Editorial: XIX Congreso Nacional Avances en Cirugía

Con un éxito sin precedentes ser realizó en el Salón Rojo del Hotel Tequendama de Santafé de Bogotá, el XIX Congreso Nacional Avances en Cirugía, de la Sociedad Colombiana de Cirugía, durante los días comprendidos entre el 4 y el 7 de agosto próximo pasado.

Fueron invitados como conferencistas del exterior, los profesores Robert Candan, Gonzalo Estapé, David Feliciano, Charles Lucas y Ori L. Rotstein, muy conocidos autores de libros y de inmensas contribuciones científicas publicadas en revistas quirúrgicas muy leídas en el ámbito científico mundial.

Satisfactoria fue igualmente la abundante participación de conferencistas nacionales a quienes las encuestas internas les dieron una magnífica calificación por el alto contenido científico de sus exposiciones y la excelente presentación de las mismas.

En el foro quirúrgico se presentaron 120 trabajos que representan el esfuerzo de los departamentos quirúrgicos de las diferentes escuelas del país y reflejan el afortunado momento que vive la cirugía colombiana.

Grandes elogios se escucharon para las sesiones de cines clínicos y para los simposios nacionales de Enfermería Quirúrgica y de Instrumentadoras Quirúrgicas que por su cuidadosa preparación constituyeron un real aporte al certamen general que nos brindó la Sociedad Colombiana de Cirugía, a cuya Junta Directiva saliente felicitamos de veras, en especial al presidente doctor Jaime De la Hoz y al coordinador de los congresos y cursos doctor Hernando Abaúnza, por la organización del Congreso que, sin lugar a dudas, por haber superado las 1.800 inscripciones, ha sido el de mayor asistencia hasta el momento.

La Asamblea General Ordinaria de la S. C. c., estudió los resultados positivos que presentó a su consideración la Junta Directiva de los cuales podemos mencionar la numerosa programación científica que viene cubriendo todo el territorio nacional; el gran número de nuevos socios activos que ingresaron a la Sociedad; el balance favorable que presentó la tesorería y el resultado general del desarrollo del Programa de Excelencia y Acreditación en Cirugía General. Se consideró y se aprobó en la Asamblea una modificación del estatuto, que aumenta la Junta Directiva en l vocal con su respectivo suplente, con miras a dar una mayor participación en ella a los departamentos colombianos, y se eligió a los dignatarios, de la nueva Directiva que quedó integrada por:

Presidente: Dr Jaime Escallón
Vicepresidente: Dr. Armando González
Fiscal médico: Dr. Camilo Casas
Secretario: Dr. Julio Alberto Nieto
Secretario Suplente: Dr. Alvaro Valencia
Tesorero: Dr. Carlos Espinosa
Tesorero Suplente: Dr. Luciano Aponte
Vocales principales: Dr. Carlos Lerma, Dr. Augusto Castro, Dr. Francisco Henao, Dr. Rafael Romero, Dr. Alvaro Ossa.

Vocales suplentes: Dr. Rafael Riveros, Dra. Myriam Serrano,Dr. Alberto Angel, Dr. Jorge Daes, Dr. Ciro Jurado Consejo Asesor de Expresidentes: Dr. Joaquín Silva, Dr. Mario Rueda, Dr. Hernando Abaúnza, Dr. José Félix Patiño, Dr. Camilo Cabrera, Dr. Erix Bozón, Dr. Assaad Matuk, Dr. Humberto Aristizábal, Dr. Jaime De la Hoz.

Por solicitud del expresidente doctor Erix Bozón, se aprobó dar un decidido apoyo a la Cooperativa Integral de Trabajo Médico Asociado FEMEc, recientemente creada con carácter nacional como respuesta a las modificaciones que se están efectuando en el ejercicio profesional de la medicina, con motivo de las reformas establecidas en el ISS y Cajanal, así como las que se producirán una vez que el Congreso de la República apruebe la ley 155 que modifica la Seguridad Social.

Todo induce a creer que el éxito de FEMEC se halla asegurado.

Mario Rueda Gómez
Editor

La Cirugía una Profesión con Gran Futuro

La cirugía general es sin lugar a duda una de las áreas de la medicina con mayor desarrollo en los últimos años. Los avances en el entendimiento de la sepsis, el control de las infecciones mediante el uso adecuado de nuevos y mejores antibióticos y el control de los factores que afectan la infección nosocomial, han hecho de la cirugía un procedimiento cada vez más seguro. Hoy día, sabemos mucho mejor cómo responde el organismo al estrés de la cirugía, pudiendo manipular acertadamente la respuesta neuroendocrina y de mediadores y, al mismo tiempo, dar mayor importancia a la cirugía con trauma mínimo. El cáncer siempre será una preocupación del cirujano general y debemos estar atentos a los desarrollos de los estudios clínicos que pretenden encontrar respuestas al sinnúmero de interrogantes que aún persisten.

