Imbalance Muscular como Factor de Riesgo para Lesiones Deportivas, Discusión

Lesiones Deportivas en Rodilla

La literatura ofrece una amplia gama de velocidades de prueba para la evaluación isocinética de las extremidades inferiores.

La relación entre los extensores de la rodilla y sus flexores se modifica a medida que aumenta la velocidad.

Por regla general los 60°/s se han utilizado como velocidad principal de prueba para la evaluación isocinética concéntrica. La relación entre la fuerza de los extensores/flexores de la rodilla es la más analizada.

Históricamente con base en pruebas realizadas en Cybex se describe como valor normativo una proporción del 66% (relación 3:2) entre los isquiotibiales y cuadriceps a una velocidad de 60°/s, donde es posible evaluar la fuerza máxima sin generar estrés a nivel de la articulación de rodilla.

En un estudio realizado por (14) Orchard, J. Marsden, J. y Lord, S., se sugiere que las medidas de esta relación y el Torque Pico a velocidades de 60°/s proveen mayor información en términos de predicción de lesión para este grupo en comparación a velocidades más altas.

Esta observación apoya el estudio de Heiser y Col (22), que usó la relación de 0.60 para prescribir un programa de entrenamiento de fuerza muscular en las escuelas de fútbol.

Estudios previos han sido inconclusos con respecto a la mejor velocidad para la prueba, Jonhagen sugirió velocidades más bajas y otros sugirieron velocidades 180°/s o más rápidas.

También es posible evaluar la fuerza explosiva o rápida a una velocidad de 180°/s :

En un estudio realizado por (23) Oberg (1986) en futbolistas activos de sexo masculino con edades comprendidas entre 24 a 26 años, se planteó una relación de la fuerza entre flexores y extensores en el lado dominante de 0.75% a una velocidad de 180°/s.

De igual manera a velocidades de 300°/s se han establecido rangos de proporción de flexores y extensores entre 80-85%.

En un estudio realizado en Colombia por el Centro de Servicios Biomédicos, Coldeportes Nacional, (In press) se establecieron promedios para la relación flexo-extensora de acuerdo con los datos obtenidos en las evaluaciones isocinéticas: 60% para la velocidad de 60°/s; 63.% para la velocidad de 180°/s y 63.% para la velocidad de 300°/s.

Con respecto a las lesiones deportivas en rodilla:

Se encontró que las lesiones músculo tendinosas presentaron mayor incidencia seguidas por las lesiones ligamentarias, confirmando así, con base en los resultados de este estudio, que las lesiones más comunes en la práctica del fútbol son de este tipo.

Así como, (18) Tucker, A. M. (1997) reportó que «las lesiones músculo-esqueléticas son las lesiones que comúnmente afectan la extremidad inferior, incluyendo las contusiones, desgarros músculo-tendinosos agudos y crónicos y lesiones ligamentarias de rodilla y cuello de pie».

Según los resultados del presente estudio se encontró que los futbolistas lesionados no presentaron imbalance muscular con una frecuencia significativa mayor que los futbolistas no lesionados.

Kramers de Quervain, I. y cols., encontraron que no existían bases sólidas para el argumento en el cual se interpreta al «imbalance muscular como una causa de inestabilidad patelar y tensiones de importancia en las estructuras pasivas de la articulación » (8).

Teniendo en cuenta que la medición de la fuerza isocinética es altamente reproducible (Error < 3%) :

Se puede establecer que no hay una clara relación entre el imbalance muscular y el riesgo de presentar lesiones de rodilla, en deportes en donde esta articulación esta altamente comprometida.

El imbalance muscular no es el único factor descrito para aumentar el riesgo de lesiones deportivas en rodilla.

Otros factores que también pueden influir específicamente no fueron tenidos en cuenta en la presente investigación. Con respecto a estos factores de riesgo se describen factores inherentes al futbolista (intrínsecos) y otros totalmente externos al jugador (Extrínsecos) que representan un elemento clave en la prevención de los mecanismos de las lesiones de la rodilla.

Usando criterios amplios de un rango de normalidad para la relación de la fuerza entre flexores y extensores no se encontró ninguna asociación, aún utilizando otros criterios de imbalance. (50-60%; 60-70%; 65-75%; 70-80.

Otro factor que pudo llegar a influir en el proceso de lesión deportiva de los futbolistas fue la sobrecarga deportiva. Se encontró que el 15.9% de los jugadores pertenecía a dos categorías deportivas que les implicaban un entrenamiento y competición doble en comparación con otros jugadores, lo cual originaba una mayor predisposición a sufrir una lesión.

Se encontró adicionalmente, que un porcentaje mínimo de los jugadores presentaron un antecedente de lesión de los cuales la mayoría tuvieron imbalance muscular a una velocidad de 60°/s y sufrieron una lesión deportiva posterior.

Factor de riesgo para lesiones deportivas en rodilla en futbolistas profesionales.

De acuerdo con estos resultados se puede llegar a pensar que el antecedente de lesión puede constituir un posible factor de riesgo para lesiones deportivas en rodilla en futbolistas profesionales.

En el inicio de este estudio, los investigadores, no percibieron la importancia de tener en cuenta como factor influyente la dominancia del jugador y por ello, no fue incluido dentro de los instrumentos de trabajo.

Posterior a la recopilación y análisis de los datos se apreció la importancia de la dominancia pédica del jugador debido a que el lado preferente del futbolista puede tener relación directa con la presencia del imbalance muscular.

