Lesiones de Causa Externa: Discusión
La violencia es el principal problema social y de salud pública en Colombia, de magnitud creciente, deteriora la calidad de vida y genera grandes costos sociales, políticos, económicos, culturales y ambientales. No obstante, ésta puede ser reductible y prevenible (3, 18). Sólo en pérdidas materiales, que es la medición más conservadora, los costos directos de la violencia alcanzan cifras que representan hasta 8,4% del Producto Interno Bruto en Colombia.
Los costos económicos multiplicadores están relacionados con los impactos negativos de la violencia en la productividad, la acumulación de capital humano, el ahorro y la inversión. Todos estos impactos resultan en menor crecimiento económico y mayores niveles de pobreza para los países de la región, que a su vez alimentan los factores de riesgo estructurales para una mayor violencia en el futuro (2).
Existen varios sistemas de vigilancia de muertes violentas en Colombia, que aparecieron alrededor de 1985 (4). La vigilancia de las LCE permite ampliar el conocimiento en cuanto a la magnitud del problema, los grupos de población afectada y las características de las víctimas, y el lugar, tiempo y circunstancias relacionadas con el evento durante este período. Esta información permitirá plantear acciones para la prevención y el control de los diferentes tipos de lesiones (19, 20).
La mayoría de los sistemas de vigilancia dependen de la información recolectada por las instituciones de salud. En nuestro caso, el estudio partió de los datos de las historias clínicas de los pacientes atendidos en el Servicio de Urgencias. A pesar de la capacitación realizada a los médicos, aún se evidencian deficiencias en el registro, especialmente en aquellas variables relacionadas con la situación social o económica y en las derivadas de la conducta final del paciente. La continua supervisión en el registro de los datos es lo que nos garantiza la calidad de la información.
Según estadísticas de 2002 proferidas por el Instituto de Medicina Legal Seccional Cali la mortalidad en el sector aumentó considerablemente (21). Sin embargo, el incremento en el registro de pacientes dentro del SVLCE en el hospital no necesariamente implica un aumento en la violencia de la región y puede ser el reflejo de un mejor funcionamiento del SVE, con menor subregistro de los casos.
La edad, la densidad poblacional y el género influyen en la violencia a través de mecanismos distintos. En Latinoamérica, como en otras regiones del mundo, los homicidios son perpetrados mayormente por hombres jóvenes, tanto por razones biológicas (hormonales y fisiológicas) como por razones económicas, sociales y culturales (2), hallazgo que está muy acorde con lo mostrado en la pirámide poblacional de este estudio. La edad es uno de los factores demográficos que más afectan la probabilidad de ser agresor o de ser víctima. La mayor parte de las víctimas y agresores de la región son hombres jóvenes entre 15 y 24 años de edad (2).
En la actualidad se ha dado mucho énfasis al estudio del mecanismo de la lesión debido a que se ha mostrado que la «protección pasiva», a través de la modificación de agentes o del medio, es la que tiene mayor efectividad en la prevención de lesiones independientemente de la intencionalidad (1). En el estudio, la mayoría de los pacientes provenían de un sector marginal de Cali. Estas comunidades se asentaron en las décadas de los ochenta y noventa en territorios ejidos de la ciudad y construyeron barrios suburbanos sin las mínimas condiciones de salubridad. Aún permanecen sectores sin alcantarillado y acueducto, por lo que en épocas invernales las inundaciones y los deslizamientos deterioran más sus precarias condiciones de vida, generando alarma para la red pública de la ciudad.
Las políticas de salud y educación en el sector no han disminuido los índices delincuenciales ni la tasa de homicidios (22, 23). Uno de los fenómenos urbanos de mayor importancia en la región es la presencia de pandillas de jóvenes en los barrios pobres, donde se presenta un relevo generacional de los adolescentes involucrados en actividades ilícitas, constituyendo focos de violencia permanente (2). La falta de registros en la variable de nivel educativo no permite obtener conclusiones significativas a este respecto en el grupo evaluado.