Los dogmas de manejo están siendo cambiados con base en estudios debidamente llevados y nos queda todavía un camino largo por recorrer para lograr reducir en forma significativa la mortalidad ocasionada por cualesquiera de las formas más frecuentes de cáncer, y es precisamente el cirujano general el llamado a encontrar la respuesta a muchos de los actuales interrogantes.

El trauma y el trasplante de órganos son áreas neurálgicas, la primera endémica y la segunda como solución actual a situaciones irreversibles. Es también la cirugía general la llamada a aportar soluciones a estos problemas.

Los avances tecnológicos son permanentes desde la sofisticación de los elementos que utilizamos en la cirugía abierta, como nuevos materiales de suturas, y la utilidad cada vez mayor de las autosuturas y el desarrollo de productos biodegradables que permiten hacer anastomosis sin dejar cuerpos extraños en ellas.

La era de la cirugía endoscópica se impuso como nunca antes se había impuesto procedimiento alguno y, sin duda, la cirugía general será recordada como la especialidad que realmente le dio el impulso a la laparoscopia y a su aplicación en procedimientos operatorios. El desarrollo continúa y todos estamos ansiosos de ver lo nuevo que nos depara el futuro para lograr mejores resultados en beneficio de nuestros pacientes.

La cirugía virtual no es ya algo de ciencia ficción, es real y se desarrolla rápidamente y con éxito. Ella permite que un cirujano opere a distancia trasmitiendo vía satélite los movimientos que él realiza, a través de una pantalla valiéndose de guantes electrónicos trasmisores de los impulsos.

La cirugía general sí logra en la mayoría de los casos prolongar la duración de la vida y, lo que es más importante, mejorar y asegurar una buena calidad de la misma. Este concepto tiene cada vez mayor valor pues si entendemos como salud la capacidad para funcionar integralmente en un entorno físico y social y la cirugía alcanza este objetivo, estamos sin duda logrando mejorar la calidad de vida.

La cirugía general como profesión está siendo desafiada por la cambiante situación laboral y económica de toda la profesión médica. Los costos de la medicina son una preocupación permanente de los políticos y de la comunidad en general. Es precisamente esta preocupación sentida por todos la que nos obliga a actuar y responder a las inquietudes que ella genera, pues en buena parte está en nuestras manos el control de sus costos, haciéndolos razonables y proporcionados sin deteriorar la atención prestada.

Se ha pretendido decir que buena parte del problema de los altos costos de la salud son los honorarios médicos y esto definitivamente no es cierto en todos los casos, lo cual tenemos que probarlo. Pero si ello no es cierto, dónde está la causa de los altos costos? Principalmente en el exceso de exámenes diagnósticos, las hospitalizaciones prolongadas y en menor proporción el costo de los medicamentos.

De nosotros depende la racionalización del uso de los métodos diagnósticos fundamentales que hoy se emplean en la buena práctica de la medicina, pero que no remplazan el buen juicio clínico y el adiestramiento completo de un buen cirujano general; este último aspecto, definitivamente está en nuestras manos. En la medida en que formemos mejores cirujanos, éstos practicarán mejor medicina y cirugía, el uso racional de los métodos diagnósticos y tendrán menor incidencia de complicaciones, reduciendo así los costos del servicio.

Debemos tratar a todos los pacientes en la misma forma, evitando la tendencia al exceso en la solicitud de exámenes o en la utilización de drogas costosas no necesarias, en consideración a que el paciente tiene quien le pague los costos. Nos estamos engañando porque también es responsabilidad nuestra preocuparnos por tales costos, no importa quién sea quién los pague. Cuando los gastos en salud de un país alcanzan una alta proporción del producto interno bruto, el problema deja de ser preocupación de unos pocos y se convierte en problema de todos; es por ello que está en nuestras manos aportar soluciones reales y efectivas.

Tenemos dos grandes desafíos: el primero, recuperar la confianza en la profesión médica y específicamente en la cirugía, demostrando una preocupación real por los problemas sociales y económicos que enfrenta y aportando las soluciones que están en nuestras manos; el segundo, participar en el vertiginoso desarrollo de conocimientos en áreas de fisiología, metabolismo, infección, biología molecular, cáncer y otros, así como en los desarrollos tecnológicos que hoy nos permiten hacer una cirugía más científica, más refinada y más segura.

Jaime Escallón MD.
Presidente
Sociedad Colombiana de Cirugía