Dora Alicia Morales de 63 años acudió al médico. Allí ella le decía que no tenía nada y que estaba bien. Volvió al médico y le dijo que se había puesto cansona y que no le detectaba nada. Pero le dolía al seno y no se aguantaba el brasier.
Entonces le mandó una ecografía y una mamografía. En la ecografía le salió que era algo muy diminuto. La mamografía se la mando a repetir. Le hicieron la biopsia y en ese momento le confirmaron el diagnóstico. Allí se había gestado un cáncer. Le mandaron una serie de exámenes para la cirugía y le hicieron reconstrucción de seno que para ella fue una bendición de Dios. (Lee también: Ahora sabe lo que puede pasarle)
Recibió la noticia sola, porque ya su esposo había fallecido de cáncer de colon. Ella vivió de cerca su enfermedad y por eso ya sabía a qué se enfrentaba con este diagnóstico que le habían entregado. Le hicieron la cirugía y ahora está con medicamentos para prevenir otros tumores.
Ahora tiene que realizarse nuevos exámenes del seno. En Diciembre tiene otra cita. Está en controles y todo en medio de la soledad que le dejo la muerte de su compañero. (Mira también: Una mezcla de sentimientos)
Su familia está en Manizales. Llamó a una hermana y para ella fue muy duro cuando ella le respondió que pereza ser tan enferma. Esta respuesta la derrumbó y se atacó a llorar porque esta sola. Ni siquiera su propia familia entendía su problema.
Ella vive sola en Bogotá. Está en una casita que logró rentar al sur de Bogotá. Tiene una compañera de trabajo que ha sido su mayor soporte en esta enfermedad. Trabajaba en confecciones. Pero ahora no está trabajando. Antes confeccionaba chalecos, pantalones y sacos.
La operaron en San Pedro Claver y la están atendiendo en San José. Además los médicos le han dado el mejor de los tratos y hasta ahora ha salido bien librada de sus dolencias.
Cuando murió el esposo le dio una fuerte depresión. No tiene a nadie. Su soledad la sume en una profunda tristeza. Tiene una amiga que vive pendiente de ella y fue su única compañera en la cirugía. Ella ha sido su madre, su hermana y todo lo que tiene en este momento. Vive cerca de ella sola en una casita.
El médico la encuentra bien. Le queda otra mamografía, una ecografía y siete exámenes de sangre. Para ella ahora todo es más moderno. Ella siente que le dio el cáncer por la depresión, la soledad y la tristeza de haber perdido a su esposo. Ella sabía que se quedaba sola. Su matrimonio duró 35 años y cuando llego el 2004, no tenía nada. Solo recuerda que la hermana tenía cáncer de seno y eso le costó la vida. (Te puede interesar también: Quiero estar cerca de mi hermana)
Ahora Dora Alicia es pensionada. Ella es devota de La Virgen Milagrosa y el Señor de los Milagros. Hoy se ha puesto en manos de ellos.
Un día para Dora Alicia es eterno. Aunque desde muy temprano se va para donde su amiga. Se está todo el día con ella y le hace los mandados para no estarse sola en la casa. Allá al menos ella ve niños. Cuando se enfermó recibió mucho apoyo de sus compañeros de trabajo. Estaba desmoralizada y muy amargada. Además por el desprendimiento de su familia. Sus compañeros de trabajo le dieron mucho valor para que se reconstruyera el seno.
Ahora come bastante verdura, ayuda a su amiga en los quehaceres de la casa y asiste a conferencias promovidas por Amese para tener entretención y conocer más de la enfermedad que hoy la aqueja cuando pensaba que iba a descansar.
