Elección de una estrategia de liberalización

Estrategia de Liberación

Dada la magnitud tanto de los beneficios como de los problemas que pueden derivarse de la liberalización del comercio de servicios financieros; una cuestión que hay que abordar es cómo deben escalonarse la liberalización y las reformas que la acompañan para elevar al máximo los beneficios.

No existe norma universal alguna sobre una estrategia óptima. Ahora bien, hay unos cuantos principios fundamentales que parecen ser incontrovertibles. La liberalización no puede llevarse a cabo eficazmente durante períodos de importantes disturbios políticos y económicos, por ejemplo en caso de conflicto militar o hiperinflación.

Liberalización del comercio de servicios financieros

Como ya se ha indicado, entre las condiciones necesarias para que la liberalización se realice satisfactoriamente figuran una buena gestión macroeconómica, un adecuado sistema básico de supervisión bancaria y su aplicación efectiva, y la ausencia de importantes créditos políticos y demás abusos del sistema financiero.

El examen de las ventajas relativas de una liberalización «de un solo golpe» con respecto a una liberalización más gradual es digno de interés. La liberalización de un solo golpe, en la que todas las reformas necesarias se introducen simultáneamente o con gran rapidez, tiene una serie de ventajas: se evita una reforma incompleta y los grupos de intereses especiales no tienen tiempo de organizarse para combatir las reformas (Galbis, 1994).

Los países con tasas de ahorro bajas y sistemas financieros formales de pequeñas dimensiones y mediocre funcionamiento pueden cosechar grandes beneficios de una rápida liberalización (Johnston, 1994).

Las reformas más graduales pueden también tener importantes ventajas. Si el ahorro interno es elevado y el sistema financiero eficaz; los riesgos de una liberalización apresurada pueden superar los beneficios de una mayor rapidez en las reformas. Por otra parte, hay tiempo para adaptarse a las nuevas condiciones.

Puede llegarse a un consenso social y político; lo que hará aumentar la credibilidad de los compromisos de introducción de reformas y las perspectivas de que se realicen satisfactoriamente.

La liberalización del comercio de servicios financieros dentro de la Unión Europea; por ejemplo, se llevó a cabo satisfactoriamente a lo largo de varios años y haciendo gran hincapié en la persuasión del público con respecto a sus beneficios.

La cuestión de en qué medida y en qué etapa del proceso de liberalización tiene que haber estabilidad macroeconómica; y un régimen eficaz de reglamentación cautelar y supervisión depende también de las circunstancias de cada país.

Los países con antecedentes de crisis macroeconómicas y una débil estructura normativa e institucional tal vez deseen hacer mayor hincapié; en alcanzar las condiciones previas necesarias antes de emprender importantes esfuerzos de liberalización.

Otros países preferirán probablemente una mayor simultaneidad en la reforma. Cabe señalar, sin embargo; que la liberalización exterior podría e hecho acelerar las necesarias reformas de las políticas y reglamentaciones nacionales.

Como ya se ha indicado, los compromisos previos de liberalización, incluidos los contraídos en el marco de las negociaciones del AGCS; pueden constituir una provechosa contribución a un programa de reforma interna coherente y sostenido.

CLIC AQUÍ Y DÉJANOS TU COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *