Mejores Plantas para Enredaderas

Las plantas enredaderas o como también se le conocen, plantas trepadoras, son una excelente opción natural para adornar los espacios, tanto exteriores como interiores, en nuestro hogar.

Estas plantas como su nombre lo indica, se enredan en una malla o pared, o algún elemento que les permita sostenerse y crecer. El resultado, es un ambiente lleno de color y muy natural.

Existen muchas opciones de plantas enredaderas, aquí te vamos a contar cuáles son y qué cuidados especiales necesita para que llenes de color tus espacios.

Plantas Enredaderas para tu Hogar

Dama de noche

La consideran como una de las enredaderas más lindas y sencillas, su combinación de colores se ve muy natural y sobrio, el verde de sus hojas y el blanco de su flor es una combinación que queda muy bien en cualquier lugar.

Además, esta planta desprende un aroma delicioso y muy natural, cuando pases por el lugar donde está, te va a encantar ese aroma.

Hiedra

Es una trepadora que crece muy rápido, por lo que es la más común, además que sus cuidados también son muy sencillos. Crecen cerca de 10cm a 20cm por año, se deben regar entre 2 y 3 veces a la semana si hace mucho sol de lo contrario basta con 1 o 2 veces.

Lo mejor es que la hiedra esté en la sombra, aunque el sol no le hace daño y también la ayuda a crecer, esta planta tolera mejor la sombra.

Glicinia

Es una enredadera bellísima, si quieres llenar de color lila tu hogar, esta es la planta ideal, crece muy rápido y el resultado es un paisaje precioso.

Si las condiciones son óptimas, en 1 año esta planta alcanzará el metro de altura, para ello se recomienda un suelo ácido, rico en potasio y fósforo y con exposición a sombra.

Buganvilla

Es una planta espectacular, florece muy bonito, puede crecer hasta los 12 metros de altura y crecen en cualquier terreno y clima.

Como crecen tanto es importante podarla, para lugares cálidos se recomienda podarla en los tiempos fríos y en lugares fríos, podarla en la época de primavera.

Jazmín

Es una planta enredadora bellísima, soporta tanto el verano como el invierno, pero requiere de cuidados especiales. Por ejemplo, durante el verano deberás regarla cada dos días y durante el invierno, solo una vez a la semana.

Sus hermosas flores blancas, crecen durante los meses de mayo a septiembre, pues los meses de calor le dan más fuerza a la planta.