Lesiones Intradomiciliarias en Niños
Dr. Ricardo Polanía Ovalle
Médico Pediatra,
Hospital Rosario Pumarejo de López
Valledupar, Colombia
Resumen
Con el objetivo de conocer aspectos epidemiológicos asociados a las lesiones intradomiciliarias involuntarias en niños se realizó un estudio descriptivo en 60 menores de 15 años de edad atendidos en el Hospital Rosario Pumarejo de López en la ciudad de Valledupar (Colombia). El grupo más afectado fue entre 1 y 4 años de edad (63.3%). El común denominador de las familias fue la pobreza y el bajo nivel de escolaridad de las madres, quienes en su mayoría son las encargadas del cuidado de los menores.
Las principales lesiones fueron: 1) ingestión de tóxicos:22/60 (36.7%), fundamentalmente de petróleo, 2) quemaduras: 18/60 (30%), en su mayoría por alimentos en cocción, 3) fracturas: 12/60 (20%), generalmente por caída de los árboles, y 4) otros 13.3%.
Presentaron secuelas el 55.6% de los niños quemados, caracterizados por cambios permanentes en la coloración de la piel. Un menor con trauma abdominal cerrado se le realizó nefrectomía unilateral como consecuencia del estallido de uno de sus riñones. No se registró mortalidad.
Las lesiones intradomiciliarias pueden ser “evitables”, por lo que se debe iniciar una campaña educativa “permanente” sobre “riesgo y prevención” dirigido a toda la comunidad, con énfasis a los grupos de mayor riesgo.
Palabras Claves: Lesiones, intradomiciliarias, involuntarias.
Summary
With the objetive of knowing epidemiological aspects associated with the involuntary lesions in children at home, a descriptive study was carried out in minors 15 years old assisted in the Rosario Pumarejo de López Hospital, in the city of Valledupar (Colombia). The most affected group was between 1 and 4 years of age (63.3%). The common denominator of the families was the poverty and the low educational level of the mother who, in the majority, are the entrusted of the minors’s care.
The main lesions were: 1) ingestion of toxic: 22/60 (36.7%), fundamentally petroleum, 2) burns: 18/60 (30%), in their majority for foods in cooking, 3) fractures: 12/60 (20%), generally for fall of the trees, and 4) another: 13.3%.
The presented sequels: the 55.6% of the burnet children, characterized by permanent changes in the colorations of the skin.
An unilateral nephrectomia was carried out to a minor with abdominal closed trauma, consequence of the explosion of one of his kidneys.
Mortality wasn’t registered.
The lesions at home could be “avoidable”, and it should begin a “permanent” education campaign on “risk and prevention” directed to the whole community with emphasis to the groups of major risk.
Key words: lesions, at home, involuntaries.
Introducción
El término lesión se refiere al daño producido por la exposición aguda a un agente físico o químico. Se prefiere utilizar el término de lesión al de accidente, debido a que este último se refiere al azar, suerte, suceso inesperado, un evento fuera de todo control y prevención, implicando que cualquier persona tiene las mismas posibilidades de ser lesionada. Si bien, se sabe que hay grupos de individuos que tienen mayor riesgo de sufrir lesiones que otros, las lesiones rara vez son fruto del azar o de eventos sin control, por lo que se considera que una lesión no es un accidente1.
Las lesiones intradomiciliarias son un importante problema de salud pública por el riesgo de muerte o daño permanente que pueden ocasionar en los individuos. Estas pueden ser intencionales por abuso o maltrato, o no intencionales. La mayoría de los daños no intencionales en los niños más pequeños son de menor gravedad que los presentados con la intención de agredir2.
Las lesiones por todas las causas son la principal causa de muerte en personas de 1 a 45 años de edad. En la población pediátrica en estadística de países desarrollados, las lesiones producen más muertes que las 9 causas siguientes de muertes sumadas. Mientras se va logrando disminuir la mortalidad por enfermedades infecciosas y neoplásias, las estadísticas de mortalidad en trauma siguen igual o van en aumento y constituyen la mitad de todas las muertes1.