Comparado con estadísticas presentadas por el Instituto Nacional de Medicina Legal Seccional Bogotá, en este grupo de personas fue más alto el porcentaje de lesiones no intencionales (62,7%) mientras que los accidentes de tránsito y las lesiones intencionales, la violencia intrafamiliar o los delitos sexuales tuvieron porcentajes más bajos (19). Entre los accidentes de tránsito, en el estudio los lesionados más frecuentemente son conductores de bicicleta (31%) o motocicleta (27%), contrario a otras publicaciones (24). En cuanto al mecanismo u objeto de la lesión correspondieron con mayor frecuencia a armas cortopunzantes o cortocontundentes. Por otro lado, mientras se refería que 70% de las agresiones eran causadas por personas conocidas (24), en el estudio predominaron los desconocidos. Sin embargo, se cuestiona hasta donde este hallazgo corresponde a un deseo de la persona lesionada de omitir información por «temor » o «plan de venganza».
La OPS propone aplicar el enfoque y los métodos de trabajo de salud pública en coordinación con otros sectores, para contribuir a disminuir y prevenir la violencia y las lesiones. Los SVE o vigilancia de salud pública han mostrado ser eficaces cuando se aplican adecuadamente para solucionar vacíos de información. Es claro que dadas las características y magnitud de la violencia, como problema social y de salud pública, su estudio y prevención convoca un trabajo conjunto, coordinado por autoridades de orden nacional o municipal.
A pesar que diversas estancias del gobierno hacen presencia en la comunidad no existe un proceso de interacción para el flujo de información y los canales de comunicación con la población son precarios.
Dado que las LCE no intencionales (accidentes) aportaron el mayor porcentaje en el sistema vigilancia, es importante socializar estos hallazgos a la comunidad del sector, los servicios educativos y las entidades de salud, para reforzar la educación en los diferentes grupos etários acerca de las guías predictivas del crecimiento de los niños (25), accidentes en el hogar, estilos de vida saludables, normas de seguridad en la vía pública y manejo inicial de los accidentes caseros. Asimismo, debe construirse un plan de desarrollo comunitario interinstitucional para resolver obras en infraestructura que sean prioritarias para la comunidad. Por las condiciones geográficas de esta comuna es preciso contar con un sistema claro de demarcación y la terminación de la red de alcantarillado público y vías de acceso, limitando la extensión de terrenos irregulares, cúmulo de escombros y lotes baldíos del sector.
A pesar de la tendencia observada en el reporte de casos en el SVLCE del HMCR, es necesario resaltar el incremento de la mortalidad y la morbilidad por lesiones en la zona, clara señal del deterioro de las condiciones de convivencia, mayor pérdida de los mecanismos racionales para resolver conflictos y pérdida de valores. Ante esta realidad, urge la necesidad de contar con información sobre las circunstancias, características, momentos especiales, factores asociados sobre los hechos de violencia o de lesiones no intencionales para generar propuestas de intervenciones preventivas, que se desarrollen de manera conjunta por grupos de trabajo interdisciplinario, involucrando otras disciplinas y áreas del desarrollo social (Psicología y Trabajo Social en nuestro caso), coordinado por autoridades de orden nacional, departamental y municipal, concentrando la atención de las fuerzas vivas comunitarias y de la red municipal (Policía Nacional, ICBF, Secretaría de Salud y Educación), lo que permite dar respuestas integrales y eficaces para disminuir o controlar la ocurrencia de lesiones (1, 2, 5).
El trabajo multidisciplinario es de vital importancia puesto que contribuye en la prevención y disminución de la violencia, más por el enfoque de las diferentes disciplinas en cuanto a la atención holística o integral, que permite un mayor reconocimiento del individuo en cuanto al desarrollo de sus potencialidades en el tratamiento físico, psicológico y social. Por tanto, se deberán focalizar recursos y esfuerzos en programas de prevención primaria especialmente orientados a la población adolescente que ofrece mayor vulnerabilidad al deterioro de sus condiciones de vida, al uso de sustancias adictivas y la conformación de grupos violentos (pandillas); entidades como los grupos juveniles, las diferentes iglesias del sector, la Junta de Acción Comunal, los grupos artísticos y los centros de salud deben ser forjadores de salud en la comuna. Especial atención merece el aumento en la prevalencia del maltrato familiar e infantil que ha venido destruyendo la institución de la familia como el primer espacio de formación de valores y estilos de convivencia pacífica.
