Capítulo V: Conclusiones de Enfermedades Profesionales

diagnósticos de enfermedad profesional

Este informe hace evidente el subdiagnóstico, subregistro y diagnósticos de enfermedad profesional en Colombia. Dicho fenómeno puede ser explicado por varios factores.

Entre ellos se pueden citar:

a) la carencia de formación de los médicos en temas de medicina del trabajo

b) el escaso nivel de información de los trabajadores con respecto a los riesgos ocupacionales, los daños potenciales a su salud, sus deberes y derechos

c) el poco desarrollo de los programas de salud ocupacional de las empresas

d) las dificultades en la interacción técnico-administrativa entre las entidades de la seguridad social, como las formas de contratación entre las administradoras de planes de beneficios y los prestadores de servicios de salud, entre otras. (Ver también: Capitulo IV Proyección de costos generados por las enfermedades profesionales)

Con respecto a esta última variable, existen evidencias que indican que ciertas formas de contratación entre EPS e IPS se pueden constituir en una amenaza para el diagnóstico y registro de la enfermedad profesional.

Es el caso de la forma de contratación «por capitación», la cual puede explicar el bajo diagnóstico de las enfermedades profesionales en algunas EPS.

El proceso de recolección y análisis de la información reportada por las EPS y los Regímenes de Excepción, así como la información suministrada por Fasecolda, la ARP del Seguro Social y la Dirección Técnica de Riesgos Profesionales del entonces Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, hoy Ministerio de la Protección Social permiten destacar las siguientes conclusiones:

1. El proceso de recolección de la información

Evidenció que algunas entidades no enviaron la información, o reportaron parcialmente o con mala calidad los registros, identificando la falta de cultura respecto al reporte de la información de enfermedades profesionales, poniendo de manifiesto el no seguimiento al tema y el posible desconocimiento de su importancia.

Reconforta que el reporte de dicha información mejoró para el segundo año de análisis y evidencia la necesidad de hacer que este ejercicio sea instaurado de manera periódica y continua, permitiendo análisis anuales, de tal manera que el país conozca la evolución del tema y se tomen las medidas necesarias para mejorar la prevención, garantizar el reconocimiento de las enfermedades profesionales a los trabajadores y estimar la carga financiera de dichas enfermedades.

2. El número de diagnósticos de enfermedad profesional

En el Régimen Contributivo se ha incrementado en 253% entre los años 2000 y 2002. De la misma forma, la tasa de enfermedad profesional se incrementó en un 69%, pasando de 16 en el año 2000 a 27 diagnósticos en el año 2002, por cada cien mil cotizantes.

En el SGRP, la incidencia pasó de 24 a 22 diagnósticos por cada cien mil trabajadores afiliados, entre los años 2001 a 2002. En las FF.MM. la incidencia fue de 545, en Ecopetrol, de 98 y en el Magisterio, de 715 enfermedades profesionales por cada cien mil trabajadores.

A pesar del mencionado incremento en el Régimen Contributivo, el número de enfermedades profesionales detectadas y reportadas por las EPS continúa siendo bajo, 27 diagnósticos por cada cien mil cotizantes o 1.790 diagnósticos sobre un total de 6.751.530 afiliados cotizantes, durante el año 2002.

Lo anterior, comparado con cifras de la OIT o la OMS, evidencia un subdiagnóstico. Por lo tanto, se requieren medidas que permitan identificar las verdaderas cifras.

3. Con respecto a diagnósticos de enfermedad profesional

Detectadas por las EPS, en primer lugar se observa una coincidencia en los cuatro primeros diagnósticos de enfermedad profesional realizados por las EPS durante los años 2001 y 2002: a) Síndrome de Conducto Carpiano (SCC); b) Lumbago; c) Sordera Neurosensorial (SNS); y d) Sinovitis y Tenosinovitis (STS).

Al agrupar los diagnósticos por sistemas, se aprecia que el sistema osteomuscular fue el más afectado; es decir, tanto durante el año 2001 como durante el 2002, la primera causa de morbilidad profesional por sistemas diagnosticada en el régimen contributivo fueron los Desórdenes Músculo Esqueléticos (DME).

