¿Cómo Ser Buen Profesor?
ROBIN BIOJO, MD.
- Primero que todo, no se empeñe en serlo. Lo logrará más fácil espontáneamente.
- Quiera mucho a sus alumnos. Así, ellos aprenderán a quererlo.
- Mire ante todo la parte buena de los estudiantes. Ellos siempre quieren aprender.
- El estudiante usualmente aprenderá mucho más de lo que usted trata de enseñarle si le da la oportunidad.
- Genere condiciones cálidas en la relación con ellos. Esto facilitará un ambiente sano y le dejará espacio a la naturalidad.
- Haga preguntas claras. No incite al estudiante a que dé respuestas erróneas.
- Aun ante una respuesta errada habrá una razón para emitirla. Permítase analizarla para darle oportunidad y solidez a la correcta, a fin de comprender un poco mejor la verdad.
- Admita que usted “no se las sabe todas” y que también hace parte del proceso de aprendizaje.
- Déjeles ver cuánto aprecia su participación en las labores diarias.
- Permítales sentir que usted puede ser su amigo, a quienes tienen acceso para expresar sus sentimientos, dudas y certidumbres.
- Recuerde que paralelamente a la formación académica se está gestando la formación humana cuyo embrión moral es tan importante o más que el primero.
- Deje espacios para la reflexión. No atiborre a sus estudiantes con excesiva información.
- Permita que ciertos interrogantes sean respondidos por ellos mismos. No necesariamente en su presencia.
- No esté calificándolos siempre y de inmediato. Conózcalos un poco más antes de hacerlo.
- Acepte que ellos lo califiquen y antes de repudiar sus críticas deje que le expliquen sus criterios.
- Mire siempre el aspecto positivo de ellos. Por ejemplo: su interés, su cumplimiento, su respeto por el conocimiento.
- Hágales saber cuán importantes son e!!os para usted. Llámelos por su nombre y piense cómo sería su comportamiento si uno de sus hijos hiciera parte del grupo que ahora está formando.
- No sienta que la responsabilidad es sólo suya. Nunca lo será. Haga su parte que la vida hará el resto. No se convierta en un celador-vigilante de ella.
- Vuelva a su casa preguntándose. “¿Cuánto aprendí hoy y cuánto aprenderé mañana?”
- Por último, no me crea todo lo que he dicho, que a la postre … yo tampoco soy su maestro.
Depto. de Cirugía, U. del Valle-HUY Cali, Colombia.
Correspondencia:
Dr. Robin Biojo. Centro Médico Imbanaco, Cons. 219. Cali.
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