la permanencia de la operación de estos instrumentos por varios años.

La experiencia chilena muestra que las orientaciones de fomento apuntan a apoyar emprendimientos y expansión de empresas con potencial de mercados globales. Sin declarar abiertamente a la exportación como mercado, política que se ha visto fortalecida en los últimos años por los nuevos instrumentos disponibles.

En este esfuerzo, Corfo y ProChile se constituyen en las agencias claves detrás de estos procesos.

Llama la atención el instrumento Crece de Sercotec, creado el año 2015, que destinó recursos por 13 millones de dólares en 2016. El cual tiene un foco en la micro y pequeña empresa.

Extrapolar la experiencia chilena a otros países de la región no es tarea fácil. Por cuanto hay diferencias en desarrollos institucionales, grado de desarrollo de empresas, grado de apertura de los países y, sobre todo, etapas distintas de apuestas de cómo afrontar los desafíos de las pymes.

No obstante ello, resulta evidente que el diseño de instrumentos más flexibles en términos del uso de los fondos pareciera una opción a ser utilizada. Dejando que la propia empresa busque. A partir de sus necesidades y desafíos, la forma más apropiada para aplicar a dichos fondos.

Es importante que la difusión de los instrumentos sea clara a las empresas, tanto en términos de las características de los instrumentos, como de la forma y oportunidad del acceso.

Al respecto, Chile debe realizar mayores esfuerzos para mejorar la información y el acceso de los distintos instrumentos. Siendo altamente necesario contar con indicadores de cobertura, de presupuesto y de desempeño, que sean de acceso público.

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