Colombia: Características de la Población
1.3
Durante el siglo XX, Colombia sufrió grandes y significativos cambios en sus variable demográficas. Durante las tres primeras décadas, el país tenía altas tasas de natalidad (42 por mil) y de mortalidad (23 por mil) que producían un crecimiento relativamente bajo y constante, cercano al dos por ciento anual.
A principios de la década de los cuarenta, la tasa de mortalidad empieza a descender, hasta situarse en 13 por mil en la primera mitad de la década de los sesenta, mientras que la fecundidad se mantenía en niveles altos.
Este comportamiento demográfico, generó un alto crecimiento de la población que estuvo cercano al 3.4 por ciento en dicho periodo, dando lugar a lo que algunos demógrafos denominan “la explosión demográfica”.
A partir de la segunda mitad de la década de los sesenta, se comienza a percibir un descenso en la fecundidad, que se aceleró en forma rápida, lo cual junto con los descensos en la mortalidad llevaron hacia la segunda mitad de la década de los noventa a tener tasas de crecimiento de la población iguales a las tenidas en el comienzo del siglo, alrededor del dos por ciento anual, y más bajas de esta cifra para el año dos mil.
La fuerte caída de la fecundidad, iniciada a principios de la segunda mitad de la década de los sesenta, (de 7 hijos por mujer a 2.6) ha hecho que Colombia sea clasificada en el concierto internacional como un país de gran avance en la transición demográfica.
Es decir, como un país que ha logrado controlar su tasa de crecimiento en un periodo corto.
Paralelos a esta transición demográfica se llevaron a cabo en Colombia, importantes cambios tanto sociales como económicos y estructurales asociados al proceso de modernización del país como son: el proceso de urbanización, mejoramientos en los niveles de salud y educación de su población, empoderamiento de la mujer, planificación familiar y cambios en la estructura productiva y económica, entre otros. (Te invitamos a leer: Disponibilidad de Servicios Básicos)
Como efecto del proceso de transición, se producen cambios significativos en la distribución de la población por edad.
Primero se presenta una ampliación de la base de la pirámide de la población; es decir, le la población de menor edad como consecuencia del descenso rápido de la mortalidad, lo que lleva a que a población sea más joven.
Posterior a los rápidos descensos de la fecundidad, paulatinamente se inicia un proceso de envejecimiento de la población, con reducción de la población joven e incremento de la adulta.
La población de menores de 15 años, que representaba a mediados del siglo un poco más del 40 por ciento del total de la población; se incrementa a más del 45 por ciento en 1964 y posteriormente se reduce al 35 por ciento en 1993.
La población entre 15 y 64 años disminuyó del 56 por ciento a 52 por ciento y luego se incrementó a 61 por ciento en el mismo periodo. La población mayor de 64 años fue creciendo a partir de 1964 hasta legar al 4.3 por ciento en 1993.
Lógicamente estos cambios tienen implicaciones de gran importancia en la demanda de servicios y en la oferta de mano de obra. (Lea También: Colombia: Programas de Población y Salud Sexual)
La concentración de la población en áreas urbanas ha sido también el resultado de los diferentes procesos económicos, sociales y políticos que ha sufrido el país.
En la segunda mitad del siglo se produjo un proceso acelerado de cambio que ha llevado a una inversión en la distribución entre el área rural y urbana.
Hacia 1950 el 30 por ciento de la población vivía en las zonas ubanas. para 1993 la situación era totalmente al contrario; el 70 por ciento vivía en centros urbanos y este proceso se sigue incrementando.
A partir del principio de la década de los cuarenta se inició un desarrollo económico importante que llevó a muchos países a mejorar no solamente el nivel de ingresos por habitante; sino también de los niveles de vida y de salud de la población.
Paralelamente, la medicina tuvo un desarrollo sin precedentes, que posteriormente produjo impactos insospechados; la detección de agentes causales de muchas enfermedades infecciosas y parasitarias, la propagación del uso de insecticidas, antibióticos y vacunas; acompañadas de campañas de tratamiento y control de enfermedades infecciosas y parasitarias, a precios razonables; todo ello contribuyendo en forma significativa al descenso marcado de la mortalidad.
Colombia no fue una excepción en este campo y su tasa de mortalidad empezó a declinar en forma drástica y de 23 por mil se ha logrado reducirla a 6.
Igualmente, la reducción de los niveles de mortalidad y particularmente la infantil llevaron a aumentos significativos de la esperanza de vida al nacer; al obtenerse una ganancia neta cercana a los 15 años.
El hecho de disminuir la mortalidad general y la infantil por causas infecciosas y parasitarias; ha hecho cambiar el patrón epidemiológico colombiano y actualmente otras patologías, producto de las condiciones mismas del desarrollo, se han incrementado.
Actualmente las enfermedades y muertes causadas por accidentes, enfermedades cardiovasculares y distintos tipos de tumores, junto con la violencia; se han constituido en los principales factores de muerte y enfermedad en Colombia.
Otro de los avances más importantes que se han presentado en Colombia es el de la educación.
La tasa de analfabetismo en la población de 7-14 años bajó de 56 por ciento a 9 por ciento entre 1951 y 1993; y entre la población mayor de 15 años se redujo de 38 por ciento a 10 por ciento, en el mismo periodo.
Aunque los incrementos se han presentado en ambos sexos, el aumento en la educación ha sido mayor en las mujeres que en los hombres; en 1964 los hombres urbanos adultos tenían en promedio un año más de educación que las mujeres, en 1993, esta diferencia ya había desaparecido.
De igual manera en 1951 el 85 por ciento de la población con estudios superiores eran hombres y para 1993, el 50 por ciento eran mujeres; lo que ha llevado a una mejor posición de la mujer frente al hombre colombiano.
El proceso de transición demográfica también ha llevado a cambios en la estructura de la familia y el hogar. La familia extensa que caracterizó anteriormente a Colombia; ha cambiado a familias más pequeñas, con incremento de los hogares unipersonales y hogares con jefatura femenina.
La mujer ha alcanzado una participación diferente en el desarrollo de la sociedad; mediante rtiayores niveles de educación, mayores tasas de participación en el mercado laboral y económica y con edad más tardía a la unión.
me encanta
Hola Camila, muchas gracias por visitarnos y escribirnos. Esperamos que puedas encontrar más contenido de tu gusto. Feliz tarde.
me like esta pagina