Los Resultados del Diseño Actual no se Relacionan con la Presencia o Ausencia de Lucro

Premisa 5

En cuanto a la quinta premisa, que plantea que el resultado de un sistema de salud basado en el fin de lucro es malo por definición, es fácil entender que esto no necesariamente es cierto, si se entienden los planteamientos sobre las premisas anteriores.

Así, la existencia del fin de lucro antes de la Ley 100, solo que en forma diferente, haría pensar entonces que el sistema previo también era malo por definición, pues también se basaba en el fin de lucro.

De nuevo, como lo plantea Daniels (1991), lo que debe contar en última instancia es el resultado que la sociedad desea. (Lea también: Fin de Lucro en Salud, Son Válidas todas las Premisas del Argumento?)

Si el resultado deseado es tener una mayor probabilidad de acceder a los servicios de salud en caso de necesidad, la prueba de fuego consiste en evaluar si se ha logrado este mayor acceso.

La evidencia de estudios recientes muestra que efectivamente la población con seguro de salud tiene mayor probabilidad de acceder a los servicios de salud y a obtener sus medicamentos cuando se enferma, en comparación con la población no asegurada (Tono, 2000).

En otro estudio de Bitrán y cols (2004) se muestra que la probabilidad de consultar a los servicios de salud entre aquellos que presentaron problemas de salud, es mucho mayor en los asegurados que en los no asegurados.

Claro que estas diferencias se pueden explicar también por el efecto de la selección adversa y del riesgo moral.

El primer efecto se refiere a que una mayor proporción de personas de mayor riesgo se afilian al seguro de salud, lo que explica porqué hay mayor probabilidad de consulta entre esta población. Y el efecto del riesgo moral se refiere a que la presencia del seguro reduce el precio para el asegurado y por lo tanto tiende a consumir más servicios que si no tuviera el seguro.

De todos modos, separando estos dos efectos es posible deducir que el seguro sí mejora el acceso de las personas a los servicios de salud.

Otra muestra indirecta del mejor acceso es la mayor proporción de consulta de prevención entre los asegurados, y la mejoría en la probabilidad de despacho completo de medicamentos entre 1997 y 2003 (Assalud, 2005), así como el menor gasto de bolsillo en medicamentos en todos los grupos de ingreso (Castaño et al, 2001).

Una forma alternativa de analizar el efecto del aseguramiento sobre el acceso, es calculando la proporción de personas que dejaron de consultar por falta de dinero.

El estudio de Bitrán y Cols (2004) muestra que esta proporción es mucho mayor en la población no asegurada, menor en los afiliados al Régimen Subsidiado y muchísimo menor en los afiliados al Régimen Contributivo.

Otro estudio (O’Meara, et al, 2003), realizado por la Universidad Javeriana durante un año seguido, muestra las mismas relaciones de gasto de bolsillo entre las diferentes modalidades de aseguramiento. Esto demuestra pues, que siendo la falta de dinero la principal barrera de acceso para las poblaciones pobres, el aseguramiento sí es un mecanismo que facilita el acceso, tal como lo muestra Tono (2000).

Ahora bien, la pregunta sobre si un modelo basado en el fin de lucro produce un efecto mayor o menor que uno no basado en éste, es imposible de responder en el contexto de un país.

Para demostrarlo empíricamente habría que tomar una muestra de países que estén desarrollando procesos de reforma similares, unos con sistemas basados en el lucro y otros no. Pero este estudio no se podría hacer por limitaciones metodológicas.

Otra posibilidad sería comparando el desempeño de las EAPB con fines de lucro y las que no lo tienen, para ver si hay una relación clara entre este factor y el desempeño.

Sin embargo, el estudio anual de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC, 2006), en el que se evalúa a las EPS por sus relaciones con las IPS, se muestra que de las cinco mejores calificadas, tres son con fines de lucro, y reparten utilidades entre sus socios.

Más aún, si se compara el conjunto de EPS con fin de lucro con el conjunto de EPS sin fin de lucro, sus puntajes promedios son muy similares (64,4 vs 65,9), y quizá la única diferencia importante se observa en el indicador de confianza (75 vs 85).

El otro estudio importante que analiza el desempeño de las EPS frente a los usuarios, es el estudio de la Defensoría del Pueblo (Mejía, 2005). Pero en este estudio tampoco se evidencia una gran diferencia entre EPS con o sin fin de lucro. Mientras en la evaluación de 2003 la diferencia era muy pequeña (63,6 vs 65), en 2005 esta diferencia se amplió ligeramente (68,7 vs 70,7).

Es evidente pues que no parece haber grandes diferencias en el desempeño de las EPS cuando se miran desde diferentes ángulos, lo cual sugiere que el efecto del fin de lucro no ha sido un determinante importante del desempeño del sistema.

Ahora bien, también es cierto que el fin de lucro no es más que un estatus tributario y no refleja necesariamente la orientación altruista o no de la EPS. Y por otro lado, el hecho que sea con o sin fin de lucro, no hace a una organización más propensa a la corrupción, pues en ambos casos puede suceder que haya empresas correctas y empresas corruptas.

Pero estas diferencias mencionadas muestran que aún si se entiende el fin de lucro simplemente como un estatus tributario, no parece justificarse un argumento en contra de las EPS con fin de lucro, al menos desde el punto de vista de la evaluación de su desempeño.

CLIC AQUÍ Y DÉJANOS TU COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *