Beneficios de la Terapia con Animales

Son múltiples los beneficios que se obtienen con estas terapias, entre los cuales sobresalen: instrumentales, fisiológicos, psicológicos y sociales.

Instrumentales

Para las personas sordas, es funda mental ser alertados de sonidos como alarmas y llantos de niños; en los estudios realizados por Mowry y cola boradores (1994) más de tres cuartos de los participantes indican que sus perros se desempeñan adecuadamente al alertarlos sobre diferentes sonidos importantes.(2) Comparativamente, las personas que poseen un perro para sordos son más conscientes de los so nidos importantes que antes de tener los y que las personas que no los tienen.

En cuanto a los perros de servicio, los propietarios de estos animales han identificado diferentes actividades de la vida diaria en las que sus perros les ayudan; dentro de ellas se pueden incluir desplazamiento en la calle, en la casa, obtener implementos para la comunicación, vestirse, arreglarse, llamadas de emergencia, bañarse e ir al baño y alimentarse. Dentro de todos los estudios la tarea que esconside rada como más importante es la de alcanzar objetos.

En el nivel de participación es posible afirmar a partir de las investigaciones que los perros de servicio asisten a sus usuarios a comprar, limpiar, vestirse y desvestirse, mantenimiento de la casa, cuidado de otros, tareas relacionadas con transacciones bancarias, ausentarse de la casa y emplear recursos de la comunidad. Un estudio de tipo retrospectivo mostró que sólo el 33,3% de los participantes se sentían cómodos viajando lejos de su casa antes de tener un perro para sordos, mientras que después de tenerlo el porcentaje aumentó al 85,7%; al parecer esto está relacionado con un aumento en la sensación de seguridad en el en torno.

En cuanto al empleo, los estudios sugieren que existe una tendencia creciente en este aspecto, aunque las características metodológicas de los mismos no permiten determinar si la obtención de un perro de servicio tiene un impacto positivo en esta área.

Fisiológicos

Algunas de las investigaciones realizadas son de carácter retrospectivo como las de Mowry y Fairman reali zadas en 1994 y 1998 respectivamente y citadas por Sachs-Ericsson y colaboradores; el primer autor se centró en el estudio de los efectos en la salud que reportan los poseedores de un perro para sordos, dentro de los que señalaron que su salud era problemática (constituían el 69% de la muestra), el 86% afirma que el perro había contribuido con su salud, aunque no se especifica cómo; el segundo estudio se realizó con personas que habían obtenido un perro de ser vicio, casi un 60% de los participantes re portó que les habían ayudado con el mantenimiento de su salud. En otros estudios se ha dicho que el estado de salud ha mejorado, a pesar de que los propietarios de los perros posean enfermedades degenerativas; aunque otros autores no han encontrado diferencias entre la salud de las personas que poseen un perro de asistencia y los que se encuentran en una lista de es pera para obtenerlo.

Los animales pueden prestar a las personas con discapacidades un servicio primordial y ayudarles a ser más independientes y a desprenderse un poco de la compañía de otras personas que limitan su libertad.

Psicológicos

Para las personas con sordera, paraplejia, tetraplejia o esclerosis un perro de asistencia constituye un apoyo psicológico valioso, ya que ofrece cariño, juego y compañía y realiza tareas como descolgar un teléfono. Además, favorece la relación de sus dueños con otros seres humanos.

Adicionalmente a los beneficios instrumentales que las personas reciben de sus animales de servicio, también pueden beneficiarse de sus relaciones con ellos; les ayudan a mitigar los efectos del duelo, normalizar respues tas fisiológicas, y moderar el estrés y promover respuestas positivas a los tratamientos, entre otros.

Los estudios retrospectivos evidencian que los poseedores de un perro de asistencia reportan que poseen un mayor control sobre sus vidas, mayor independencia, mayor autoestima, participan en más actividades, son más hábiles para manejar el estrés y han aumentado su confianza;(2) además se relajan mejor, se preocupan me nos por su salud y aceptan su discapacidad, sintiéndose menos deprimidos, irritables y solos (lo que puede deberse a que el animal facilita las in te racciones con otras personas, además de la compañía del animal en sí misma).

Entre los propietarios de un perro para sordos fue experimentada mayor independencia, sensación de mayor salud y actividad, mayor con fianza y mejor calidad de vida; dentro de las cosas que fueron descritas como las mejores de tener un perro para sordos la más citada fue la relacionada con alertar sobre sonidos importantes y la segunda es la compañía brindada por el animal.

