Los Niños y la Televisión

Luis Miguel Sosa Ávila
Residente de Pediatría – Universidad Industrial de Santander – UIS

«Niños y jóvenes participan ya desde muy pronto, con ayuda de los medios de comunicación, en el mundo adulto de la política, las catástrofes y las diferentes culturas. Su conocimiento ha cambiado: saben mucho más del mundo de los adultos, lo conocen gracias a la televisión, incluso antes de ser capaces de experimentarlo por si mismos».

La Televisión, uno de los grandes inventos del siglo XX, es un medio de comunicación social, un sistema mediático de información unidireccional que, de forma individual o en interacción, transmite mensajes a una serie de personas «a priori» desconocidas y de forma simultánea. 2 La TV es una ventana abierta al mundo, ya que por medio de ella se accede a múltiples conocimientos culturales, históricos, científicos y sociales.

Las funciones universales aceptadas de la TV son: información expresiva, diversión, entretenimiento, socialización 3; además estimula la fantasía y la imaginación, favorece el diálogo y el aprendizaje 4,5; persigue la incorporación del receptor a un grupo cultural, presentándole las normas por las que éste se rige, las conductas aceptadas y rechazadas. 3 Esto último es particularmente cierto entre los 2 y 6 años en donde se perfilan sentimientos preferenciales hacia personas significativas y a través de este proceso planteado por Erickson, se adquieren habilidades para comportarse en la sociedad6.

Esta revisión pretende describir las características y determinantes del hábito televisivo en los niños, analizar a la luz de las revisiones e investigaciones actuales los efectos adversos que sobre los niños se le atribuyen a la Televisión (TV); y plantear algunas recomendaciones dirigidas a profesionales de la salud y padres sobre como orientar el hábito televisivo en los niños.

Hábitos Televisivos

El 85% de los niños inician el hábito televisivo antes de los tres años de edad 8, y aún tan temprano como a los dos años 9, lo que conlleva a un cambio de las actividades que propician el desarrollo del Sistema Nervioso Central como caminar, correr, jugar por actividades sedentarias.

Los niños más jóvenes prefieren caricaturas de naturaleza violenta y los de 11 – 14 años los programas de más alto nivel de violencia. 10

Ver TV se ha convertido en la actividad de ocio líder del niño después de dormir. 11,12 Los niños de Estados Unidos ven en promedio 21 horas a la semana ó el equivalente a 3 horas al día (4 – 6 horas al día si se incluye juegos de videos, videos). 13

En India ven aproximadamente 18 horas a la semana14 y en España 1 hora y 46 minutos al día de lunes a viernes y 2 horas y 21 minutos al día en fin de semana 8.

El tiempo que ven TV es tan elevado que disminuye el dedicado a la lectura, trabajo escolar, deporte, juegos, comunicación familiar 15. Además los niños mientras ven TV realizan actividades como comer, leer libros o hacer las tareas escolares.

Factores Determinantes del Hábito Televisivo en los Niños

Los niños ven TV para satisfacer sus necesidades de recreación, para obtener información, para reducir su tensiones y «porque le es impuesta por el medio», o por que no queda otra alternativa 6. Los Factores que determinan el hábito televisivo son:

• Edad de los niños: El hábito televisivo aumenta con la edad. El 9% de los preescolares, 20% de los escolares y 22% de los prepúberes ven más de tres horas de TV al día8. Los pre-escolares ven 27 horas a la semana, los escolares 23 y los adolescentes 21 en el caso americano16; sin embargo, entre los españoles los preescolares ven 77 minutos al día, 107 minutos los escolares y 125 minutos los Pre – púberes.8 Durante el transcurso del año los niños pasan más tiempo viendo TV, que en la escuela. 11

• Bajo nivel educativo de los padres: A medida que los padres tienen mayor nivel de formación, se disminuye en 0,4 horas el consumo TV en los niños (p=0.001 r:0.21)8. Los niños de padres con estudios primarios ven hasta 7 horas al día más que los hijos de padres con otros niveles educativos superiores19.

De igual forma se ha relacionado el bajo nivel educativo de los padres con una menor actitud crítica hacia los contenidos televisivos.17,18

• Presencia de más de un televisor en los hogares: El número de televisores en los hogares aumenta significativamente con la edad de los niños (figura 1) y esto incrementa el hábito televisivo, puesto que dificulta el control y la disciplina que puedan ejercer los padres.8

FIGURA 1. Frecuencia de los determinantes del hábito televisivo según edad

• Presencia de televisor en las alcobas de los niños: En España hay televisor en la habitación en el 15% de los hogares, cifra que aumenta significativamente con la edad, (10% en pre-escolares, 15% de escolares y 19% de pre-púberes)8. En USA, hay TV en la alcoba del 32% de los pre – escolares y en 65% de los mayores de 8 años20. Los niños que tienen televisor en su alcoba ven 2 horas y 25 minutos semanales más, que los que no lo tienen17.

• La falta de control paterno se traduce en mayor intensidad del hábito televisivo. En el 27% de los hogares los niños ven TV solos sin compañía de adultos,8 llegando a cifras tan altas como 33% ó 50% en Canadá y USA respectivamente12,17. Los niños que ven TV solos consumen 1 hora y 45 minutos semanales más TV.8 (figura 1)

La TV y la Familia

La TV se le ofrece al niño en el hogar y se le refuerza con la actitud pasiva de los padres o a través de gestos, sonrisas y aprobaciones verbales de los adultos.

La percepción del hábito televisivo por parte de los padres es pobre. El 49% de los padres piensan que los niños ven poca TV y especialmente en los menores de 6 años.10 En el 71% de los hogares los padres seleccionan los programas que sus hijos ven; 20% de los padres utilizan la TV como «niñera» 8; 48% de los padres no son conscientes de lo que sus niños ven y un 61.5% alientan a ver TV. 10