Revisando la literatura las sobrecargas mecánicas se encuentran entre los factores de riesgo relacionados con los DME.

De estas, las asociadas con mayor frecuencia a los DME son:

a) esfuerzo de alta fuerza (manipulación manual de objetos pesados)

b) manipulación frecuentemente repetida de objetos por muchos años

c) manipulación de cargas por mucho tiempo

d) malas posturas

e) carga muscular estática e inactividad muscular

f) manipulación repetida monótona

g) exposición a vibraciones16.

Llama la atención la ausencia de diagnósticos relacionados con los sistemas gastrointestinal y cardiocerebrovascular en el régimen contributivo, enfermedades relacionadas con factores de riesgo psicosocial. Este fenómeno pone de manifiesto la necesidad de definir criterios técnicos para calificar el origen profesional de dichas patologías.

De igual manera, la ausencia del diagnóstico de cáncer de origen ocupacional, conjunto de enfermedades que deben ser buscadas en los cotizantes jubilados, debido a los largos períodos de latencia de este grupo de patologías.

Lo anterior refuerza la necesidad de diseñar protocolos para el seguimiento a trabajadores que se han expuesto durante su vida laboral a sustancias con potencial carcinógeno.

También es importante mencionar el fenómeno observado con las dermatitis, por la reducida cantidad de diagnósticos durante el bienio de referencia, y porque un porcentaje significativo de los casos se encontraban en trámite ante las ARP a la fecha del reporte.

Es probable que al no estar las pruebas de provocación dérmica incluidas en el Plan Obligatorio de Salud (POS), las EPS no las están autorizando, siendo esta prueba fundamental para construir la relación de causalidad entre el agente laboral y la enfermedad.

Pero no solamente para construir la relación causal, sino para el manejo terapéutico adecuado del paciente, porque al no conocerse el agente causal no podrá eliminarse el factor de riesgo para eliminar la enfermedad.

Diagnóstico más frecuente informado en el SGRP

De la misma forma los datos permiten concluir que el diagnóstico más frecuentemente informado en el SGRP durante el año 2002 fue la sordera neurosensorial (SNS), con el 22% de los casos, seguido por el síndrome del conducto carpiano (SCC), con el 20%, y en tercer lugar, el lumbago con el 8% del total de diagnósticos.

Estos tres diagnósticos coinciden con los de mayor frecuencia informados por las EPS durante los años 2001 y 2002, lo cual quiere decir que existe congruencia en cuanto a diagnósticos en la información reportada por las EPS y las ARP.

Al igual que en el régimen contributivo. Cuando se agrupan los diagnósticos por sistemas se observa que el sistema afectado con mayor frecuencia es el osteomuscular.

Del análisis de la información reportada por los Regímenes de Excepción se concluye que en el Magisterio Nacional los tres diagnósticos de enfermedad profesional más frecuentes durante el primer semestre del año 2001 fueron la laringitis crónica, 30% del total de diagnósticos, seguida de los trastornos depresivos y la rinitis alérgica, con el 9% cada una.

En las FFMM el 58% de los diagnósticos durante el año 2001 y el 60% durante el 2002 correspondieron a sordera neurosensorial, siendo de lejos la primera causa de morbilidad profesional en este grupo de trabajadores.

En ECOPETROL en el año 2001 el 64% de los casos correspondió a sordera neurosensorial, SNS; para el 2002 los diagnósticos más representativos fueron el síndrome del conducto carpiano, SCC; el pinzamiento subacromial, el desgarro del manguito rotador y la compresión medular, cada uno de ellos con el 12%.

Las cifras antes citadas evidencian un perfil de morbilidad profesional definido que es congruente con los factores de riesgo a los cuales están expuestos los trabajadores.

4. Si se define una tasa de morbilidad de las poblaciones analizadas

Reuniendo los afiliados cotizantes al Régimen Contributivo, al Magisterio, las FF.MM. y Ecopetrol, da como resultado 6.394.902 trabajadores, sobre los que se reportaron 3.710 enfermedades profesionales.

Es decir, en Colombia en el año 2001 la tasa de incidencia de enfermedad profesional de estas poblaciones fue de 58 por cada cien mil trabajadores. Realizando el mismo ejercicio durante el año 2002 se obtiene una tasa de incidencia de 42 enfermedades profesionales por cada cien mil trabajadores.