Las estadísticas en Latinoamérica informan que el 80% de las quemaduras ocurren en niños y el 75% de ellas en el hogar3. En términos de costos por muertes o daño ocasionado por las quemaduras en los niños en Estados Unidos es de alrededor de 3.5 billones de dólares por año4.
El objetivo de este estudio fue conocer aspectos epidemiológicos asociados a las lesiones intradomiciliarias involuntarias en los menores de 15 años de edad que acuden a la urgencia de nuestro hospital, a fin de establecer los factores de riesgo que inciden en la ocurrencia de estos daños y, de esta manera, permitimos establecer un modelo de estrategia para su prevención.
Materiales y Métodos:
Se realizó un estudio descriptivo sobre los aspectos epidemiológicos de las lesiones intradomiciliarias en los menores de 15 años de edad admitidos a la urgencia del Hospital Rosario Pumarejo de López de la ciudad de Valledupar. Se identificó a cada uno de los sujetos lesionados involuntariamente durante el período comprendido entre enero de 1997 y mayo de 1998. Se diseñó un registro, que incluyó variables de edad, sexo, lugar de residencia, tipo de lesión, nivel socioeconómico del grupo familiar, nivel de escolaridad de los niños al momento de las lesiones, secuelas y muerte.
Se consideró como criterio de inclusión a todo menor de 15 años de edad atendido en Urgencias del hospital por lesiones involuntarias ocurridas dentro del domicilio del individuo y entre las que se incluyeron: quemaduras por todas las causas, ingestión de cualquier medicamento o tóxicos, politraumatismo o amputación, heridas por arma de fuego o arma blanca.
Para el procesamiento de los datos se utilizó el programa Epi-Info 6.0. En análisis se realizaron los cruces de variables para establecer frecuencias absolutas y relativas, promedios y medidas de asociación pertinentes.
Resultados
Se identificaron 60 niños con edades comprendidas entre 9 meses y 12 años, y una media de 36 meses. El grupo de edad más afectado estuvo entre 1 y 4 años con un 63.3% (38/60). (Tabla No. 1).
En la distribución por sexo, se reportó mayor ocurrencia del evento en el sexo masculino con 39 casos (35%), mientras que el femenino con 21 casos (35%).
Procedentes del Departamento del Cesar fueron 57 niños (95.0%), correspondiendo a los municipios de Valledupar 44 (77.2%), Copey 5 (8.7%), Becerril 2 (3.5%), Bosconia 2 (3.5%), San Diego 2 (3.5%), Chiriguaná 1 (1.8%), Codazzi 1 (1.8%). De los departamentos vecinos se atendieron 2 casos de la Guajira (3.3%), procedentes del municipio de Villa Nueva, y 1 (1.7%) del departamento del Magdalena, residente en el municipio de Plato.
La distribución por barrios del municipio de Valledupar donde se registraron los casos se detalla en la Tabla No. 2.
El nivel socioeconómico de la mayoría de las familias de los niños estudiados es bajo, considerados dentro de los estratos 1 y 2 (en escala 1 a 6).
La persona encargada del cuidado de los niños al momentos de las lesiones fue en su mayoría la madre del menor, con un 73.3% de los casos (44/60). (Tabla No. 3).
Según el nivel de escolaridad de las madres, el 41.7% (25/60) han realizado la primaria de manera incompleta, el 31.7% (19/60) bachillerato incompleto, 15% (9/60) primaria completa, 10% (6/60) ningún grado de escolaridad y el 1.6% (1/60) algún nivel universitario incompleto.
Las principales lesiones intradomiciliarias registradas correspondieron a la ingestión de tóxicos, quemaduras y fracturas. (Tabla No. 4).
Tabla No. 1. Distribución por grupo de edades de los niños con lesiones intradomiciliarias involuntarias.
Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
Edad (años) | NUMERO | PORCENTAJE |
<1 1-4 5-9 10-14 Total |
3 38 17 2 60 |
5.0 63.3 28.3 3.4 100 |
Tabla No. 2. Barrios de procedencia de los niños del municipio de Valledupar con lesiones intradomiciliarias. Valledupar,
1997-98 (hasta mayo de 1998).
