Noticias Academia, Los Seminarios de Proyección a la Comunidad

Una Nueva Dimensión de la Academia de Medicina

Académico Alberto Hernández Sáenz

En el mes de junio próximo pasado, por iniciativa de los profesores académicos Juan Jacobo Muñoz y José Francisco Socarrás, la Academia Nacional de Medicina inició los Seminarios de Proyección a la Comunidad, que en forma regular se realiza dos sábados al mes.

Es la primera vez, desde su fundación en 1873, en que la ANM proyecta un plan tan ambicioso de servir a la comunidad, por medio de seminarios con el objetivo de presentar temas de palpitante interés nacional para la sociedad, la familia y la población de mayor riesgo, primordialmente los adolescentes.

Los seminarios están dirigidos a padres de familia, a los hijos adolescentes, a enfermeras, voluntarios, estudiantes de medicina, psicólogos, profesores y a profesionales del área de educación, salud y desarrollo social. Tanto la asistencia como la participación que se registraron indican el altísimo interés por los temas presentados y la preocupación que existe por ampliar el conocimiento en las materias tratadas.

Un comité de tres expertos académicos nombrados por el Presidente de la Academia, diseñó la planeación tanto sobre los temas y su secuencia, como sobre los ponentes y las normas. Lo anterior, realizado con unidad de criterio, permitió establecer una estructura definida y clara de los seminarios y aseguró el éxito de los mismos.

Se estableció un reglamento con las normas, procedimientos y metodología de trabajo. El coordinador de los seminarios, Académico Alberto Hernández Sáenz, dirige la aplicación de la metodología. En reuniones previas revisa con los ponentes el contenido del tema, establece sesiones de trabajo para coordinar la presentación, apreciar el lenguaje, para que éste sea de un nivel accesible a los no médicos.

El tiempo de presentación de los ponentes es de media hora cada uno y luego al terminar él se abre la mesa redonda con la participación de los asistentes.

Las preguntas se hacen por escrito y se distribuyen para ser contestadas entre todos los ponentes. El auditorio, que ha fluctuado entre 100 Y120 personas, ha tenido una riquísima participación, inteligente y activa, que además de permitir despejar dudas o ampliar información, ha sido una valiosa retroalimentación para los conferencistas.

El testimonio audiovisual está plasmado en varias cintas fonópticas que enriquecerán la videoteca de nuestra Academia y que son fácilmente duplicabIes para extender el impacto de beneficio comunitario y guardar así una memoria fílmica asequible en forma masiva a la población.

Los cassettes con las grabaciones de las exposiciones y los videos de las sesiones, constituyen un valioso material que en un futuro se aspira a editar, con el fin de conservarlo en la Academia, en forma abierta, como un servicio rotatorio para instituciones o entidades interesadas en los temas, que cuya presentación tiene el máximo valor, porque han sido realizadas por los profesionales más expertos en cada tema y su trabajo es el resultado de años de investigación.

Conforma este material un aporte valiosísimo a la ciencia, constituida ésta en un servicio a la comunidad, no sólo en el campo nacional sino internacional, porque mediante acertada duplicación puede difundirse internacionalmente por medio de las Academias Latinoamericanas y su asociación, ALANAM.

La admirable trayectoria de investigación de los ponentes y su experiencia profesional han merecido para ellos su presentación en la Academia y así mismo la Academia se ha enriquecido con esta experiencia, la primera en su historia preparada y abierta para la comunidad. La Academia abre así una nueva dimensión para el tercer milenio. (Lea también: Medicina, Las Nuevas Tecnologías en el Tratamiento de la Hipertrofia Benigna de la Próstata)

Es justo reconocer la forma generosa de colaboración de los ponentes, grupo selecto de profesionales colombianos, algunos de ellos académicos, constituyen un orgullo para Colombia.

La ciencia como servicio a la comunidad a través de la educación es compartir parte de nuestra vida o la vida misma. Podemos decir parodiando a Gibrain: “Bueno es dar cuando nos piden, pero es mejor ofrecer cuando no nos piden nada”.

ALBERTO HERNANDEZ SAENZ
Coordinador
Seminarios de Proyección a la Comunidad