En cuanto a los diagnósticos en estos trabajadores tanto durante el año 2001 como durante el 2002, las dos causas más frecuentes de enfermedad profesional fueron la sordera neurosensorial (SNS) y el síndrome de conducto carpiano (SCC).

5. Con respecto a la interacción entre EPS y ARP para el diagnósticos de enfermedad profesional

Se pueden observar dos fenómenos. El primero de ellos suministra indicios sobre la magnitud y la evolución de las controversias. Del total de casos calificados como de origen profesional por las EPS, 58% en el año 2000, 27% en el año 2001 y 3% durante el año 2002 fueron controvertidos por las ARP evidenciando una constante disminución en la controversia, lo cual puede reflejar un desarrollo conceptual y administrativo de las EPS y las ARP en la determinación de los diagnósticos de enfermedad profesional.

El segundo fenómeno consiste en el incremento del porcentaje de casos de enfermedad profesional en trámite, que pasó de 17% en el año 2000 a 48% en el año 2001 y 84% en el año 2002.

Si tenemos en cuenta estas cifras, así como el incremento constante en número de diagnósticos realizados por las EPS, pueden sugerir capacidades de proceso insuficientes para responder a la mayor demanda requiriendo revisar las interacciones entre EPS y ARP, de tal manera que se garantice una respuesta más ágil y oportuna al trabajador.

De las anteriores cifras surgen interrogantes como:

  1. ¿Qué ocurre con los casos que originan controversia?

2. ¿Cuántos de los casos controvertidos llegan a las juntas de calificación?

3. ¿Cuánto tiempo demora el trámite entre EPS y ARP y cómo afecta esto la calidad y oportunidad de atención a los trabajadores?

Dichos interrogantes deben ser entendidos como una necesidad de trabajo más coordinado entre los Sistemas de Salud y Riesgos Profesionales. Mediante el cual ganarán mutuamente y garantizarán derechos para el fin central de cualquier sistema de seguridad social: el trabajador.

6. Sobre el desempeño de las dependencias de medicina del trabajo de las EPS

Se puede afirmar que algunas EPS han venido consolidando su experiencia en la detección, reporte y recobro de las enfermedades profesionales. Por lo tanto pueden ser consideradas como casos exitosos de este proceso. En este sentido es importante que dichas EPS puedan compartir su experiencia con otras que presentan un menor desarrollo.

7. Con referencia al costo de las enfermedades profesionales

Se puede inferir, con base en las proyecciones realizadas en este informe. Y teniendo en cuenta las limitaciones de dichas proyecciones. Que las de 81.865 enfermedades profesionales esperadas para la población de trabajadores ocupados del país generarían costos de atención en salud por 54 mil millones de pesos y prestaciones económicas por más de 264 mil millones de pesos. Sin tener en cuenta los 1.129.737 días de incapacidad. Es decir, más de 3 mil años de producción perdidos. Ni los costos generados por patologías ocupacionales crónicas como el cáncer.

8. Finalmente, es importante mencionar que la información generada por las diferentes entidades incluidas en este informe constituye una oportunidad y un insumo fundamental para que se desarrollen programas destinados a proteger a los trabajadores de los factores de riesgo ocupacional que están causando daños a su salud.

Este informe desea mostrar el impacto social y económico que causan las enfermedades profesionales. Y cómo el subdiagnóstico y subregistro impiden conocer la magnitud de dicha situación. Ese impacto se traduce en pérdida de productividad. En pérdida de años de vida saludable. En disminución de la calidad de vida laboral y en pérdida de oportunidades para la prevención de daños a la salud de los trabajadores.

Consulte: Enfermedad Profesional en Colombia


16 GOHNET-RED MUNDIAL DE SALUD OCUPACIONAL. Boletín número 4 de 2003. P 9.

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VER 1 comentario

  1. MONICA dice:

    CUALES SERIAN LOS MECANISMO DE CONTROL QUE SE PUEDEN IMPLEMENTAR PARA LA DISMINUCION DEL SUBREGISTRO Y SUBDIAGNOSTICO DE ORIGEN LABORAL