Steffens y Bergler lle va ron a cabo un estudio de seguimiento entre personas que recibieron un perro de asistencia y otras que estaban en la lista de espera a los que se les entregaría 13 meses después. Dentro de los cambios observados se vio un mejoramiento psicológico en todos los participantes después de seis meses de tener al perro con ellos: mejoramiento sustancial en la auto estima, curva locus de control interno y bienestar psicológico, socialmente los participantes mostraron mayor integración con su comunidad; y demográficamente asistieron más a la es cuela y obtuvieron una mayor cantidad de trabajos de medio tiempo. Un hallazgo significativo es que, después de recibir el perro, cinco participantes que estaban separados o divorciados de sus es posas volvieron con ellas y otro de los individuos divorciados se casó de nuevo; además no se ha reportadoque los que tenían relaciones de tipo afectivo antes de recibir el perro las hayan interrumpido.(3)

Sociales

La presencia de perros de asistencia facilita la eliminación de barreras sociales mejorando la forma en la que la gente es percibida socialmente, facilitando el establecimiento de conversaciones.

En un estudio realizado por Marder y otros en 1989 se observaron las in teracciones de niños con discapacidad que usan sillas de ruedas acompañados o no por un perro de asistencia; tanto en la escuela con niños de la misma edad conocidos, como en un centro comercial entre desconocidos. Se observó que se miraba, conversaba y se establecía contacto corporal con los grupos niño-perro; además la calidad de la interacción era mejor. En el centro comercial los niños con perros de asistencia atraían más mi radas amistosas, lo que probablemente es un reflejo de la novedad de ver este tipo de dúos en si tiospúblicos y de que “El perro puede hacer que mirar sea más aceptable, particularmente entre personas extrañas(4). Este estudio soporta la hipótesis de que los perros de asistencia facilitan el reconocimiento social para niños con discapacidades, tanto en entornos familiares como desconocidos.

Adicionalmente los autores afirman que “El incremento en las exposiciones e interacciones entre pares discapacitados y no discapacitados puede influir en cambios de actitud positivos de los niños sin dificultades corporales.

Un mayor conocimiento de las discapacidades puede por si mismo facilitar interacciones más cercanas entre niños con y sin disca pacidades”.(4)

Finalmente sostiene que una de cada cuatro personas sonreía si el perro estaba allí.

Se ha visto que las interacciones sociales y la cantidad y calidad de las mismas aumenta debido a la tenencia de un animal de servicio, además de la existencia de un mayor sentido de pertenencia; fenómeno que se presenta tanto en los dueños de perros para silla de ruedas como en los que poseen perros para sordos. En este último grupo la vida social se ha vuelto menos problemática y se experimenta mayor aceptación social, reportando un cambio positivo en las interacciones con la comunidad oyente.

En el estudio mencionado y realizado por Sachs-Ericsson y colaboradores, se encontró que la posesión de un animal de asistencia reduce las horas de asistencia humana paga y voluntaria, en algunas ocasiones se debe a que este tipo de ser vicios prestados por otras personas ya no son requeridos, los participantes en el estudio afirman que incrementa ron su independencia debido a sus perros y que desarrollan relaciones y lazos con ellos que son imposibles de formar con las personas a las que se les paga para que vayan a sus casas. Las personas con discapacidades que requieren ayuda humana notaron que la presencia de un animal de asistencia incrementa las interacciones que tienen con sus cuidadores.(2)

En cuanto a los aspectos laborales se afirma que según las reglamentaciones existentes para personas discapa citadas se incluyen adaptaciones para permitir que realicen adecuadamente las labores relacionadas con su traba jo. “Un animal de asistencia puede en algunos casos reducir el número de adaptaciones requeridas por el empleado, ayudando al individuo a sal var las barreras preexistentes en el me dio”.(1) Cuando a un individuo no se le proveen comodidad y las facilidades necesarias se le está discriminando, lo que puede dar pie a una demanda de tipo penal.

Efectos de la Terapia con Animales

Según Cusack los animales de compañía:(5)

• Rompen barreras y establecen un tipo de comunicación eficaz (aunque sea sin palabras)
• Permiten que la gente experimente la sensación de ser alguien “de valor”
• Pueden enseñar a ser desinteresados.
• Están en una posición de servidumbre semivoluntaria
• Pueden estar involucrados en la cicatrización de traumas emocionales
• Son a veces un amigo, un confidente y un compañero (a veces un terapeuta)
• A menudo son un complemento para un terapeuta
• Permite a la gente experimentar la sensación de que alguien se preocupa por ellos
• Tienden a conseguir que la gente utilice sus propias fuerzas interiores para ayudarse a “sí misma”.