BARRIO | No. DE CASOS | PORCENTAJE |
La Nevada Los Fundadores La Victoria 20 de Julio San Martín Otros Total |
10 5 4 3 3 19 44 |
22.7 11.4 9.1 6.8 6.8 43.2 100 |
Tabla No. 3. Personas que cuidaban a los niños al momento de las lesiones intradomiciliarias.
Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
PERSONA A CARGO | NUMERO | PORCENTAJE |
Madre Familiar mayor de edad Familiar menor de edad Ninguno Padre Total |
44 7 6 2 1 60 |
73.3 11.7 10.0 3.3 1.7 100 |
Tabla No. 4. Tipo de lesiones intradomiciliarias involuntarias en niños. Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
TIPO DE LESIÓN | NUMERO | PORCENTAJE |
Ingestión de tóxicos Quemadura Fractura Herida de partes blanda con arma de fuego Herida de córnea con objeto punzante Traumatismo cráneo-encefálico Herida cortocontusa Trauma abdominal con estallido renal Total |
22 18 12 2 2 2 1 1 60 |
36.7 30.0 20.0 3.3 3.3 3.3 1.7 1.7 100 |
Ingestión de tóxicos
La ingestión de hidrocarburos representó el 95.4% (21/22) de todos los eventos por tóxicos. En la distribución por grupos de edades de los niños que ingirieron hidrocarburos, la mayor frecuencia se observó entre 1 y 4 años de edad con el 90.5% (19/21), seguido por el grupo menor de 1 año con el 9.5% restante (2/21). Los hidrocarburos identificados fueron: petróleo en 19 casos (90.5% y gasolina en 2 (9.5%).
En un caso se informó la ingestión de raticida en un niño de 3 años de edad.
Los lugares donde habitualmente se guardaban las sustancias tóxicas al momento de su ingestión fueron botellas de gaseosas y de aguardiente. (Tabla No. 6). El raticida se encontraba almacenado en bolsa plástica.
Quemadura
El número de niños quemados fue de 18/60 (30%), y el grupo edad que registró la mayor frecuencia de quemadura fue entre 1 y 4 años con 14 casos (77.8%), seguido por el grupo de 5 a 9 años con 3 casos (16.6%) y menores de 1 año con 1 (5.6%). La media de las edades de los niños quemados fue de 42.2 meses. Los elementos que produjeron las quemaduras fueron: alimentos en cocción 10 (55.6%), aceite caliente 2 (11.2%), carbón en llamas 2 (11.2%), agua hirviendo 1 (5.5%), basura en llamas 1 (5.5%) y estallido de lámpara que utilizaba como combustible el petróleo 1 (5.5%).
Tabla No. 5. Lugares donde se almacenaban los tóxicos al momento de ser ingeridos por los niños. Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
LUGAR | NUMERO | PORCENTAJE |
Cocina Patio Sala Garaje Total |
12 6 3 1 22 |
54.2 27.3 13.6 4.6 100 |
Tabla No. 6. Recipientes donde se encontraban envasados los hidrocarburos al momento de ser ingeridos por lo niños. Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
RECIPIENTE | NUMERO | PORCENTAJE |
Botella de gaesosa Botella de aguardiente Recipientes plásticos para hidrocarburos Frascos de medicamentos Botella de aceite Botella de cerveza Recipiente plásticos de líquido para pisos Lata de sardinas Botella de esencias Total |
8 4 2 2 1 |
38.0 19.0 9.5 9.5 4.8 |
La extensión de la superficie corporal quemada osciló entre 3 y 60%, con una media de 9%, y el grado de la quemadura que expresa la profundidad de los tejidos afectados se registró para el 2o. grado, 17 casos (94.4%) y para 3o grado, 1 caso (5.6%). Los lugares intradomiciliarios donde ocurrió las quemaduras de los niños se detalla en la Tabla No. 7.
Tabla No. 7. Lugares intradomiciliarios donde ocurrieron las quemaduras en los niños. Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
LUGAR | NUMERO | PORCENTAJE |
Cocina Patio Sala Total |
10 6 2 18 |
55.6 33.3 11.1 100 |
Fractura:
Se registraron 12 fracturas (20%), de las cuales 8 (66.6%) se produjeron al caerse de los árboles en los patios de sus residencias, 1(8.3%) al caerse de una carretilla y 1 (8.3%) al caerse de una silla.
