Sesgos Cognitivos: ¿Cómo identificarlos y evitarlos?

Sesgos Cognitivos

A lo largo de nuestras vidas debemos tomar decisiones sencillas y complejas que reflejarán el tipo de persona que seremos en el futuro. Sin embargo, existen diferentes factores que pueden llegar a entorpecer la forma en cómo lo hacemos.

Uno de estos factores son los sesgos cognitivos, los cuales afectan significativamente la forma en la que vemos la realidad. A continuación aprenderás a cómo identificarlos y como evitar caer en ellos.

¿Qué son los sesgos cognitivos?

Son un conjunto de impulsores que pueden llegar a cambiar la forma en la que percibimos las cosas y nublar nuestra toma de decisiones.

Este cambio de percepción puede pasar por diferentes factores y juega un papel fundamental en nuestra vida diaria. Estos efectos psicológicos pueden ocurrir sin que nos demos cuenta y por ello es importante conocerlos para saber cómo afrontarlos.

Esta peculiar característica parece ser una adaptación evolutiva para ayudar a la rápida toma de decisiones. De esta forma se obvia el análisis profundo y se deja todo a primera vista, haciendo que la toma de decisiones muchas veces sea errónea. Esto puede traer consecuencias graves en ciertas ocasiones.

Ejemplos de sesgos cognitivos

Para poder apreciar mejor de qué se tratan los sesgos cognitivos, lo más útil es poder verlo en algunos ejemplos, en el siguiente apartado se muestran algunos de los sesgos cognitivos más conocidos y la forma en que afectan a nuestra mente.

Efecto Forer

Este quizá te sea familiar, es muy utilizado por aquellas personas que practican el horóscopo y la adivinación. Se basa en la peculiaridad de algunas personas de sentirse identificadas con afirmaciones o descripciones vagas o ambiguas.

Esto quiere decir que pueden ser aplicadas para cualquier persona, por lo que se toman como ciertos, aunque no sea así. (Lea También: ¿Cómo puede ayudarte la inteligencia emocional?)

Sesgo del costo hundido

También denominada como la falacia del coste hundido, es un sesgo cognitivo en donde las personas toman decisiones basándose en la cantidad de tiempo o dinero invertido. Esto quiere decir que muchas veces se presta atención a la cantidad en lugar de la calidad.

Suele suceder en economía y en las relaciones interpersonales, donde se juzga una relación en base a la cantidad de años que se ha estado con una persona.

Efecto Halo

Este es otro sesgo cognitivo muy frecuente en nuestra sociedad y es que toma en cuenta las características positivas de una persona. Esto quiere decir que una persona puede ser evaluada positivamente dependiendo de algún rasgo previo, sin inferir profundamente.

Un ejemplo común es cuando se le da un puesto de trabajo a alguien solo por ser atractivo o por mostrar carisma, sin evaluar si se está capacitado para el mismo o no.

Sesgo de confirmación

Este es uno de los más comunes y se suele ver en debates en línea, consiste en buscar o interpretar información de una creencia propia.

Luego se utiliza esta información para confirmar el argumento con simples suposiciones que llevan a tomar malas decisiones. Todo esto para poder validar ese pensamiento tan arraigado en la mente que no se quiere cambiar.

Sesgo de anclaje

Es muy utilizado al vender un producto o servicio o al hacer una negociación y consiste en quedarse con la primera opción que se presenta.

Esto hace que las demás propuestas que se hagan luego de esta queden descartadas automáticamente en la mente o no se tomen en cuenta. Esto puede hacer que la persona se quede con la peor elección entre las distintas opciones.

Sesgo de Status Quo

Son aquellas decisiones que hacen que una persona no pueda alterar su situación actual o status quo. Esta suele desaparecer cuando surgen situaciones que obligan al a persona a abandonar ese estado y llegar a una solución. Es muy frecuente y suele denominarse como la zona de confort que en algún momento todos llegamos a tener.

Sesgo del punto ciego

Es un efecto bastante peculiar, ya que ocurre cuando una persona asume que no puede ser vulnerable a ningún tipo de sesgo cognitivo. Esto crea una contradicción y especie de paradoja en donde se comete un sesgo al mismo tiempo que se niega que pueda llegar a afectarles. Por lo que puede tener consecuencias negativas al momento de tomar decisiones.

¿Pueden evitarse los sesgos cognitivos?

Todos somos propensos a caer en sesgos cognitivos en algún momento de nuestra vida y afectar nuestras decisiones. Si bien es difícil evitar que esto pase, el conocer de su existencia ayudará a poder estar alerta ante estos efectos.

Por esta razón es importante conocer cada uno de estos sesgos y saber la mejor forma de evitarlos, principalmente a través del pensamiento crítico

Tomar previsiones hará que tu toma de decisiones sea cada vez más acertada y evites caer en falacias o sesgos cognitivos. Teniendo en cuenta todo esto podrás conocer mejor tu mente y explorar mejores formas de lidiar con las situaciones cotidianas.

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