Characterization of Patients with Lesions of Violent Traumatic Origin by Means of an Epidemiologic Surveillance System.
Abstract
Introduction: Trauma of violent cause is a major public health problem that severely affects the health and social and economic development of vast sectors of the population.
Materials and methods: An Epidemiologic Surveillance System was created at Hospital Mario Correa Rengifo in Medellín, Colombia, based on the institutional medical records, in order to analyze and thus identify pertinent variables for the purpose of defining the patterns of trauma and violence in the community.
Results: 5,236 subjects were registered in the period November 2003 through December 2005; 5,171 (99.4%) were older than one year and 72.1% were of the male sex; 52.0% of injuries occurred in public ways, 32.8% at homes, and 7.5% at the workplace. Activities that most frequently led to injuries were: recreational (33.0%), personal tasks (15.4%), and alcohol abuse (14.4%).
Using the Revised Trauma Score as indicator of severity of the injury, we found that 97.5% were of slight nature, 2.3% were of moderate nature, and 0.2% were of severe nature. Disposition of patients was utilized as the criterion of evaluation of the magnitude of the lesion: the majority (63.5%) of patients were discharged with home destination following primary emergency room care. Other multiple demographic and social and economic variables were analyzed in this study.
Conclusions: Analysis of data obtained from an epidemiologic surveillance system provides bases for the identification of population and geographic areas at risk of trauma and lesions resulting from violent behavior, which are important for further studies oriented towards the design and implementation of preventive measures. Key words: wounds and injuries, population surveillance, traffic accidents, violence
Referencias
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4. ESPINOZA R. Epidemiología de los homicidios en Cali. https://www.promosaludcali.gov.co/boletin/homicidiosl septiembre, 2005.
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6. Organización Panamericana de la Salud. Informe mundial sobre la violencia y la salud. Una herramienta básica contra la violencia. Rev Cubana de Salud Pública. 2004; 30 (4). https://www.bvs.sld.cu/revistas/spu/vol30_4_04/spu15404 septiembre, 2005.
7. OSPINA J, GUEVARA O, PARRA L, DÍAZ C, CORTÉS E, FIGUEREDO E, RODRÍGUEZ, A. Uso práctico de los índices de trauma. Rev Colomb Cir 1993; 8: 86-96.
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20. Alcaldía Mayor de Bogotá. Sistema de vigilancia epidemiológica de los accidentes de tránsito en Bogotá. https://www.fonprevial.org.co/htm/htm_redesign/prevencion_bogota septiembre, 2005.
21. Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Centro de Referencia Nacional sobre Violencia (2004). Forensis 2003 Datos para la vida. Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Bogotá.
22. Diagnóstico situacional de la población en situación de desplazamiento —PSD— asentada en el municipio de Cali. Trabajo presentado por la Oficina Gestión de Paz y Convivencia de la Gobernación del Valle, en convenio con la Organización Internacional para las Migraciones OIM con la financiación de USAID, 2005.
23. Convivencia pacífica en Cali. Santiago de Cali, 9 de diciembre de 2004. Proyecto lineamientos departamentales de una política en salud pública. Plan de Atención Básica Cedetes.
24. Salud Colombia. Disminuyen las muertes violentas en Colombia pero aumentan las lesiones. https://www.saludcolombia.com/actual/salud46/noticia46 septiembre, 2005.
25. Organización Panamericana de la Salud. Guías predictoras del crecimiento. Definiciones y métodos. Consenso nacional. Sociedad Colombiana de Pediatría, 1998.
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