Las edades de lon niños con fracturas oscilaron entre 2 y 11 años de edad con una media de 6.2 años. La distribución por grupos de edades se muestran en la Tabla No. 8.
Tabla No. 8. Distribución por grupos de edades de los niños que presentaron fracturas intradomiciliarias. Valledupar, 1997-98 (hasta mayo de 1998).
EDAD (años) | NUMERO | PORCENTAJE |
1-4 5-9 10-14 Total |
4 7 1 12 |
33.3 58.3 8.4 100 |
Herida de córnea:
Se prsentó en 2 niños (3.3%), con edades de 36 y 48 meses. Estas heridas fueron ocasionadas por otros menores con objetos punzantes durante la realización de juegos.
Herida de partes blandas con arma de fuego:
Ocurrió en 2 niños (3.3%), con edades de 6 años cada uno. En un caso, se le disparó el arma al menor mientras jugaba con ella ocasionándose lesiones, y en otro, el arma la disparó otro niño durante un juego con el artefacto.
Traumatismo cráneo-encefálico:
Se registró en 2 niños (3.3%), con edades de 8 y 12 años. Ambos traumatismos se produjeron al caerse de los árboles.
Herida corto-contusa en cuero cabelludo:
Se presentó en 1 niño (1.7%), de 9 años de edad al caerse de un árbol.
Trauma abdominal cerrado con estallido de un riñón:
Un niño de 7 años de edad (1.7%) presentó estallido de uno de sus riñones al caerse de un árbol.
Secuelas:
Se identificaron secuelas físicas en 10 (55.6%) de los niños quemados, caracterizados por cambios permanentes en la coloración de la piel de las zonas afectadas.
En el niño con trauma abdominal cerrado se le realizó nefrectomía unilateral como consecuencia del estallido de uno de sus riñones.
Mortalidad:
No se registró muerte en ninguno de los 60 casos estudiados.
Discusión:
Los grupos familiares en donde se presentaron las lesiones intradomiciliarias, se caracterizaron por ser marginadas, donde la pobreza es el común denominador y las condiciones de vida de sus miembros son precarias. Las madres son las encargadas en la mayoría de los casos del cuidado de sus hijos y el nivel educativo de ellas no sobrepasa, en general, de los niveles primarios y algunas carecen de un mínimo grado de escolaridad, lo cual favorece la ocurrencia de los eventos descritos por falta de medidas preventivas.
En el 10% de los caos, el menor estaba siendo cuidado por otro menor, y en el 3.3% no los cuidaba ninguna persona; esta situación es frecuente entre grupos familiares de bajo nivel socioeconómico en donde los hermanos mayores deben encargarse del cuidado de los menores mientras sus padres están ausentes y, además, por la falta de recurso económico para pagar a terceros el cuidado de estos.
El grupo de edad más vulnerable a padecer quemaduras intradomiciliarias es el de los niños de 1 a 4 años, que por sus cortas edades permanecen cerca a la figura materna buscando compañía y seguridad de esta, quien a su vez permanecen gran parte del tiempo en el área de cocina, lugar donde ocurre con mayor frecuencia dichas lesiones.
La edad media de los niños con quemaduras en este estudio fue de 42.2 meses y el lugar donde ocurrió más frecuentemente el hecho fue en la cocina con un 55.6%, presentando similares características a un reporte de la ciudad de Tours (Francia) en el que la media fue de 47 meses y la cocina representó ser el 56.2% entre los lugares donde se quemaron los niños5, por lo que se puede observar que la edad y la permanencia de los niños en la cocina son dos factores de riesgo para las quemaduras intradomiciliarias. Si bien, no se registraron muertes por quemaduras, hay estudios que revelan una fecuencia del 0.4%6. La ingestión de tóxicos, también se presentó con mayor frecuencia entre los niños de 1 a 4 años de edad, etapa en la que los menores se caracterizan por conocer, explorar y tocar lo que encuentran en su entorno. Estos comportamientos, hace que lleguen a lugares donde los padres almacenan diversas sustancias, las cuales resultan ser tóxicas para el ser humano, tales como petróleo y gasolina. Su almacenamiento más frecuente es en la cocina, lugar donde también permanecen mayor tiempo estos niños, por las mismas razones expresadas en las lesiones por quemaduras,. Sumado a esto, se observa que dichas sustancias estaban envasadas en su gran mayoría en recipientes de gasesosa, las cuales resultan ser atrayentes para los menores y de fácil ingesta por falta de tapas o de tapas de seguridad.
