Obituario, Académico Eduardo García Vargas

Académico Germán Peña Quiñones

No creo que sea exagerado decir que Eduardo García Vargas dividió en dos la historia de la anestesia y el cuidado intensivo en Colombia.

Antes de su aparición en la práctica médica en Bogotá, ya contábamos con reconocidos especialistas en el área de la anestesia, muchos de los cuales lo sobreviven, pero desde su llegada al país, estableció una diferencia en la forma como sus especialidades se ejercieron en Colombia.

Por supuesto que fue profundamente polémico; pero siempre, sus posiciones ante los pacientes, los médicos y las instituciones hospitalarias donde trabajó, reflejaron sus más firmes convicciones de una práctica médica basada en los mas profundos conocimientos médicos y en el ejemplo adquirido durante sus estudios de especialidad, además de mostrar el recio carácter que siempre lo identificó.

La dedicación que tuvo siempre al cuidado de sus pacientes y su constancia en mejorar la calidad de la anestesia y de formar, en todas las instituciones donde trabajó, mejores anestesiólogos, constituyen la mejor evidencia de su misión en la vida como médico.

Nació en Bogotá el 11 de noviembre de 1938, aunque generalmente presumía de ser huilense, que es lo que realmente era, en lo más profundo de su corazón; quería mucho a Neiva y allá iba a pasar la mayor parte de sus vacaciones.

Estudió en Bogotá en el Colegio de San Bartolomé y luego en la Facultad de Medicina de la Universidad Javeriana, donde terminó sus estudios en 1962. Lo conocí durante el primer año de estudios en la Facultad y desde entonces compartimos muchos momentos de estudio e igualmente, también muchos otros de esparcimiento.

Hizo el Internado Rotatorio en el Crawford W. Long Memorial Hospital de la Emory University en Atlanta y se graduó el 22 de marzo de 1965 con Tesis de Grado sobre Enfermedad de Takayasu. Reporte de un caso.

Posteriormente viajó a Rochester, Minnesota donde hizo residencia de Anestesia desde 1965 hasta 1968 en la Mayo Clinic, Mayo Graduate School of Medicine.

Allí mismo hizo residencia en Cuidado Intensivo y subespecialidad en neuroanestesia donde trabajó con uno de los grandes mentores que siempre recordaba, el Dr. John Michelfender, uno de los pioneros de la neuroanestesia en los Estados Unidos. (Lea: Don Pedro Laín Entralgo)

También realizó residencia en la subespecialidad de anestesia pediátrica en Los Angeles Children´s Hospital. En la Clínica también fuimos compañeros de residencia y me tocó sostener con él, profundas discusiones sobre temas políticos colombianos, en inglés.

De regreso a Bogotá en 1969, trabajó en el Hospital Militar Central y luego en la Clínica Shaio, donde fue Jefe de Anestesia hasta 1972 cuando pasó al Hospital San José de Bogotá, donde trabajó hasta 1977; allá fue Subjefe de la Unidad de Cuidado Intensivo.

También trabajó en el Instituto Neurológico de Colombia como anestesiólogo y como Asociado del Departamento de Investigación. Fue Director del Posgrado de anestesiología del Hospital Militar Central en 1969 y profesor de Anestesiología en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario de 1972 a 1977.

Posteriormente fue Jefe de la Unidad de Cuidado Intensivo del Hospital Universitario de la Samaritana desde 1977 hasta 1982 y de la Caja Nacional de Previsió Social desde 1980 hasta 1982 cundo ingresó a la Fundación Santa Fe de Bogotá, donde cumplió con la formidable labor de crear el Departamento de Anestesia y la Unidad de Cuidado Intensivo Quirúrgico.

Allí pudo desarrollar plenamente su personalidad creativa en la Anestesia, y deja un gran departamento que cumple con los más altos estándares internacionales de calidad y alumnos que como él, no son otros anestesiólogos más, sino expertos científicos que cumplen a cabalidad con los mas altos de niveles de la anestesia como arte como ciencia a nivel mundial.

Con el cuidado intensivo pasó algo similar; fue un pionero del nuevo concepto de unidad de cuidado intensivo que trata al paciente de acuerdo con todos sus parámetros fisiológicos y de cuerdo con los adelantos de la ciencia a nivel mundial. Allí también creó una escuela, a cargo de médicos anestesiólogos que ontinuarán su trayectoria.

Tanto en la creación del Departamento de Anestesia, como en la fundación de las Unidades de Cuidado Intensivo en el Hospital de la Samaritana y en la Fundación Santa Fe, el Dr. García estuvo acompañad por el Dr. José Felix Patiño quién lo guió y apoyó en todos sus proyectos.

El Dr. Eduardo García ingresó a la Academia Nacional de Medicina como Miembro Correspondiente en 1981 con el trabajo “Estudios Metabólicos en el Schok Hipovolémico” y ascendió a Miembro de Número el 7 de junio de 2000 con el trabajo “Medición de Oxígeno Venoso. Importancia y Monitoría”.

Eduardo García perteneció a muchas Sociedades Científicas nacionales e internacionales entre las cuales están: American Society of Anesthesiologists, Fellow on the American College of Anesthesiology, American Medical Association, Minnesotta Society of Anesthesiology, Society of Critical Care Medicine, Federación Médica Colombiana, Sociedad Colombiana de Anestesiología, Sociedad Cundinamarquesa de nestesiología, Miembro Honorario de la Sociedad de Anestesiología del Ecuador, Miembro Honorario de la Sociedad de Anestesiología de Guayaquil, Miembro Honorario de la Sociedad Peruana de Anestesiología, Miembro del Comité de Redacción, Revista Colombiana de Anestesiología. Además fue Presidente de la Sociedad Colombiana de Cuidado Intensivo y de la Sociedad Colombiana de Terapia Respiratoria.

La Academia Nacional de Medicina, su Junta Directiva, y todos los Académicos, se asocian al sentimiento de pesar que embarga a su familia y deplora la desaparición del Académico Eduardo García Vargas quién falleció el 29 de mayo de 2001.

Hacemos llegar las más sentidas condolencias a su esposa, la Señora Consuelo de la Vega, a sus hijos, a sus hermanos, a sus sobrinos y a todos sus amigos y familia.

Como amigo siento que Eduardo García está presente entre nosotros y será recordado siempre por sus obras, su personalidad, su tesón y porque dejó discípulos que sabrán continuar su obra.