Alrededor del año 2020 hasta la actualidad ha estado en auge una práctica que se ha convertido en una obsesión para muchos. El deseo incontrolable por vigilar la calidad del sueño y las horas que se descansan ha pasado a ser un problema. Y la razón es simple, el interés por mantener todo bajo control con el tiempo termina siendo extenuante. Acompáñanos a descubrir qué es la ortosomnia y cómo puede perjudicarte.
¿Qué es la ortosomnia?
Se trata de una práctica relativamente reciente que consiste en controlar todos los aspectos de la hora del sueño. Desde calcular las horas de descanso, pasando por determinar si se producen ronquidos, si tienes sueño ligero o profundo, etcétera. Tener interés por determinar estos factores no está mal, sin embargo, cuando se trata de la ortosomnia, esto se convierte en una obsesión.
Esa es de hecho, la gran diferencia entre un control sano de los hábitos del sueño, y un problema que puede perjudicar el descanso. El término ortosomnia, fue empleado por los estudiosos del tema, y proviene del griego orthos (correcto) y somnia (sueño). El nombre fue empleado para definir un trastorno cuyos orígenes no son incorrectos pero que ha llegado demasiado lejos por el deseo incontrolable de las personas de conseguir el “sueño perfecto”.
Y es que para esto se han valido incluso de aplicaciones móviles que permiten guardar registro de las horas de descanso. Así como también el uso de dispositivos que, adheridos al cuerpo, permiten monitorear el estado del cuerpo durante la noche. Con el tiempo, más allá de conseguir horas de descanso, la persona termina por estresarse y abrumarse deseando descansar lo suficiente.
Complicaciones de la ortosomnia
Como era de esperarse, esta práctica trae consigo una gran lista de efectos adversos, que comenzarán a emerger a medida que pasa el tiempo. Algunas de las complicaciones vinculadas con la ortosomnia son las siguientes:
Aparición de episodios de ansiedad
El deseo constante de controlar todo lo relacionado con las horas de sueño puede derivar en episodios de ansiedad. La ansiedad es un trastorno mental conocido por una preocupación excesiva, y puede ser muy abrumadora para quien la padece. Estar constantemente preocupado por la calidad del descanso y otros aspectos relacionados, puede desencadenarla.
Disminución de los niveles de melatonina
La melatonina es una hormona que está relacionada con el ciclo del sueño, y la ortosomnia puede disminuirla. Si existe un déficit de melatonina será más que evidente que habrá complicaciones a la hora de dormir. Algunos estudios afirman además, que los niveles bajos de melatonina están altamente relacionados con una mayor probabilidad de obesidad y diabetes.
Mayor probabilidad de autodiagnosticarse de trastornos del sueño
Cuando se está constantemente obsesionado con monitorear las horas del sueño, puede surgir la posibilidad de que dormir sea más difícil. Muchas personas pueden interpretar esto como la existencia de un posible trastorno del sueño, pudiendo llegar a automedicarse. Cuando se está frente la ortosomnia, la persona percibe la hora del descanso como una fuente de estimulación atencional.
Es decir, está tan obsesionado con la idea de dormir, que no puede despejar su mente para poder lograrlo. Erróneamente, esto puede ser definido por la persona como algún trastorno del sueño como el insomnio, cuando en realidad es resultado de la ansiedad.
¿Cómo conseguir un sueño satisfactorio sin caer en la ortosomnia?
Querer monitorear el descanso de manera ocasional y no tan exhaustiva, no está mal. Ello te puede permitir conocer cómo funciona tu cuerpo mientras estás dormido, sin embargo, debes cuidar no obsesionarte con eso. A continuación compartimos contigo algunos consejos que pueden ayudarte a mejorar tus horas de sueño.
Evita las cenas abundantes
Comer justo antes de dormir ya de por sí no es una buena idea, una cena abundante puede empeorar las cosas. Es muy probable que experimentes malestares estomacales cuando acabas de comer y te vas a dormir. La razón: la digestión se ve favorecida cuando estás en posición vertical, es decir, de pie. Si tu estómago está lleno y la gravedad está jugando en su contra, podrás experimentar acidez, y no podrás dormir.
Claro está que esto no funciona igual con todos los alimentos, si tomas cenas ligeras como frutas o vegetales, el efecto será más suave.
Crea tu propia rutina de descanso
Es una buena idea crear una rutina de descanso, y ponerla en práctica todos los días. De esta manera, tu cuerpo se acostumbrará a ella y podrás conciliar el sueño más rápido.
Regula los niveles de melatonina
La melatonina juega un papel fundamental en el ciclo del sueño, su deficiente evidentemente puede alterarlo. Asegúrate de tomar un suplemento siempre bajo supervisión médica.
Cuídate del control obsesivo
No podemos controlar todo, querer tener a raya incluso la manera en cómo se duerme, no es favorecedor. Si quieres mejorar tu descanso, lo mejor será que revises tus niveles de melatonina y te mantengas saludable.