Las fracturas se presentaron con más frecuencia entre las edades de 5 a 9 años, como consecuencia de caídas, fundamentalmente de los árboles ubicados en los patios de las viviendas, y podría estar relacionado a que estos grupos han generado mayor independencia de sus padres, en relación a los grupos más pequeños, por lo que permanecen menos tiempo a la vista de los mayores, y al proceso de aprendizaje de sus destrezas, que estimulan la competitividad con sus pares, por lo que estas lesiones y a diferencia de los grupos mayores, estos ya han generado una mayor habilidad y destreza.
El trauma representó el 3.3% de todas las lesiones y con una edad media de 3.5 años. Un estudio sobre trauma ocular admitidos en un hospital en Escocia se identificó que el trauma frecuentemente ocurre en la casa y entre los menores de 15 años y mayores de 65 años, con implicaciones importantes en los planes de estrategias para al prevención, basado en estos datos epidemiológicos7.
Conclusiones y Recomendaciones:
Las lesiones intradomiciliarias pueden ser “evitables” y de esta manera impedir la muerte de menores o daños invalidantes o estéticos, que provocan gran impacto en el individuo, en su grupo familiar, en el sistema de salud y en la sociedad. Por lo tanto, los estamentos de Salud y Educación deben iniciar una campaña educativa “permanente”, sobre “riesgo y prevención” de las lesiones intradomiciliarias.
Sitemáticamente el desarrollo educativo en su salud debe estar basado en el conocimiento de los determinantes de los factores de riesgo, que conducirá a la elaboración de estrategias dirigidas a disminuír dichos riesgos en la comunidad. El riesgo es multifactorial, se inicia con el factor pobreza, al cual está ligada a la baja calidad de vida con las características de hacinamiento, malas condiciones de las viviendas, gran número de hijos, bajos ingresos económicos y bajo nivel educativo. Un programa de educación para intentar lograr disminuir la morbimortalidad por estas lesiones sin lograrse cambiar la calidad de vida en el que se desenvuelve una familia marginada no es fácil, es un reto inmenso para quienes se empeñen en esta misión. Sin embargo, mucho podría adelantarse mejorando la educación y para ello se trazarían estrategias en tres sentidos:
1. Educación a distancia a toda la comunidad a través de los medios masivos de comunicación (radio, televisión y prensa), alertando sobre los riesgos de morbilidad y mortalidad a que están expuestos los menores frente a lesiones no intencionadas dentro del hogar.
2. Educación directa en los conglomerados de mayor pobreza, estableciendo estrategias que involucre la información a menores y adultos, la cual pueden realizar los líderes comunitarios entusiastas por esta misión.
3. Actividad educativa en las escuelas y colegios por parte de los docentes.
Agradecimiento
Doy las gracias al Dr. Mancel Martínez, por su cuidadosa revisión del manuscrito.
Bibliografía
1. Aristizábal H, Garcés F. el niño politraumatizado. en: Correa JA, Gómez JF, Posada R (eds). Fundamentos de pediatría. Medellín, Colombia: Presencia 1995: 2379-91.
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3. Correa JA. Quemaduras. En: Correa JA, Gómez JF, Posada R (eds). Fundamentos de Pediatría Medellín, Colombia: Presencia 1995: 2407-11.
4. McLoughlin E, McGuire A. The causes, costo. And prevention of chilhood burn injuries. Am J dis Child. 1990; 144: 677-683.
5. Mercier C, Blond MH. Epidemiological survey of chilhoood burnas injuries in France. Burns. 1996; 22: 29-34.
6. Ngim RC. Epidemiology of burns in Singapure children -an 11- year study of 2288 patients. Ann Acad Med Singapure 1992; 21: 667-71.
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