Harshila Patel, Monika Wagner, Puneet Singhal, Smita Kothari. BMC Infect Dis 2013;13(39)
Las verrugas anogenitales (VAGs) son una enfermedad común, altamente contagiosa, causada por el virus del papiloma humano (VPH), cuyas tasas de recurrencia alta contribuyen a orientar los gastos médicos, pérdida de productividad y el aumento de impacto psicosocial. Debido a la falta de una revisión sistemática de la epidemiología de VAGs en la literatura, este estudio revisó la literatura médica publicada sobre la incidencia y prevalencia de VAGs.
Se realizó una búsqueda exhaustiva de la literatura de la incidencia y prevalencia en todo el mundo de VAGs entre 2001 y 2012 utilizando el PubMed y EMBASE. También se llevó a cabo una inspección adicional de resúmenes de salud sexual relevante y conferencias sobre enfermedades infecciosas 2009-2011. Solo los estudios originales con poblaciones de adultos en general (es decir, incluyendo al menos 20 años de edad a 40 años) fueron incluidos.
En general (hombres y mujeres combinados) informaron la incidencia anual de las VAGs (incluyendo nuevas y recurrentes); variaron desde 160 hasta 289 por 100.000, con una media de 194.5 por 100.000. Nuevas tasas de incidencia entre los hombres iban de 103 a 168 por cada 100.000 habitantes, con una mediana de 137 por 100.000 y en mujeres 76 a 191 por cada 100.000 habitantes, con una mediana de 120.5 por 100.000 habitantes por año. La incidencia de VAGs recurrentes fue de hasta 110 por 100.000 en mujeres y 163 por 100.000 en varones. La incidencia alcanzó su punto máximo antes de los 24 años de edad en las mujeres y entre 25 y 29 años de edad entre los hombres. La prevalencia general de VAGs según bases de datos administrativos retrospectivos o revisiones gráficas médicas o informes médicos recogidos prospectivamente osciló entre 0.13% y 0.56%, mientras que varió de 0.2% a 5.1%, según los exámenes genitales.
La literatura sugiere que las VAGs se han generalizado y la prevalencia depende de la metodología de estudio, como se sugiere por las tasas más altas reportadas a partir de los exámenes genitales de rutina frente a los registros de tratamiento. Sin embargo, sigue existiendo la necesidad de más estudios basados en la población de ciertas regiones como África, América Latina y Asia del Sur para dilucidar la epidemiología global de esta enfermedad.