Se deben incluir en estudios posteriores el análisis de la totalidad de las lesiones de todo el miembro inferior (Cadera, Rodilla, Cuello de Pie y Pie) de los jugadores de fútbol, ya que, según la literatura, un imbalance muscular de rodilla puede tener implicación indirecta sobre otro segmento del miembro inferior.

Tal como lo sugiere (20) Knapick y Cols, quienes mostraron que «los imbalances en la fuerza y flexibilidad fueron prospectivamente asociados con las lesiones de miembros inferiores en general, pero no específicamente con el grupo muscular donde el imbalance fue encontrado ».

En conclusión no parece haber una predisposición a la lesión cuando existen imbalances musculares del grupo flexo-extensor de rodilla en jugadores profesionales de fútbol. Se recomienda realizar estudios prospectivos para aumentar la evidencia de esta asociación negativa.

Referencias

  • 1. BARFIELD, W.R. (1998, Octubre). The biomechanics of kicking in soccer. Clinics in Sports Medicine: Soccer Injuries, 17, 711-728.
  • 2. BOCARDO, I. (2000) Lesiones más comunes en el fútbol. Revista digital sobre entrenamiento deportivo DxT: Fútbol, 4, 209-232. Extraido Agosto 20, 2002 del World Wide web: http://www2.uca.es/dept/didac_efpm/jamar/REVISTA-DIGITAL-DXT-FUTBOL/cientfico4.htm
  • 3. BOSCO, C. (2000). La fuerza muscular: Aspectos metodológicos (1°Ed). Madrid (España): Inde.
  • 4. ERICHSEN, O. A., Thiele, E., Osiecki, R., Bittencourt, L.R., Gómes, A.C. (2001, Octubre) Vida activa para un nuevo milenio: Relación entre músculos extensores y flexores de rodilla en jugadores de fútbol. XXIV SIMPOSIO INTERNACIONAL DE CIENCIAS DEL DEPORTE.
  • 5. ESCOBAR, E. (2000). La rodilla en el deporte. (2a. Ed.). Madrid (España): Gymnos editorial deportiva.
  • 6. García, J. M., Navarro, M., Ruiz, J. A. (1996). Pruebas para la valoración de la capacidad motriz en el deporte (1a. Ed.). España: Gymnos.
  • 7. HINRICHS, W.H. (1995). Lesiones deportivas (1a. Ed). Barcelona (España): Hispana Europea S.A.
  • 8. KRAMERS DE QUERVAIN, I. A., BIEDERT, R., STUSSI, E. (1997). Quantitative gait analysis in patients with medial patellar instability following lateral retinacular release. Knee Surgery Sports Traumatology Arthroscopy, 5 (2), 95-101.
  • 9. KRIELLAARS, D. & Massey, K. (2000). Strength maps: Evaluation of neuromuscular performance using dynamometry. Orthopaedic Physical Therapy Clinics of North America: Exercise Technologies, 9:4, 563-580.
  • 10. LOSSIFIDOU, A.N. (2000). Inertial effects on moment development during isokinetic concentric knee extension testing. Journal of Orthopaedic & Sports Physical Therapy, 30:6, 317-327.

Artículos Originales

  • 11. MOMBAERTS, E. (2000). Fútbol: del análisis del juego a la formación del jugador (1a. Ed.). Barcelona (España): Inde.
  • 12. NICHOLAS, S.J. & Tyler, T.F. (2002). Adductor muscle strains in sport. Sports Medicine, 32:5, 339-344.
  • 13. OECHARD, J. W. (2001). Intrinsic and extrinsinc risk factors for muscle strains in australian football. The American Journal of Sports Medicine, 29:3, 300-304.
  • 14. ORCHARD, J. MARSDEN, J. LORD, S & GARLICK, D. (1997). Preseason Hamstring Muscle Weakness Associated with Hamstring Muscle Injury in Australian Footballers. The American Journal of Sports Medicine, 25:1, 81-85.
  • 15. PERRIN, D.H. (1994). Isocinética: Ejercicios y evaluación (1a Ed.). Barcelona (España): BELLATERRA.
  • 16. PRETINCE, W. E. (2002). Medicina deportiva: Técnicas de rehabilitación en la medicina deportiva (2a.Ed.). Barcelona (España): Paidotribo.
  • 17. Publicación de la Comisión médica del coi en colaboración con la federación internacional de medicina deportiva (2000). Prácticas clínicas sobre asistencia y prevención de lesiones deportivas (1a Ed.). España: Paidotribo.
  • 18. TUCKER, A. M. (1997, January). Common Soccer Injuries. Diagnosis, treatment and rehabilitation. Sports Medicine, 23 (1), 21-32.
  • 19. Lesiones Traumáticas de la Rodilla. (2000) Ken W.Moore y Cyril B. Frank.
  • 20. KNAPIK JJ, BAUMAN CL, JONES BH, et al. Preseason strength and flexibility imbalances associated with athletic injuries in female collegiate athletes. Am J Sports Med. 1991.
  • 21. Lesiones Específicas en Fútbol.
  • 22. HEISER TM, WEBWR J. SULLIVAN G. Et al. Profhylaxis and management of hamstring muscle injuries in intercollegiate football players. Am J. Sports Med. 12, 1984.

CLIC AQUÍ Y DÉJANOS TU COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *