Editorial: La Asociación Colombiana de Reumatología en el Nuevo Milenio

“Las personas van y vienen pero los procesos quedan”
Anónimo

El desarrollo del Plan Estratégico de Planeación es una función institucional de primer orden que todos debemos conocer y asimilar. El análisis detallado de este Plan establece básicamente tres objetivos claros:

1) Posicionamiento social de la Especialidad: Ser ampliamente reconocidos y utilizados como los mejores y más éticos profesionales en el cuidado de los pacientes con artritis y enfermedades músculo esqueléticas.
Comentario: Es fundamental aumentar el grado de reconocimiento e influencia de la especialidad a todos los niveles. Esto incluye un trabajo de acciones coordinadas hacia los organismos nacionales determinantes como el Gobierno, Consejo Nacional de Seguridad Social, EPS públicas y privadas e incluso otras sociedades científicas así como con nuestros pacientes que son quienes más nos conocen y el público general. Este trabajo debe realizarse en la esfera nacional, pero todos en cada uno de nuestros sitios de trabajo debemos aprender a influir la esfera local y regional para lo cual contamos con el apoyo irrestricto de la ACR. Como gremio necesitamos tener una influencia en las políticas de salud que sea determinante. El aporte de la Asociación en la discusión del nuevo acuerdo para formulación de medicamentos del POS y lograr que la Artritis Reumatoidea sea catalogada una enfermedad de alto costo y de manejo por el especialista, son acciones que van en esta dirección.

En un artículo reciente de la revista Estrategia escrito por un economista que representa a gremios como Andi o Fenalco se menciona esta visión de nosotros los médicos: “Muy conveniente para sus intereses sería adquirir conciencia acerca de los mecanismos institucionales existentes para influir sobre el proceso de toma de decisiones sobre su sector. En materia de expresión pública los médicos, uno de los sectores de mayor educación del país, están al mismo nivel de los grupos más desposeidos de la Sociedad”. Finalmente concluye que nuestra respuesta a estos problemas es con más Congresos Médicos de mucho corte científico y poco perfil político y de unidad gremial. Cada uno obtenga sus conclusiones.

2) Educación continua: Ser la principal fuente de educación médica continuada para reumatólogos y médicos de otras áreas interesados en las enfermedades reumáticas.
Comentario: Nos llegó un documento de la Academia Nacional de Medicina, de su comisión de educación, elaborado por el Dr. Gustavo Malagón Londoño donde sugieren, en colaboración con las Sociedades Científicas y el apoyo de las empresas administradoras y las instituciones prestadoras, un programa de recertificación voluntaria dirigido a especialistas y médicos generales bajo los siguientes parámetros:

a. Que se acepten los créditos que se relacionan a continuación y se les otorgue un valor porcentual.

• Docencia de pre y postgrado.
• Participación activa en actividades científicas programadas.
• Suscripción a revistas científicas.
• Servir en un servicio hospitalario de carácter docente.
• Publicaciones científicas.
• Participación en programas de autoevaluación.
• Participación en programas de educación permanente o continuada.

b. Que el programa coordinado por la Academia Nacional de Medicina se adelante con participación activa de las Sociedades Científicas, tenga un aval oficial y cuente con el respaldo de las empresas de salud; que se cree una Comisión Nacional de Certificación. El flujograma propuesto incluye convenios con las Sociedades Científicas para la producción o adquisición de materiales para educación continua o permanente y convenios para programas de evaluación. Por otra parte, también hay interés de ASCOFAME en un programa similar.

Es claro que la calidad de la educación y la acreditación terminarán siendo factores diferenciadores a mediano y largo plazo teniendo en cuenta el caos actual en que se encuentra la salud en Colombia. Nosotros debemos tener los programas listos basados en nuestro conocimiento como pares académicos y luego definir si hacemos o no convenios con Ascofame, Academia Nacional de Medicina, EPS o empresas de medicina prepagada así como otras sociedades Científicas o cualquiera otra institución que así lo desee. Éstos documentos y acercamientos de instituciones como las mencionadas sólo indican que es lógica y necesaria la creación del programa de acreditación por parte de la Asociación y que esto es algo que debe hacerse con relativa celeridad. Como siempre ocurre con estas cosas cuando las vemos venir, o planificamos o nos planifican.
Así mismo las Guías y Consensos nos fortalecen como pares académicos y tienen un objetivo docente, asistencial, económico además de gremial cuyos resultados debemos apoyar en cada una de nuestras actividades buscando la estandarización de la educación médica en reumatología a través de ellas. Si lo vemos como deberíamos, es la oportunidad de crear, fortalecer y darle un norte a una verdadera “Escuela Colombiana de Reumatología” cuyos competidores deberían ser pares y grupos de otras latitudes diferentes al país. También en Medicina la competencia es un asunto global y no local.

3) Fortalecimiento de la especialidad: Ser los pares académicos para instituciones públicas y privadas. Conservar y atraer especialistas de la mejor calidad para la investigación, educación y cuidado de personas con artritis y enfermedades músculo-esqueléticas.

Comentario: Debemos considerar el programa de la Década del Hueso y la Articulación como una bandera institucional que nos debe ayudar a cumplir con todos nuestros objetivos a corto, mediano y largo plazo desde ahora y hasta el año 2010. En cada una de nuestras actuaciones debemos recordar este programa hacia los médicos y hacia el público y a difundirlo a nivel local, regional y en las universidades. Si realizamos todas estas acciones y fortalecemos los valores de ética, honestidad, solidaridad, equidad justicia y unidad, la ACR debe fortalecerse y continuar siendo una de las Asociaciones Científicas más sólidas del país.

Por otra parte y en relación con la formación de recurso humano, el Colegio Americano de Reumatología considera el número óptimo de reumatólogos 1.1 por cada 100000 habitantes, lo que aplicado a nuestro medio deberían ser unos 420 reumatólogos en actividad. Tenemos una tasa de ingresos de nuevos miembros, y egresos por jubilación y otros factores que se han estabilizado después de un crecimiento rápido en la década pasada. Tenemos pocos residentes, centros de formación y la especialidad está en crisis a nivel mundial por su carácter clínico. En USA solo se cubre el 60% de las plazas para Reumatólogos y es la especialidad que más extranjeros tiene. En la parte positiva es considerada como de las especialidades con mejor calidad de vida y con gran futuro basado en el desarrollo de nuevos medicamentos y formas efectivas de tratar las enfermedades, además que tiene pacientes.

En este ambiente y reconociendo que no esperamos un crecimiento exponencial del número de reumatólogos en nuestro país que ya copan las principales ciudades, debemos ser concientes que la Asociación necesita ampliar nuestra influencia y base de colaboradores hacia especialidades afines como laboratorio clínico, fisioterapia, ortopedia y fisiatría, fomentando su ingreso como miembros asociados y teniéndolos en cuenta en todas nuestras actividades comunes y en algunas específicamente dirigidas hacia ellos.

Como vemos la planeación estratégica no es un asunto gerencial ni de tecnocracia; es un asunto de pensar a largo plazo y de lograr metas comunes. La Asociación está al servicio de cada uno de sus miembros para que obtengan las condiciones ideales para la promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación de las enfermedades músculo esqueléticas y articulares tal como estipula su misión. Aunque no podemos predecir el futuro si podemos darle forma. Ese es nuestro compromiso.

Carlo Vinicio Caballero Uribe
Presidente Asociación Colombiana de Reumatología