Dificultades Encontradas

• Desconocimiento del papel de los a ni males de servicio/terapia
• Desconocimiento de los derechos legales de los individuos con discapacidades
• Poca aceptación de los animales de servicio/terapia dentro de la comunidad
• Estilo de vida, creencias y prácticas religiosas y culturales
• Poca disponibilidad de animales de asistencia, y soporte de entrenamiento
• Carencia de recursos para adquirir y mantener un animal de servicio/terapia
• Desconocimiento de las necesidades y habilidades comparadas con expectativas razonables en cuan to al desempeño del animal de servicio/ terapia
• Desconocimiento de métodos alternativos para enfrentar la discapacidad
• Dinámica familiar y la actitud de los otros significativos.

Participación de Enfermería

Después de esta presentación nos preguntamos como enfermeras ¿Cuál es nuestro papel en estos procesos? Considero que la enfermera debe estar involucrada en todas las dimensiones (físicas, psicológicas, sociales, etc.) de las personas con una discapacidad.

Como ya se explicó los animales no sólo favorecen la recuperación y readaptación de las personas, sino que además realizan algunas actividades propias de los cuidadores tales como la movilización, cambios de posiciones, alcanzar y llevar objetos, y siempre están dispuestos a ello. En otras palabras son también una gran ayuda para que quien cuida pueda realizar otras actividades y disponer de tiempo para sí mismo. Por estas razones las enfermeras debemos trabajar estos aspectos con los respectivos pacientes, cuidadores, terapeutas, voluntarios y adiestrado res. Considerando además el cuidado físico, los hábitos de vida saludables, la pro moción de la salud, prevención de complicaciones, el apoyo y orientación a la familia y comunidad.

Debemos participar en equipos interdisciplinarios en la evaluación, seguimiento y adaptación de las personas (adultos o niños) que participan en estas terapias y o solicitan animales de asistencia.

Por otro lado, trabajar con animales nos permite mejorar el ambiente terapéutico, facilitar los procesos, obtener logros más rápidos y óptimos y la cooperación de los pacientes.

Lo más importante es iniciar un cambio de paradigmas en nuestros contextos (laboral, social, familiar) ya que aún existe un gran escepticismo al respecto.

Esto implica también abrir nuevas á reas de desempeño laboral, salir del ámbito clínico e institucional hacia el comunitario, social, laboral, escolar, fa miliar sin olvidar la investigación que nos presenta un campo apenas explorado en sus fases iniciales.

Referencias Bibliográficas

1. Duncan S, APIC State–of–the–Art. Report: The Implications of Service Animals in Health Care Settings (Special Communications). American Journal of Infection Control, 2000; 28(2):170-80.
2. Sachs-Erickson N, Hansen N, Fitzgerald S. Benefits of Assistance Dogs: A Review. Rehabilitation Psychology 2002; 47(3):251-77.
3. Steffens M; Bergler R. Blind People and Their Dogs: An Empirical Study on Changes in Everyday Life, in Self-Experience, ad in Communication. En: Wilson C, Turner D (editors). Companion Animals in Human Health. Capítulo 9. London: Sage Publications London. 1998. p. 149-57.
4. Mader B, Hart LA, Bergin B. Social acknowledgements for Children with Disabilities: Effects of Service Dogs. Child De velopment 1989 (60):1529-34.
5. Cusack O. Animales de Compañía y Salud Mental. Barcelona: Fundación Purina. 1991. p. 247.

Bibliografía

American Academy of Pediatrics. Guidelines for Pediatric Home Health Care. AAP. United States. 2002
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• Font E, Guillén Salazar F. Etología. Convivencia Hombre-Animal de Compañía. En: Los Animales en la Sociedad: Hacia un Nuevo Modelo de Convivencia. Capítulo 4. Barcelona: Fundación Purina. 1994. p. 59-108.
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5. Katcher A, Beck A. (Editors). Barcelona: Fundación Purina. 1983. p. 50-9.
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• Nathanson DE, de Castro D, et al. Effectiveness of short-term dolphin assisted therapy for children with severe disabilities. Anthrozoos 1997;10(2/3):90-100.
• Restrepo Arbeláez R, Lugo Agudelo LH. Rehabilitación en salud. Universidad de Antioquia. Medellín. 1995.
• Ruckert J. Terapia a cuatro patas. Barcelona: Fundación Purina. 1994.

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